Trabajos de restauración. (Foto: Notimex)C iudad Juárez, Chihuahua. 9 de julio de 2012. (RanchoNEWS).- A fin de que las ruinas de la Casa de Cortés, ubicada en La Antigua, Veracruz, adquieran otra dimensión, y con ello se facilite la comprensión de su arquitectura, expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) trabajan en su conservación y restauración. Una entrega de Notimex:
Los procesos de deterioro han sido causados por la humedad y el intemperismo, que han afectado la permanencia de los elementos arquitectónicos de esta histórica construcción que no era residencia del conquistador, sino un punto de reunión para los comerciantes de la época, informó el INAH.
Respecto a los trabajos de restauración, explicó la arquitecta Gladys Martínez Aguilar, implican la restitución de algunas piezas, como los cerramientos de madera y la consolidación de elementos sueltos, además de labores de limpieza como el retiró de panales de avispas que socavaban muros.
En este proyecto de rehabilitación, promovido por el INAH y el Gobierno del Estado de Veracruz, también se atenderán los muros de la Casa de Cortés, a través de limpiezas, restituciones y consolidaciones, mientras que en pisos se integrarán faltantes y se sustituirán los elementos en mal estado.
Lo anterior no podrá replicarse en las cubiertas, debido a la falta de un testimonio gráfico o en sitio, de la composición del sistema constructivo original.
«Únicamente en dos crujías y pórtico se integrará una estructura de madera, a manera de pergolado, cuyos postes y vigas ayudarán a reforzar los muros y confinar los locales dándole estabilidad a estos elementos», comentó Martínez Aguilar, responsable del proyecto.
La especialista aseguró que la restauración de la Casa de Cortés se efectúa conforme los sistemas constructivos antiguos, a partir de materiales compatibles o iguales a los originales: piedra bola, piedra muca, ladrillos de distintos tamaños (de acuerdo a la etapa constructiva) y cal apagada en obra.
Lo más característico de la Casa de Cortés, dijo, «son sus ceibas, árboles cuya raíz ha penetrado en los muros, estableciendo una red, tanto en las paredes como en el subsuelo.
Esta característica, tan propia y atractiva del inmueble, también es uno de los factores que dañan a la edificación; sin embargo, intentar separarlos sería atentar contra el monumento, pues la ceiba ya forma parte de la estructura portante de los paredones», destacó la experta.
Sin embargo, precisó la arquitecta, este proyecto es más ambicioso, de ahí que en el terreno adjunto, el comité pretende crear un espacio museístico y zonas de estar, para una estancia mayor del visitante y que a su vez brinde un recorrido más completo y ameno.
Para ello, el comité responsable del seguimiento del proyecto, que se ejecuta bajo la supervisión del INAH, reúne los esfuerzos del Instituto, a través de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos y el Centro INAH-Veracruz, del Gobierno del Estado de Veracruz y del Ayuntamiento de La Antigua. Además de la Fundación GEO-Veracruz es parte honoraria del consejo.
En este sentido, la Casa de Cortés es un sitio de interés para distintas instancias, motivadas en recuperarla y hacer de ella un espacio culturalmente identificable, tanto por los pobladores, como por los visitantes, señaló la arquitecta, quien en 2002 obtuvo el Premio Francisco de la Maza que otorga el INAH.
Cabe destacar que el paso del huracán «Karl», en 2010, ocasionó un retroceso en las labores que ya se habían emprendido para la consolidación de este inmueble histórico, compuesto por varias etapas constructivas, que van de los siglos XVI al XX.
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