domingo, mayo 04, 2008

Noticias / México: La FIL renuncia a usar el nombre de Rulfo

.
Fueron los comentarios de Tomás Segovia los que precipitaron la pugna. (Foto: Marco Polo Guzmán / Cuartoscuro)

C iudad Juárez, Chihuahua, 29 de abril, 2008.- (RanchoNEWS).-Luego de más de dos años de batallas legales con la familia del autor de Pedro Páramo, la FIL de Guadalajara anuncia la creación del Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances. Una nota de Mariño González para MILENIO:

La novela que comenzó a finales de 2005 concluyó ayer y, a los ojos de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, se trata de un final feliz. Los organizadores del galardón literario informaron ayer que no seguirán luchando por mantener el nombre de Juan Rulfo en el premio que cada año, desde 1991, se entrega en la ciudad. Aunque de entrada parece una mala noticia, no lo es para la asociación civil que organiza el certamen, que tomó la decisión de ampliar la convocatoria a escritores en lenguas romances vivas e incrementar la recompensa económica de 100 mil a 150 mil dólares para el ganador.

«Renunciamos a usar el nombre de Juan Rulfo en la convocatoria del premio. Si no era Juan Rulfo no podía ser ningún otro escritor. No lo íbamos a suplantar», explica la directora de la asociación civil del Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo, Dulce María Zúñiga, quien agrega que, desde ayer, con el lanzamiento de las nuevas bases, el nombre del certamen quedará como Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances y reconocerá la trayectoria de autores que escriban en español, francés, italiano, portugués, gallego, catalán y rumano.

Desde 2005, cuando Tomás Segovia ganó el premio, los herederos del autor de El llano en llamas y los representantes del certamen literario de la FIL se enzarzaron en una batalla legal por la utilización del nombre del escritor. A lo largo de la pelea, que duró casi dos años y medio e incluyó el registro de dos marcas Juan Rulfo y la anulación de una de ellas por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, la viuda del narrador jalisciense, Clara Aparicio, acusó que la presea había sido tomada por un grupo de escritores que «siempre se ha caracterizado por utilizar su estructura mediática para socavar la obra literaria de mi esposo y a su persona misma».

El largo proceso legal y las acusaciones contra los organizadores del certamen, señala Dulce María Zúñiga, «no afectaron de ninguna manera» al galardón ni a la FIL, «y eso lo vimos en 2007 con el reconocimiento a Fernando del Paso». Sobre el cambio de estrategia, añade que se analizaron varios escenarios: «El posible era regresar al nombre de Juan Rulfo. El otro era dejarlo como Premio FIL, con el monto de cien mil dólares y limitado a América Latina, España y Portugal. Y el tercero es éste: las consideraciones finales fueron la enorme nómina de escritores valiosos en el mundo neolatino y la posibilidad de incrementar el alcance tanto lingüística como geográficamente».

La decisión de abandonar la batalla legal pone punto final a la polémica con la familia Rulfo, indica Dulce María Zúñiga, quien concluye que «este año será de gran expectación por ver quién será el merecedor de este nuevo galardón, porque ahora el horizonte se amplía. Y están abiertas las especulaciones y las apuestas en cuanto a si será un francés, un catalán o un italiano».

Más idiomas para más espacio

Una de las consideraciones para cambiar el formato del galardón fue la presencia cada vez más constante de escritores y editores en idiomas distintos al español, «en particular el francés, el inglés y el italiano», señala un boletín enviado ayer por la feria. En la misma línea, otra sugerencia que pesó fue la del país invitado de honor para la vigésima segunda edición de la FIL, Italia, cuyos promotores, señala una fuente que prefiere el anonimato, insistieron en que el galardón se abriera a otras lenguas. El lanzamiento del Premio, «va de la mano» con el crecimiento del encuentro librero, «que se ha consolidado como el más importante del mundo editorial en español y que a partir de 2008 crecerá nueve mil metros cuadrados en su área de exposición, con lo que alcanzará un total de 35 mil metros cuadrados».

CRONOLOGÍA DE LA PUGNA

1 de agosto de 2005
Tomás Segovia es nombrado ganador del XV Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo. En una entrevista, el autor dice sobre el escritor jaliscience: «Rulfo es un puro milagro. No se sabe por qué tuvo ese talento. No fue un gran estudioso ni un gran conocedor, pero nació con el don».

8 de agosto de 2005
Víctor Jiménez, director de la Fundación Juan Rulfo, envía una carta a los organizadores del premio en la que manifiesta su preocupación por «el derrotero que están tomando las cosas en relación con este galardón». Acusa a Tomás Segovia, Juan Goytisolo, Elena Poniatowska y Christopher Domínguez Michael de pertenecer a un grupo que busca «disminuir la obra de Rulfo».

2 de diciembre de 2005
Juan Francisco Rulfo acude al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial para registrar el nombre de su padre como marca.

25 de noviembre de 2006
Carlos Monsiváis recibe el Premio FIL de Literatura. Los organizadores todavía confían que, el siguiente año, el galardón recupere su anterior nombre.

26 de junio de 2007
La FIL informa que el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial resolvió «que el registro del nombre Juan Rulfo como marca es improcedente y decretó su nulidad».

25 de julio de 2007
El Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial da luz verde a un nuevo registro de la marca Juan Rulfo, promovida por Juan Francisco Rulfo.

24 de noviembre de 2007
Fernando del Paso recibe el Premio FIL de Literatura. En la ceremonia dice aceptar «el XVII Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo [...] y asumo todas las consecuencias, tanto legales y periodísticas, como literarias y pecuniarias, que conlleve esta aceptación».


REGRESAR A LA REVISTA