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Escena de la obra. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 29 de septiembre de 2011. (Jacqueline Rodríguez / RanchoNEWS).- Dulcinea del Toboso, el amor platónico del célebre don Quijote de la Mancha cobró vida en el espectáculo multimedia El lamento de Dulcinea, cuya versión en español fue estrenada ayer en un teatro Rascón Banda del Centro Cultural Paso del Norte casi lleno.
La actriz canadiense Dulcinea Langfelder rinde un homenaje a la mujer idílica del ingenioso hidalgo, a ese personaje que en realidad no tiene voz ni voto en esta novela de gran reconocimiento mundial y le da un espacio para que exprese su sentir de todas las maneras posibles.
Como lo explica la actriz, a través de su obra «brindo la oportunidad de adoptar la visión de aquellos y sobre todo de aquellas que apenas sobrevivieron a la historia escrita, que no forjaran nuestros comportamientos religiosos y quizá hubieran podido tener una influencia diferente en lo humano».
Teniendo una sencilla escenografía, música variada (ella interpreta cinco canciones), un complicado aporte visual de video animaciones y la presencia de don Quijote como marioneta, la ahora convertida en heroína se atreve a preguntarse ¿qué sentido dar a ese amor loco?, ¿cómo pasó de divina a prohibida la sexualidad de la mujer? ¿cómo forjó la religión nuestra historia?
De tal modo que se lanza a la aventura y viaja a través del mundo encontrándose con esas otras mujeres, esas otras deidades femeninas que también tuvieron un punto importante en algún pasaje histórico y que han quedado en el olvido.
Ante los ojos de los espectadores, esta Dulcinea bailó, cantó y divirtió con sus ocurrencias con ayuda de sus «honorables colegas» cuatro técnicos (Danny Carbonneau, Erik Lapierre, Danys Levasseur, Vincent Santes), que aparecían de repente para complementar la obra ideada por la actriz homónima.
El público fue muy receptivo, sabiendo corresponder a la intensidad de la obra aplaudiendo cada vez que lo creía conveniente.
Al final de la obra la actriz fue premiada con una ovación en pie. Dulcinea Langfelder agradeció y confesó que no hablaba bien español, pero aún así hizo saber al público que el autor de la versión en español, Danys Levasseur, cumplía años ese día y les pidió que le cantaran Las Mañanitas, y los juarenses se la cantaron.
Una obra entretenida, atrayente y con cargas ocasionales de buen humor fue lo que pudo presenciar el público anoche en el marco del Séptimo Festival Internacional Chihuahua, mismo que contínua aún con actividades en el teatro del Centro Cultural Paso del Norte siendo el 30 de septiembre la presentación de Binelli-Ferman Duo, el dos de octubre con Thanghetto, el día primero se presenta la Orquesta Bilbao y el gran cierre de los eventos en teatro en la voz de Eugenia León el día 5 de octubre.
Los horarios de la presentaciones son a las 7 de la tarde y se pueden obtener boletos gratis para cada uno de ellos acudiendo el día del evento a partir de las 7 de la mañana en taquilla del Centro Cultural Paso del Norte.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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jueves, septiembre 29, 2011
Cine / España: Ripstein no volverá a San Sebastián porque ya no es «serio»
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El director mexicano, en el photocall en la última edición del festival. (Foto: Reuters)
C iudad Juárez, Chihuahua, 29 de septiembre 2011. (RanchoNEWS).- El realizador mexicano Arturo Ripstein, que quedó fuera del palmarés del último Festival de Cine de San Sebastián con Las razones del corazón, ha asegurado que no volverá al certamen donostiarra, donde logró la Concha de Oro en 1993 y 2000, porque cree que ha pasado de «serio» a «subnormal». Su cinta, en blanco y negro, clausuró la sección oficial a competición pero no tuvo premio. El director del festival, José Luis Rebordinos, ha evitado entrar en la polémica. Una entrega de EFE:
Ahora, en una entrevista que publica el diario Gara, con motivo de la participación del filme de Ripstein en el Festival de Cine Latinoamericano de Biarritz (Francia), el director se muestra muy contrariado con el jurado de esta 59 edición, al que califica de «lamentable».
De su presidenta, Frances McDormand dice que «es una actriz que no ha salido nunca de Pensilvania» y añade que «los gringos nunca entienden nada, nunca han visto una película con subtítulos, no saben leerlos».
