jueves, febrero 15, 2007

Libros / España: El éxito editorial «Las mujeres, que leen, son peligrosas»

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Portada del libro (Foto: Archivo)

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adrid 15 de Febrero 2007. (Ana Anabitarte/El Universal).- Las mujeres, que leen, son peligrosas (Maeva) se ha convertido en el éxito editorial del año en España.

Desde antes de Navidad, los ejemplares se han agotado en todas las librerías del país, e incluso en la editorial ya no quedan libros. Y todo a través del "boca a boca", porque ni se ha hecho promoción del libro, ni su autor, Stefan Bollman, ha ido a España a presentarlo ni ha concedido ninguna entrevista. Ha sido tal la demanda, que el mes que viene Maeva va a publicar una nueva edición, que llegará a México en abril.


¿Y qué tiene el libro para que haya tenido tanto éxito? Las mujeres, que leen, son peligrosas es una defensa a la libertad de expresión y un homenaje a los escritores y a todas las mujeres lectoras. Su autor repasa la historia de la lectura femenina desde la Edad Media hasta nuestros días. Recuerda que tuvieron que pasar muchos años antes de que las mujeres pudieran leer libremente lo que deseaban, tanto para su educación como por placer. Años en los que se limitaron a bordar, rezar, cuidar de sus hijos y cocinar, hasta que, a través de la lectura, del pensamiento, de la imaginación y del saber, vivieron experiencias que hasta entonces sólo estaban reservadas a los hombres. Y entonces, se volvieron peligrosas.

Para mostrar este recorrido, Bollman selecciona una serie de pinturas, dibujos, grabados y fotografías de mujeres leyendo, realizados por varios artistas, desde la Edad Media hasta el siglo XXI. Desde Rembrandt hasta Hopper, pasando por Vermeer, Manet, Matisse, Casas y por la fotógrafa Eve Arnold. Se trata de imágenes que van acompañadas de un texto del escritor, en el que explica el contexto en el que fue creada la imagen, quién es la lectora, y el texto que está leyendo.

El libro empieza con la imagen de la Anunciación de María, del pintor Simone Martini de Siena, en la que se ve a la Virgen sorprendida por el ángel en plena lectura. El texto nos explica que la Virgen ya no es la inocente ingenua que los teólogos solían reflejar, sino una mujer inteligente que se apropia del saber y el conocimiento no por obediencia, sino gracias a la lectura y al estudio. Y concluye con la fotografía de Marilyn Monroe leyendo el Ulises, realizada en 1952 por Eve Arnold. En el texto, el autor cuenta que fue a ver a la fotógrafa para preguntarle si de verdad la actriz leía a Joyce, y ésta le respondió que Marilyn no sólo leía el libro, sino que le gustaba mucho y lo leía en voz alta.

Las mujeres, que leen, son peligrosas también incluye un prólogo realizado por la editora catalana Esther Tusquets, en donde nos muestra, de una forma íntima, la lucha de las mujeres por tener acceso a los libros y el conocimiento, y la discriminación que tuvieron que sufrir para lograrlo.

Tusquets recuerda cómo durante siglos se dificultó el acceso de la mujer a la lectura y se les prohibieron determinados libros. Y explica que a muchos hombres las mujeres que leen les parecían sospechosas "porque la lectura podía minar en ellas una de las cualidades que ellos mismos más valoraban: la sumisión. Todavía cuando yo era niña, en la España de los años 40, algunas de las amigas de mi madre me advertían escandalizadas que el exceso de lectura y de saber me llevaría a tener mayores problemas con los hombres", cuenta.

Para la editora, el acceso de la lectura supuso un gran avance para la mujer. "Le dio mayor confianza en su propio valer, la hizo más autónoma, la ayudó a pensar por sí misma y le abrió nuevos horizontes", dice. Y ahora que la lectura se ha generalizado y ha perdido poder, ¿son peligrosas las mujeres que leen? Para contestar a esa pregunta Tusquets cita a un amigo suyo al que le hizo esa pregunta y quien le respondió que a él, las que le daban más miedo "son las que no leen".

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