viernes, octubre 11, 2024

Textos / Fabian Acosta Rico: «¿Qué tiene que ver la hispanofobia con la exclusión del rey de España en la investidura de Sheinbaum?»

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Lienzo de Tlaxcala: Hernán Cortés y Malintzín en su encuentro con Moctezuma II en Tenochtitlan, 8 de noviembre de 1519. (Foto: RanchoNEWS)

C iudad Juárez, Chihuahua. 4 de octubre de 2024. (RanchoNEWS).- Los mexicanos no son muy adeptos de las monarquías. Durante el siglo XIX fusilaron dos emperadores. El primero, Agustín de Iturbide, el consumador de su independencia, pasó por el paredón el 19 de julio de 1824 en Padilla, Tamaulipas. Europa les regaló (o impuso) un príncipe de la casa Habsburgo, Fernando Maximiliano, que sufrió igual suerte que Iturbide en el Cerro de las Campanas, Querétaro, el 19 de junio de 1867.

Que el gobierno mexicano haya sido displicente con la monarquía española les viene a los mexicanos de su herencia republicana. No le rinden pleitesía a cetros ni coronas. En la historia oficial de México, los 300 años de colonialismo español son descritos como su medievo: época oscura de dominación e injusticias.

Sirva de referencia a esta afirmación el libro de Historia de México para Quinto Grado, cuya primera publicación data de 1962 y en sus ediciones más recientes sigue siendo bastante crítico con la dominación colonial de España en México. En la escuela, los niños y jóvenes mexicanos aprenden que no tienen nada que agradecerle a España, la «madre patria», pues bajo su «yugo», persistió en saquear la plata y oro de su nación. No han faltado los revisionistas anglófilos, como Lorenzo de Zavala, político liberal mexicano del siglo XIX. En su opinión, México sería una nación prospera como los Estados Unidos de haber sido colonizada por Inglaterra.