En el escritor y guionista Guillermo Arriaga ve a «un enemigo personal por el hecho de ser mexicano», porque «la megalomanía hace que todo lo demás no exista, que la basura que se escribe parezca oro». «Este cuate es un talento innegable para la autopromoción», añade.
A Sophie Mantingeux, otra de los jurados, la llama fotógrafa «desconocida», al igual que al director noruego Bent Hamer, mientras que a Bai Ling y Sophie Okonedo se refiere como «dos chapuzas de actrices».
Del único español del jurado, Álex de la Iglesia, recuerda que «le había ganado una Concha de Oro en un festival y eso no se olvida» (De la Iglesia compitió con La Comunidad cuando Ripstein se alzó como vencedor en 2000 con La perdición de los hombres»).
«De pronto, la dirección del Festival empieza mal. Un festival, además de seleccionar lo que se les da y las mejores películas posibles, tiene que saber qué hacer con un jurado y no tener un jurado de chapuza (...). La dirección del Festival en este momento ha logrado convertirlo en un festival en vías de desarrollo», opina.
Tampoco parece satisfecho con el nuevo responsable del certamen donostiarra, José Luis Rebordinos, exdirector de la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián, «un certamen 1de peliculitas de susto».
«Éste era un Festival realmente serio, era de los cinco de Europa y, de pronto, es subnormal», afirma Ripstein, que añade que en San Sebastián «es todo exactamente lo contrario» que en Cannes. «Es un lugar que me gustaba muchísimo y no volveré», subraya el cineasta mexicano.
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El director mexicano, en el photocall en la última edición del festival. (Foto: Reuters)
C iudad Juárez, Chihuahua, 29 de septiembre 2011. (RanchoNEWS).- El realizador mexicano Arturo Ripstein, que quedó fuera del palmarés del último Festival de Cine de San Sebastián con Las razones del corazón, ha asegurado que no volverá al certamen donostiarra, donde logró la Concha de Oro en 1993 y 2000, porque cree que ha pasado de «serio» a «subnormal». Su cinta, en blanco y negro, clausuró la sección oficial a competición pero no tuvo premio. El director del festival, José Luis Rebordinos, ha evitado entrar en la polémica. Una entrega de EFE:
Ahora, en una entrevista que publica el diario Gara, con motivo de la participación del filme de Ripstein en el Festival de Cine Latinoamericano de Biarritz (Francia), el director se muestra muy contrariado con el jurado de esta 59 edición, al que califica de «lamentable».
De su presidenta, Frances McDormand dice que «es una actriz que no ha salido nunca de Pensilvania» y añade que «los gringos nunca entienden nada, nunca han visto una película con subtítulos, no saben leerlos».
En el escritor y guionista Guillermo Arriaga ve a «un enemigo personal por el hecho de ser mexicano», porque «la megalomanía hace que todo lo demás no exista, que la basura que se escribe parezca oro». «Este cuate es un talento innegable para la autopromoción», añade.
A Sophie Mantingeux, otra de los jurados, la llama fotógrafa «desconocida», al igual que al director noruego Bent Hamer, mientras que a Bai Ling y Sophie Okonedo se refiere como «dos chapuzas de actrices».
Del único español del jurado, Álex de la Iglesia, recuerda que «le había ganado una Concha de Oro en un festival y eso no se olvida» (De la Iglesia compitió con La Comunidad cuando Ripstein se alzó como vencedor en 2000 con La perdición de los hombres»).
«De pronto, la dirección del Festival empieza mal. Un festival, además de seleccionar lo que se les da y las mejores películas posibles, tiene que saber qué hacer con un jurado y no tener un jurado de chapuza (...). La dirección del Festival en este momento ha logrado convertirlo en un festival en vías de desarrollo», opina.
Tampoco parece satisfecho con el nuevo responsable del certamen donostiarra, José Luis Rebordinos, exdirector de la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián, «un certamen 1de peliculitas de susto».
«Éste era un Festival realmente serio, era de los cinco de Europa y, de pronto, es subnormal», afirma Ripstein, que añade que en San Sebastián «es todo exactamente lo contrario» que en Cannes. «Es un lugar que me gustaba muchísimo y no volveré», subraya el cineasta mexicano.
