El grupo en el concierto. (Foto: Gattoneblu)C iudad de México, DF. 24 de enero de 2009. («El 6» / RanchoNEWS).- La primera vez que escuche de ellos fue con mi hermano y mi prima. Decían algo así como «levántate ponte hípel» y yo no tenia idea de que estaban cantando, poco después la escuche completa hasta la saciedad porque el «atlévete salté del clóset» sonó en todas partes. En lo personal me daba mucha risa lo de «que impolta si te gusta colpley y glindey», pero desde luego pensé que no era más que un cantante de reguetón (la verdad no sé cómo se escribe y tampoco me importa demasiado saberlo). El mundo giró y el año pasado se presentaron en el vive latino en donde leí que mientras hubo gente bailando otras se dedicaron a aventarles cosas al escenario y mentarles su madre entre canción y canción.
El sábado 28 de enero, tuve la oportunidad de ir al festival Hola Pelona en la Plaza de Toros México. Como todo festival multibanda hubo de todo, grupo tipo Moenia que bajaron a fuerza de los «fuera» que recibieron. El respetable no es nada respetuoso cuando no oyen algo a su gusto, algunos a los que les fue muy bien como Los Daniels, Jessy Bulbo, Panteón, y terminando estos llegó la gran interrogante de la noche, la presentación de Calle 13.
Antes de que salieran al escenario se dejó escuchar el consabido «culerooooooo», pero en cuanto entró el cantante al escenario comenzó a escucharse unas percusiones que bien pudieron ser del grupo estelar de la noche, La Maldita, ¿que podrían renegar los inconformes de la presentación, si era la misma estructura musical que iban a escuchar más adelante? En la parte de abajo poco a poco la gente comenzó a bailar, acabando la primera canción inteligentemente sin pausa, continuó la siguiente, canciones que quedaban muy lejos de la casa del reguetón, sonando a una banda hecha y derecha, con todo y unos metales contundentes, una solista-corista que para los admiradores, como yo, de las formas muy pronunciadas de las negras teníamos a quién ver.
Debo confesar que no sabía ninguna de sus canciones, sin embargo la calidad del sonido hacían fácil el entender las letras y el ritmo hacía moverse a cualquiera, si hasta los anteriormente inconformes ahora ya no gritaban y algunos bailaban, y así seguimos bailando todas las canciones, incluyendo la que en su versión original participa el multinombrado vocalista de Café Tacuva.
Ya casi para terminar, sólo para dejar ardidos a los que seguían en su cerrazón de decir que eso no era algo que los movía, les dejó caer un reguetón, que para los que ya andábamos baile y baile sólo fue un ritmo mas, acabando su presentación agradeciendo y declarando su admiración y cariño a Rocco de la Maldita. Después vino la Maldita en una gran presentación, pero me quedo con la audacia, valor y tozudez de los integrantes de Calle 13, que confiando en su propuesta con ritmos afines a los grupos estelares del cartel, se lanzaron a convencer al público más violento y cerrado en sus gustos, venciendo a la mayoría de los prejuicios que albergaban en la cabeza de muchos de los asistentes. PD: No incluyeron la de «atlévete», atinadamente pienso. («El 6»)
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