sábado, mayo 17, 2014

Cine / Argentina, potencia en Cannes

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Lisandro Alonso, con la camiseta semilevantada, dirige a Viggo Mortensen (con sombrero) en el rodaje de Jauja. (Foto: Archivo)

C iudad Juárez, Chihuahua. 16 de mayo de 2014. (RanchoNEWS).- Hace solo dos años el director del festival de Cannes, Thierry Frémaux, hablaba así del cine argentino: «Esperábamos más, tras un gran inicio. Pero nunca creció. Los cineastas argentinos se suicidaron. [El productor y director] Pablo Trapero es el único que apuesta por películas distintas, sin importarle el éxito en taquilla». Una nota de Francisco Peregil Pecellín para El País:

Pero, a pesar de este lamento, esta semana concurren cuatro películas argentinas a la 67ª edición del festival de Cannes. Y una de ellas, Relatos salvajes, tercer largometraje de Damián Szifrón, disputará la Palma de Oro en la sección Oficial junto a 18 obras de autores tan consagrados como el canadiense David Cronenberg, el francés Jean-Luc Godard o los británicos Ken Loach y Mike Leigh.

Del resto de Latinoamérica solo Colombia se encuentra representada con una película, Gente de bien, del director Franco Lolli, que compite en la sección paralela Semana de la Crítica, dedicada a descubrir nuevos directores.

España solo cuenta con un cortometraje en la Semana de la Crítica y Hermosa juventud, de Jaime Rosales, en Una cierta mirada, la segunda más importante del certamen, cuyo jurado preside Pablo Trapero. Argentina, sin embargo, tiene cuatro largometrajes de los 60 que se van a proyectar, escogidos entre 1.700. Compite en casi todas las secciones del festival y cuenta con tres jurados en dos secciones. La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, despidió a los cineastas antes de viajar a Cannes y les dijo: «Yo creo que es la primera vez [que seleccionan cuatro películas argentinas]. Somos el Gobierno de la primera vez». El miércoles dos diarios que se encuentran en las antípodas ideológicas celebraban El gran año argentino (Clarín) y las Palmas para la presencia argentina (Página 12).

¿Resucitó el cine argentino en solo dos años o es que nunca se había suicidado? ¿Se ha vuelto más comercial o más independiente? El empresario argentino Hugo Sigman, productor de la seleccionada Relatos salvajes, junto a los españoles Agustín y Pedro Almodovar, señala en la revista Haciendo cine: «Las películas argentinas que van tienen poco que ver entre sí. No hay un prototipo. Frémaux elige calidad y, en general, las menos comerciales suelen ser las de mayor calidad. Pero creo que lo que busca es calidad, pero si son comerciales, mucho mejor».

Hernán Guerschuny, director de la revista Haciendo cine y realizador de la película El Crítico, estrenada este año en Argentina, cree que son los festivales europeos quienes se han vuelto más comerciales. «Antes contaban con más mecenazgos, ahora se ven obligados a pensar en el negocio. Tienen que atraer a los anunciantes. Y eso se hace convocando a grandes figuras como Ricardo Darín, que protagoniza Relatos salvajes; Viggo Mortensen, que actúa y produce Jauja [del argentino Lisandro Alonso] o a Gael García Bernal, estrella en El ardor [de Pablo Fendrik]».

Guerschuny cree que hay un factor decisivo para explicar esta gran presencia en Cannes. Se llama Ventana Sur y es el principal mercado latinoamericano de cine. Se celebra en Buenos Aires y lo organiza el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), dependiente del Gobierno argentino, en colaboración con el Mercado de Cine de Cannes. «Ahí vienen programadores y distribuidores de todas partes del mundo y ven películas que antes no veían».

Si nos atenemos a las cifras es indudable que el sector vive un momento dulce. Marcelo Stiletano, especialista en cine de La Nación y Radio Continental, recuerda que hubo un récord histórico de venta de entradas el año pasado, aunque la mayoría de los espectadores se concentran en muy pocos títulos. Pero, ¿la selección de Cannes refleja que el cine argentino sea mejor ahora que hace un lustro? «Hay mayor diversidad», señala Guerschuny. «Pero no creo que la selección de Cannes signifique que nuestro cine esté mejor que hace tres o cuatro años».

El cineasta Mariano Llinás (Historias extraordinarias) se muestra muy escéptico: «Lo que ocurre es que Cannes es el más famoso de los festivales (ni el más prestigioso, ni el mejor) y eso hace que personas que no se interesan en lo más mínimo por el cine durante el año entero tengan la oportunidad de decir algo al respecto y ocupar su tiempo hablando de `un gran momento para el cine argentino´ y burradas así. Los que de verdad nos ocupamos del cine sabemos que esos grandes anuncios son meras fanfarrias superficiales hechas para funcionarios y que nuestro trabajo está en otro lado y en otro momento y no depende de esos circos. Estoy seguro de que Damián Szifrón y Lisandro Alonso piensan lo mismo. Eso: una simple astucia periodística, una simple verónica nacionalista. Nada más. Frac para los que van, a trabajar los que se quedan».

El poeta y escritor Fabián Casas es el guionista de Jauja, seleccionada para competir en la sección Una cierta mirada. El martes, poco antes de viajar a Cannes, expresaba también su escepticismo respecto a la importancia del certamen: «En Argentina hay un montón de cine muy bueno que no va a los festivales. A mí no me interesa la retórica de los festivales. Ni la de los premios. Las dos películas argentinas que ganaron el Oscar no me gustan. Prefiero el cine como un poema, el cine de [Andréi] Tarkovski, por ejemplo. Y ése es el que hace Lisandro Alonso, un cine bastante radical».

No obstante, hasta Fabián Casas admite que la proyección que genera Cannes puede venirle muy bien a ese cine radical. Y por ende, al argentino.


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