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Del Buzón / Jerome Rothenberg nos escribe para darnos su itinerario de Otoño en Nueva York
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El poeta en Ciudad Juárez. (Foto: JMV/RanchoNEWS)
C iudad Juárez, Chihuahua, 26 de septiembre 2011. (RanchoNEWS).- Jerome Rothenberg nos escribe para darnos su itinerario de otoño en Nueva York:
Once again Diane Rothenberg and I are off on a big trip, this one a three-month stay in New York City – September 30 through December 27 – as a return to native grounds and a chance to spend time with family & friends and to check on the possibilities of working/writing in a home away from home. The living and mailing address (for letters & small packets only) will be c/o Lee Ann Brown, 435 West 22nd Street, New York, NY 10011, and we’ll be available throughout at this email jrothenberg at cox.net and via our cell phone 760-415-9889.
There will also be a few readings and related events along the way, the following being the ones presently on tap:
Fifty year retrospective reading, Bowery Poetry Club, 308 Bowery (Between Houston and Bleecker), with guest readers Bob Holman, Pierre Joris, Anne Waldman, Charlie Morrow, Lee Ann Brown & Tony Torn, Anne Tardos, Mark Weiss, & Demosthenes Agrafiotis, October 2, 8:00 p.m. to midnight.
Lunch & poetry reading, with Amish Travedi, at the Arts Cafe, Kelly Writers House, University of Pennsylvania, Philadelphia, October 12 at noon.
Participant, group reading with Clayton Eshleman, for Aimé Césaire’s Solar Throat Slashed, The Poetry Project, 10th Street and 2nd avenue, October 19, 8:00 p.m.
Reading and seminar, The Poetics Program, SUNY Buffalo, October 25-26, details through Dennis Tedlock and the McNulty Chair.
Group reading for launch of Frank Kuenstler’s The Enormous Chorus, CUE Art Foundation, 511 West 25 Street, October 27, 6:00 p.m.
Performance, poetry and music, with Charlie Morrow at The Stone, corner of avenue C and 2nd street, October 30, 10:00 p.m.
Reading & performance, with Judith Malina and Frank London, in «Jewish Art for the New Millennium», Daily Forward series, tentative date: November 3, time and venue TBA.
Lecture & reading, «Technicians of the Sacred & the Search for Origins», Poets House 25th Anniversary Program, 10 River Terrace (at Murray Street), November 8, 7:00 p.m.
80th Birthday all day event with numerous guest performers and presenters, The Graduate Center, City University of New York, December 9; details available from Charles Bernstein and/or Pierre Joris.
More to follow, as needed.
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El poeta en Ciudad Juárez. (Foto: JMV/RanchoNEWS)
C iudad Juárez, Chihuahua, 26 de septiembre 2011. (RanchoNEWS).- Jerome Rothenberg nos escribe para darnos su itinerario de otoño en Nueva York:
Once again Diane Rothenberg and I are off on a big trip, this one a three-month stay in New York City – September 30 through December 27 – as a return to native grounds and a chance to spend time with family & friends and to check on the possibilities of working/writing in a home away from home. The living and mailing address (for letters & small packets only) will be c/o Lee Ann Brown, 435 West 22nd Street, New York, NY 10011, and we’ll be available throughout at this email jrothenberg at cox.net and via our cell phone 760-415-9889.
There will also be a few readings and related events along the way, the following being the ones presently on tap:
Fifty year retrospective reading, Bowery Poetry Club, 308 Bowery (Between Houston and Bleecker), with guest readers Bob Holman, Pierre Joris, Anne Waldman, Charlie Morrow, Lee Ann Brown & Tony Torn, Anne Tardos, Mark Weiss, & Demosthenes Agrafiotis, October 2, 8:00 p.m. to midnight.
Lunch & poetry reading, with Amish Travedi, at the Arts Cafe, Kelly Writers House, University of Pennsylvania, Philadelphia, October 12 at noon.
Participant, group reading with Clayton Eshleman, for Aimé Césaire’s Solar Throat Slashed, The Poetry Project, 10th Street and 2nd avenue, October 19, 8:00 p.m.
Reading and seminar, The Poetics Program, SUNY Buffalo, October 25-26, details through Dennis Tedlock and the McNulty Chair.
