viernes, julio 14, 2006

Literatura/ Velada en Bellas Artes para celebrar la vida y obra del poeta Sergio Mondragón


La Jornada
Viernes 14 de julio de 2006
ANA MONICA RODRIGUEZ

L a figura, vida y obra de Sergio Mondragón fueron celebradas durante la presentación del libro Poesía reunida (1965-2005), en el que convergen cuatro décadas de trayectoria literaria del poeta beat mexicano.

La noche del miércoles, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, la voz del polifacético poeta se escuchó para beneplácito de los presentes quienes disfrutaron de la ''frescura" y hechura de su obra. Los escritores Alberto Blanco, Luis Cortés Bargalló y Silvia Molina, directora del Centro Nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes, acompañaron a Mondragón a la presentación del libro editado por la Universidad Nacional Autónoma de México.

En el volumen se recopila la obra de los cinco libros que a la fecha ha escrito el poeta morelense, nacido en 1935: El aprendiz de brujo, Yo soy el otro, Pasión por el oxígeno y la luna, El ocre de los lodos y su reciente Hojarasca.

El poema, expresó Mondragón, es un artefacto que está hecho de sonido, movimiento y animación, porque así es su lenguaje. Sobre la poesía moderna sostiene que es ''una vía de salvación, una terapia de palabras, o quizás de una sola palabra: la que reinventa el mundo, la que funde al ser con la realidad verdadera de las cosas".

Poeta, periodista, traductor, ''aficionado al budismo", promotor cultural y estudioso de la cultura oriental, Mondragón leyó algunas de sus obras como la misma Artefacto, Teotihuacán globalizado, Salmones y lenguados y otra de prosa-poesía Exodo de los dioses, que hace elocuente referencia a los migrantes.

Frescura y originalidad

Alberto Blanco definió al autor como un poeta digno y cabal quien a lo largo de cuatro décadas mantiene una ''trayectoria limpia, orientada y orientadora".

La vida y obra de Sergio Mondragón, abundó Blanco, corren parejas y a final de cuentas son la misma cosa.

''Nada más lejos de este poeta que el afán de notoriedad y la gana de batallar por labrarse un pedestal; tanto su obra poética como su trabajo de traductor, promotor cultural, antologador y periodista ha estado siempre al servicio de los demás, al servicio de la poesía y de los poetas."

La figura y la trayectoria de Mondragón, continuó Blanco, ''han configurado casi sin proponérselo una suerte de leyenda, donde aparece como el gran poeta beat mexicano".

Mientras Cortés Bargalló dijo que en su obra más reciente el autor morelense ''nos permite constatar que más allá de la vocación de ruptura, que le dio notoriedad a la poesía de Mondragón desde sus inicios, los libros sucesivos que hasta ahora la componen han conseguido conservar sus rasgos de frescura y originalidad característicos".

Y citó al escritor Octavio Paz, cuando en 1966 dijo que a Sergio Mondragón ''le atrae la aventura del espíritu, el otro lado de la realidad, la otra orilla; busca la transformación, cree en las sustancias donadoras de visiones y su mística poética es corporal".

Así es, coincidieron los presentadores, como el poeta morelense de 70 años establece nexos entre la escritura, la naturaleza y la experiencia de la vida, y mantiene su compromiso con la literatura.