ANDRES T. MORALES CORRESPONSAL
Lunes 11 de septiembre de 2006
La Jornada.
J alapa, 10 de septiembre. La guerra preventiva que hoy libran las potencias como Estados Unidos y Gran Bretaña contra países empobrecidos y acorralados es similar a la vieja práctica del "aterrorizamiento" que los españoles del medioevo emprendieron contra los pueblos del llamado Nuevo Mundo para someterlos y robar sus riquezas.
Lo anterior se plasma en el contenido del radiodrama La Conquista de México, en el que se narra la historia desde el punto de vista del vencido y no sólo la versión de los vencedores, en este caso, los invasores ibéricos, sostuvo el cineasta y actor Felipe Casanova.
La versión digital en disco compacto de La Conquista de México fue presentada en la Feria Internacional del Libro Universitario de Jalapa, que se realizó en días recientes, luego de tres años de investigación histórica, integración de guiones y preparación de material que fue concluido en marzo de este año.
Producida por la asociación civil Sotavento Creación Interdiscilinaria, que encabeza Casanova, y apoyada por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, el radiodrama La Conquista de México ya se difunde mediante emisiones cotidianas por Radio Universidad Veracruzana (XERUV) y Radio Más, administrada por el gobierno veracruzano.
Con este tipo de obras que le apuestan a que el público se sume a la creación, complementando con imágenes visuales en su mente las sonoras, se reivindica un género apabullado por lo que se conoce como la sociedad visual, que se alimenta de la televisión y el cine, afirmaron los presentadores Sandra Ladrón de Guevara, directora del Museo de Antropología de Jalapa y Fernando Escalante Sobrino, director de Radio UV.
Felipe Casanova"Son imágenes acústicas que se complementan con las visuales creadas en nuestra mente, entonces nosotros nos convertimos también en creadores", insistió Ladrón de Guevara. Lo anterior, abundó, es fundamental para llevar a las nuevas generaciones a imaginar y crear, en un medio invadido por la imagen visual de la televisión, el cine y la Internet.
Aunque se anunció la participación de Emilio Carballido, el dramaturgo canceló de última hora por problemas de salud.
El radiodrama de Casanova, agregó Ladrón de Guevara, no se va con la versión de los ganadores -"que es lo que actualmente tenemos en libros de texto"- sino da voz a los perdedores, los pueblos que sufrieron la invasión y el intento por desaparecer sus conocimientos y su cultura.
"Felipe no solo se pone en la armadura de los españoles sino también en el taparrabos de los indios, y de ahí lo cuenta", acotó.
Durante la presentación del disco compacto se reprodujo el capitulo 10, La Patria en llamas, que narra la matanza de hombres, mujeres, niños y ancianos perpetrada en Cholula por las tropas de Hernán Cortés, antes de entrar a la Gran Tenochtitlán.
En lo que llamó "un viaje difícil y accidentado para trasladar la historia a la escena radiofónica", el cineasta Felipe Casanova agradeció a su equipo de respaldo, entre ellos Miguel Angel Díaz, Gualberto Díaz, Yolanda Aburto, José Cruz y Sergio Díaz por "sacar adelante un proyecto que pudo haberse quedado en el camino".
Afirmó que lo sucedido hace cinco siglos en México no es muy diferente de lo que actualmente acontece con países debilitados, sometidos y conquistados. "Se dice que la guerra preventiva, es un concepto moderno, pero ya hay antecedentes de lo que hoy se puede palpar en países como Irak.
"En la conquista de México se aplicó la guerra preventiva, para atemorizar, para aterrorizar y dominar a otros pueblos, la civilización mexica y las otras culturas de Mesoamérica fueron asaltadas por el occidente bajo el pretexto de salvar sus almas por el cristianismo, pero lo que está atrás es el afán de apoderarse de las riquezas: tienes petróleo, tienes riquezas, te las voy a quietar acusándote de mil cosas."
La guerra preventiva, no es contra un sistema gubernamental o militar, es contra la población civil, "un aterrorizamiento para debilitar a los pueblos, dominarnos y robarlos", como sucedió con el llamado Nuevo Mundo, y posteriormente con la Nueva España, concluyó.