Group reading for launch of Frank Kuenstler’s The Enormous Chorus, CUE Art Foundation, 511 West 25 Street, October 27, 6:00 p.m.
Performance, poetry and music, with Charlie Morrow at The Stone, corner of avenue C and 2nd street, October 30, 10:00 p.m.
Reading & performance, with Judith Malina and Frank London, in «Jewish Art for the New Millennium», Daily Forward series, tentative date: November 3, time and venue TBA.
Lecture & reading, «Technicians of the Sacred & the Search for Origins», Poets House 25th Anniversary Program, 10 River Terrace (at Murray Street), November 8, 7:00 p.m.
80th Birthday all day event with numerous guest performers and presenters, The Graduate Center, City University of New York, December 9; details available from Charles Bernstein and/or Pierre Joris.
More to follow, as needed.
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Fotografía / Hungría: Obra de Kertész vuelve con muestra
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La exposición abarca desde sus primeras fotografías hasta sus últimas instantáneas de Nueva York. (Foto: EFE)
C iudad Juárez, Chihuahua, 28 de septiembre 2011. (RanchoNEWS).- El Museo Nacional Húngaro de Budapest alberga desde este jueves una exposición retrospectiva con la que la obra de una de la más grandes figuras de la fotografía, André Kertész, vuelve a su tierra natal, Hungría. Una entrega de EFE:
Llegada de París, la muestra, que reúne más de 250 fotografías, es la más amplia representación de las diferentes etapas y los diferentes temas de la obra de Kertész, que estará abierta al público hasta el 31 de diciembre de este año.
Kertész forma parte de ese «club» que le trajo la fama internacional a la fotografía húngara y del que también formaron parte László Moholy-Nagy, Robert Capa, Brassai y Márton Munkácsi.
Las fotos de este artista autodidacta, que vivió 91 años (1894-1985), «no se pueden comparar con nada», dijo a la prensa Michel Frizot, uno de los comisarios de la muestra, que procede del museo «Jeu de Paume» de París.
La exposición abarca desde sus primeras fotografías, tomadas en aldeas húngaras, de violinistas gitanos, niños jugando en el patio o campesinos, hasta sus últimas instantáneas de los años ochenta en Nueva York, tomadas desde el balcón de su apartamento.
Su originalidad estriba en que «siempre experimentó, y sus fotografías nunca se asemejaban a las de su época», subrayó otra comisaria del certamen, Annie-Laure Wanaverbecq.
Era por esas innovaciones por lo que los críticos lo consideraban un artista surrealista, algo que «enfadaba mucho a Kertész», mientras que en Estados Unidos, adonde llegó en 1936, sus obras fueron calificadas de «chocantes y obscenas», añadió la comisaria.
Este último calificativo se lo mereció por una serie sobre jóvenes desnudas, fotografiadas en el parque de atracciones de París ante espejos deformantes que trastocaban sus cuerpos hasta hacerlos irreconocibles, como en su «Distorsión número 41».
El artista, que durante la Segunda Guerra Mundial, por su nacionalidad húngara, era considerado por las autoridades de los Estados Unidos «extranjero sospechoso», obtuvo la ciudadanía de ese país en 1946, cuando pudo reanudar su labor.
Otra técnica que utilizaba era la de agrandar detalles de fotografías anteriores, dándoles así un nuevo sentido, como sucedió con un retrato conjunto que tomó de sí mismo y de su esposa en los años treinta.
Décadas después, esta fotografía se hizo famosa por un recorte en el que sólo aparece la mujer, con la mano del artista sobre su hombro, titulada Erzsébet y yo.
Al final de su carrera, y con 80 años cumplidos, el fotógrafo experimentó también con Polaroid, la cámara instantánea, que agregaba los colores a toda una trayectoria suya en blanco y negro.
La muestra itinerante se presentó al público hace un año en París para pasar después a Suiza y Alemania (Winthertur y Berlín), y concluye ahora en su tierra natal.
Mayor información: André Kertész
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La exposición abarca desde sus primeras fotografías hasta sus últimas instantáneas de Nueva York. (Foto: EFE)
C iudad Juárez, Chihuahua, 28 de septiembre 2011. (RanchoNEWS).- El Museo Nacional Húngaro de Budapest alberga desde este jueves una exposición retrospectiva con la que la obra de una de la más grandes figuras de la fotografía, André Kertész, vuelve a su tierra natal, Hungría. Una entrega de EFE:
Llegada de París, la muestra, que reúne más de 250 fotografías, es la más amplia representación de las diferentes etapas y los diferentes temas de la obra de Kertész, que estará abierta al público hasta el 31 de diciembre de este año.
