viernes, mayo 17, 2013

Noticias / México: INEHRM creará fondo para adquisiciones bibliográficas

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Los trabajos han incluido catalogación, digitalización y conservación. (Foto: Adrián Hernández)

C iudad Juárez, Chihuahua. 17 de mayo de 2013. (RanchoNEWS).- Con más de 80 mil ejemplares en su acervo, la Biblioteca de las Revoluciones de México que custodia el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM) está en constante crecimiento gracias a los proyectos de adquisición y a las donaciones. Una nota de Abida Ventura para El Universal:

A las valiosas colecciones especializadas en historia de México, como las de los historiadores Eduardo Blanquel y Manuel González Ramírez, se sumaron cerca de 10 mil títulos del archivo personal del historiador austriaco Friedrich Katz.

Ese acervo especializado en historia y Revolución Mexicana, que incluye materiales que Katz ocupó en sus investigaciones, llegó el año pasado proveniente de la Universidad de Chicago y ahora está en proceso de catalogación. «El doctor dispuso que su acervo se dividiera entre El Colegio de México y el INEHRM», dice Rafael Hernández, jefe de atención a usuarios y control de acervos de la biblioteca.

Considerada como el núcleo fundacional del INEHRM por ser el acervo que acogió los primeros documentos sobre la Revolución que se comenzaron a recopilar en los años 50, esta biblioteca también cuenta con un Fondo Reservado con más de 7 mil volúmenes. Es posible encontrar auténticas joyas bibliográficas, como un recetario de cocina de 1782, el libro más antiguo de la colección, y un ejemplar de La grieta en el yugo, polémico libro publicado en 1952 por Salvador Nava Martínez (Dr. Nava)

El Fondo Reservado también ha aumentado gracias a las pesquisas que investigadores del instituto han realizado en librerías de viejo, en donde han rescatado ejemplares de una «rareza y riqueza extraordinaria». Entre ellos, la justificación legal del fusilamiento de Vicente Guerrero en Oaxaca, así como una edición antigua de El verdadero Juárez, obra polémica de Francisco Bulnes.

«Este tipo de materiales se estuvo rescatando durante varios años, nos metíamos a las bóvedas de las librerías de viejo, las de Donceles y de Miguel Ángel de Quevedo, así se comenzó a rescatar este tipo de publicaciones», recuerda Hernández Ángeles.

El proyecto de rescate de joyas bibliográficas en librerías de viejo funcionó de 2001 a 2005, pero se suspendió por falta de presupuesto. Actualmente, asegura la historiadora Patricia Galeana, directora del INEHRM, entre los planes de esta nueva administración está la creación un fondo especial para adquisiciones bibliográficas. «Estamos programando un fondo especial para adquisiciones dentro del presupuesto, porque una biblioteca especializada no se puede conformar sólo de donaciones, también son necesarias las adquisiciones, pero para eso necesitamos presupuesto. Lo estamos considerando para el año siguiente», comenta.

Rumbo a los 60 años

Además de los trabajos de catalogación, digitalización y conservación de sus acervos gráfico y bibliográfico, el INEHRM tiene este año una agenda de actividades conmemorativas, como el festejo de sus 60 años como instituto encargado de la investigación y difusión de los movimientos revolucionarios de México.

Rumbo a sus 60 años, el 23 de agosto, el instituto busca durante esta nueva administración implementar cursos de actualización y conocimiento de la historia a maestros de educación media y superior, además de ofrecer cursos a distancia.

«Estamos en un momento fundamental para estabilizar la enseñanza de la historia porque, paradójicamente, en estos años de los centenarios y bicentenarios, en muchos sectores de la población se dio una especie de confusión entre las diferentes visiones de historiadores y seudohistoriadores sobre los temas fundacionales de México», sostiene Patricia Galeana.

Otra propuesta es la colaboración con espacios en donde se puedan replicar las actividades de difusión de la historia que el instituto realiza en su sede. «Queremos duplicar ese trabajo. Ya lo hacemos con la Casa Museo-Carranza y buscamos otros espacios».

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