G uadalajara, Jal. México. 1 de diciembre 2005.(EFE) Varios escritores mexicanos congregados en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) se mostraron sumamente felices al conocer que su compatriota Sergio Pitol ha sido galardonado hoy con el Premio Cervantes de Literatura.
«Es maravilloso, por dos razones. Es un gran escritor, de los mejores que ha habido en este país. Y otro porque se lo dan en el año de los 400 años del Quijote. Esas coincidencias son estupendas», dijo a EFE el novelista Ignacio Solares.
«Creo que para las letras mexicanas es un reconocimiento importantísimo porque Pitol ha sido uno de los escritores que mejor ha logrado percibir esa especie de inconsciente colectivo, sin necesidad de irse a lo folclórico», añadió.
Para Solares, la obra de Pitol, un novelista exiliado por voluntad propia durante casi tres décadas en las que ejerció como diplomático, traductor y editor, combina diversos aspectos «misteriosos, sociales, pero fundamentalmente literarios».
«Es un escritor en quien la literatura vale por sí misma», agregó Solares, quien destaca que los escritos de Pitol rebasan los paradigmas que establecen las nacionalidades.
Para el también novelista mexicano Alberto Ruy-Sánchez es un Cervantes «muy especial», que siente muy cercano.
«Es una noticia espléndida saber que un escritor que ha hecho un recorrido del mundo, una literatura mexicana cosmopolita, pero además excéntrica, con un pie en los países del Este, que ha explorado el arte de contar con enorme sabiduría y sabor por las palabras, y que además ha sido un hombre generoso, gane el Cervantes», dijo Ruy Sánchez.
Entre las obras de Pitol destacan El tañido de una flauta (1972), Juegos florales (1982), El desfile del amor (1984), Domar a la divina garza (1988) y La vida conyugal (1991).
El autor es el tercer mexicano que obtiene el Premio Cervantes después de que fueran galardonados con él Octavio Paz (1981) y Carlos Fuentes (1987).
Dotado con 90.152 euros (unos 105.000 dólares) la entrega del Premio Cervantes se celebrará el próximo 23 de abril en el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, la ciudad madrileña donde nació Miguel de Cervantes en 1547, en presencia del Rey Juan Carlos I de España.