Ocupaba la dirección del FCE. (Foto: Archivo)C iudad Juárez, Chihuahua. 3 de marzo de 2009. (RanchoNEWS).- El arribo de Consuelo Sáizar al mando del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes es repotado por Sandra Licona de El Universal de la Ciudad de México:
Dejó de ser un secreto a voces. Sergio Vela Martínez renunció ayer al Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) y será sustituido por Consuelo Sáizar Guerrero, hasta ayer directora del Fondo de Cultura Económica (FCE).
Así lo dio a conocer el presidente Felipe Calderón, en un anuncio especial, sin que revelara las razones de la renuncia de Vela Martínez, quien desde que asumió el cargo hace dos años y tres meses ha sido motivo de polémica y de reproches por parte de la comunidad cultural, «por su incapacidad de diálogo» con la misma.
En su toma de protesta como titular del Conaculta, Sáizar dijo: «Me comprometo a desempeñar mi labor con toda la honestidad, emoción, acción y experiencia adquirida en el servicio público, para servir a los creadores, para llenar de poesía y música a los pueblos de México y para alentar la exportación de nuestros artistas. En palabras suyas, señor Presidente, poner más México en el mundo y traer más mundo a México».
Sobre Sáizar Guerrero, Calderón Hinojosa destacó el fuerte impulso que dio a la industria editorial mexicana, y en específico el crecimiento y mejoramiento de las finanzas de esa casa editorial.
También la instruyó para que coordine los esfuerzos en materia de educación y cultura, y le pidió su colaboración con otras instancias gubernamentales encargadas de los festejos del Bicentenario de la Independencia de México y Centenario de la Revolución, en 2010.
Nayarita ilustre
Toda la vida profesional de Consuelo Sáizar Guerrero (Acaponeta, Nayarit, 1961) ha girado en torno de la edición de libros, desde los 19 años. Se formó en la imprenta de sus abuelos, quienes también eran dueños de un periódico en Nayarit.
Ahora sus derroteros culturales tendrán que ampliarse al tomar la presidencia del Conaculta, que ha acumulado en los últimos ocho años un «debilitamiento del aparato cultural oficial», como lo describió hace dos meses el artista plástico Daniel Lezama, cuando este diario consultó a creadores, académicos e intelectuales sobre el perfil de la persona ideal para dirigir esta institución.
Ahora que las versiones periodísticas se confirmaron y que Vela deja la institución, el próximo presidente del Conaculta debe ser alguien con visión, capacidad de gestión, experiencia en instituciones culturales, apertura a todas las manifestaciones artísticas, vocación para proteger el patrimonio cultural, y compromiso con la transparencia, de acuerdo con aquel grupo de entrevistados, entre los que destacaban Rafael Pérez Gay, Rafael Lozano-Hemmer, Lorena Wolffer, Carlos Narro y Heriberto Yépez.
De aspecto conservador, incluso ejecutivo –ella misma ha confesado que tiene varios trajes del mismo corte y color, así como pares de zapatos idénticos–, Sáizar Guerrero se convirtió en mayo de 2002 en la primera directora mujer del FCE, una de las editoriales más prestigiadas en lengua española, con 75 años de existencia, y que hasta ese momento había tenido 14 directores, entre ellos el ex presidente Miguel de la Madrid Hurtado.
Y aunque por decreto su estancia al frente del FCE sería hasta el año 2010, ahora asume la presidencia del Conaculta.
En los años 60 el destino de las niñas en Nayarit era ser peinadora o lectoras de poesía, como la propia Sáizar contó en una entrevista con el diario Perú.21. Ella trazó un destino diferente: se inclinó por el mundo de las letras –ha dicho que su objeto más preciado es un Aleph autografiado por Jorge Luis Borges– y no sólo es licenciada en Comunicación por la Universidad Iberoamericana, también estudió Ciencias Políticas y Administración Pública en la misma casa de estudios, y tiene diplomados en contaduría, administración y finanzas en la citada institución y en el ITAM; además, realizó estudios sobre industria editorial en Inglaterra.
Durante ocho años tuvo a su cargo la dirección de Editorial Jus, de carácter católico, y creó su propio sello, Hoja Casa Editorial, con el que ganó el Premio Juan Pablos. Apenas tomó la dirección del FCE llevó a cabo una reestructuración, que no sólo ha incrementado el tiraje de sus libros –desde que llegó al Fondo se han editado más de 20 millones de ejemplares–, sino que también creció en infraestructura –cuenta hoy con 12 librerías en el DF, nueve en diferentes estados y nueve en el extranjero: Perú, Guatemala, Venezuela, Brasil, España, Chile, Estados Unidos y Colombia–, y ha duplicado su facturación.
A siete años de su llegada al FCE, consiguió disminuir la nómina, aunque el mundo editorial lamentó la salida del organismo de gente como Adolfo Castañón, quien fungió como gerente general de la dependencia durante casi 30 años; Daniel Goldin, quien tenía a su cargo las gerencia de Libros para Niños, y María del Carmen Farías, ex directora de la prestigiada colección de Ciencia, que publicaba la institución. Tras su despido, Farías declaró en entrevista que desde que Consuelo Sáizar estaba al frente del Fondo, éste «dejó de ser una institución cultural, para convertirse en una empresa comercial».
Y que bajo su gestión se «ha liquidado o despedido a más de 80% del personal: es la rotación de empleados y trabajadores más grande en la historia de la institución».
Pero Sáizar Guerrero, a propósito del 70 aniversario del FCE, dijo que el éxito de la institución se debía a la visión de su fundador, Daniel Cosío Villegas, pero también «a la generosidad del Estado mexicano, a los grandes equipos editoriales que han trabajo a lo largo de estos años, a la gran capacidad de reaccionar ante los retos que representan tanto las necesidades del lector como los requerimientos del mercado editorial y a la visión para expandirse».
Como parte de su trayectoria profesional, Sáizar Guerrero también fue jefa de prensa del Fondo Nacional para Actividades Sociales (Fonapas, 1978-1979), fundadora y directora general de Hoja Casa Editorial (1990-2002), además, se desempeñó como colaboradora del periódico La Jornada (1989), fue consejera electoral en el DF (1997) y miembro del Consejo Asesor de Causa Ciudadana.
Entre las personalidades más importantes que ha conocido en su quehacer editorial, la directora del FCE ha destacado nombres como el de Juan Rulfo, a quien conoció cuando ella tenía 25 años; Jorge Luis Borges; Octavio Paz, quien la impresionó por «su generosidad y apertura» y, desde luego, Carlos Monsiváis, «con quien hablo todos los días y una vez me dijo que uno mismo tiene que tomarse en serio, porque eso representa tomar la responsabilidad de ser».
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