El fotógrafo colombiano. (Foto:Archivo)C iudad Juárez, Chihuahua. 8 de mayo 2009. (RanchoNEWS).- Fotografías inéditas de José Clemente Orozco y un serial de David Alfaro Siqueiros creando el mural «Cuauhtémoc contra él y mito», son parte de la exposición «La sensualidad de la imagen» del fotógrafo colombiano Leo Matiz, que se está llevando a cabo en la Galería Pablo Goebel Fine Arts. Una nota de Yanet Aguilar Sosa para El Universal:
La exposición, que está integrada por 55 imágenes que incluye retratos de María Félix, Mario Moreno Cantinflas, Gabriel Figueroa, Diego Rivera, Rufino Tamayo, Frida Kahlo, Manuel Álvarez Bravo, Agustín Lara y Luis Buñuel, son una pequeñísima muestra del más de un millón de imágenes que Matiz capturó en México, especialmente en la década de los 40.
Bajo la curaduría de Luis-Martín Lozano, la muestra que permanecerá hasta el 30 de julio de 2009 en la galería que se ubica en Schiller 251, 6º piso, en Polanco, da cuenta del trabajo de Leo Matiz Espinoza (Aracataca, 1917-Bogotá, 1998), el caricaturista, periodista, editor, actor y fotógrafo que vivió en México durante muchos años y recreó la vida de sus personajes a través de la lente.
Luego de una exposición en gran formato, en la galería al aire libre de la Rejas del Bosque de Chapultepec, el fotógrafo que nació en el mismo pueblo de Gabriel García Márquez, Aracataca, regresa a México a través de la muestra «Leo Matiz. La sensualidad de la imagen.»
Llega al país con el fin de quedarse. Al menos es lo que pretende su hija, Alejandra , presidenta de la Fundación Leo Matiz y quien ha traído a México más de un millón de imágenes de su padre, entre negativos, fotografías, así como caricaturas y pinturas, para entregarlas en comodato a algún museo del país.
«La idea es que este millón de imágenes de mi padre se queden en México, para eso quiero comenzar a platicar con algunos directores de sitios culturales o museos de la ciudad de México, con el fin de que se animen a resguardar este material que tiene gran valor para América Latina, pero en especial para México», señaló.
La obra de su padre no tiene ningún tipo de hongos y está libre de humedad, aunque requiere de clasificación, catalogación y digitalización.
Alejandra Matiz asegura que su padre, quien recorrió pueblos, ciudades y continentes al encuentro cotidiano con la gente, le hubiera gustado que su archivo se quede en México, pues aquí pasó «El mejor siglo de mi vida», como decía.
El millón de imágenes que Alejandra Matiz ha traído consigo a México, representa cerca del 50% del acervo total de Leo Matiz que está bajo resguardo de la Fundación que fue creada hace unos años con sede en Milán, Italia y en Santa Fe, Colombia.
La idea de Matiz es que el acervo completo de su padre esté depositado en México, pero para ello requiere la colaboración de un recinto o de una asociación de la iniciativa privada.
La muestra fotográfica que podría ser el primer paso, pues se trata de una colaboración entre la Galería con la Fundación Leo Matiz, que tiene el 90% de la obra del fotógrafo que llegó a México en 1940.
En el marco de la exposición «Leo Matiz. La sensualidad de la imagen», se presentará en junio el libro El México de Leo Matiz, un libro de arte editado en Italia por EBS Editoriale y DGE Equilibrista, que contiene más de 100 fotografías y una investigación del trabajo que realizó en México para diversas publicaciones.
Fue un grande y dejó una gran obra.
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