Kertész forma parte de ese «club» que le trajo la fama internacional a la fotografía húngara y del que también formaron parte László Moholy-Nagy, Robert Capa, Brassai y Márton Munkácsi.
Las fotos de este artista autodidacta, que vivió 91 años (1894-1985), «no se pueden comparar con nada», dijo a la prensa Michel Frizot, uno de los comisarios de la muestra, que procede del museo «Jeu de Paume» de París.
La exposición abarca desde sus primeras fotografías, tomadas en aldeas húngaras, de violinistas gitanos, niños jugando en el patio o campesinos, hasta sus últimas instantáneas de los años ochenta en Nueva York, tomadas desde el balcón de su apartamento.
Su originalidad estriba en que «siempre experimentó, y sus fotografías nunca se asemejaban a las de su época», subrayó otra comisaria del certamen, Annie-Laure Wanaverbecq.
Era por esas innovaciones por lo que los críticos lo consideraban un artista surrealista, algo que «enfadaba mucho a Kertész», mientras que en Estados Unidos, adonde llegó en 1936, sus obras fueron calificadas de «chocantes y obscenas», añadió la comisaria.
Este último calificativo se lo mereció por una serie sobre jóvenes desnudas, fotografiadas en el parque de atracciones de París ante espejos deformantes que trastocaban sus cuerpos hasta hacerlos irreconocibles, como en su «Distorsión número 41».
El artista, que durante la Segunda Guerra Mundial, por su nacionalidad húngara, era considerado por las autoridades de los Estados Unidos «extranjero sospechoso», obtuvo la ciudadanía de ese país en 1946, cuando pudo reanudar su labor.
Otra técnica que utilizaba era la de agrandar detalles de fotografías anteriores, dándoles así un nuevo sentido, como sucedió con un retrato conjunto que tomó de sí mismo y de su esposa en los años treinta.
Décadas después, esta fotografía se hizo famosa por un recorte en el que sólo aparece la mujer, con la mano del artista sobre su hombro, titulada Erzsébet y yo.
Al final de su carrera, y con 80 años cumplidos, el fotógrafo experimentó también con Polaroid, la cámara instantánea, que agregaba los colores a toda una trayectoria suya en blanco y negro.
La muestra itinerante se presentó al público hace un año en París para pasar después a Suiza y Alemania (Winthertur y Berlín), y concluye ahora en su tierra natal.
Mayor información: André Kertész
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martes, septiembre 27, 2011
Festival Internacional Chihuahua / Ciudad Juárez: «Bubble Time y la magia de las burbujas»
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Aspecto del espectáculo. (Foto: Gabriel Cardona / FICh )
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (RanchoNEWS).- Casey, Doug y cientos de burbujas son Bubble Time ya están en Ciudad Juárez para hacer felices a grandes y chicos, como parte de los espectáculos del Festival Internacional Chihuahua (FICh), escribe Sonia Aguilar de la oficina de Comunicación de Gobierno del Estado:
«Ciudad Juárez es hermoso, su gente es amigable y muy gentil», afirman los artistas que tienen 20 años trabajando juntos recorriendo el mundo para entregar momentos de fantasía a la gente.
Esta mañana, repitieron el espectáculo que ofrecieron ayer ante cientos de niños de la localidad, quienes emocionados y llenos de entusiasmo participaron del evento.
Alumnos de diversas primarias, así como de los diferentes Centros de Atención ocuparon las primeras filas.
«Me gustaron todas las burbujas», apenas pudo decir Dulce que cursa el preescolar y en compañía de su grupo fue llevada a la explanada del Centro Cultural Paso del Norte para presenciar el evento.
El espectáculo de Bubble Time no es exclusivo para los niños, pues también los adultos se entregaron a las sonrisas y emoción de ver burbujas de gran tamaño rellenas de helio que suspendidas en el aire se elevaron hasta desaparecer.
Con artículos auxiliares como pelotas, aros de diversos tamaños, globos, cuerdas, los artistas mostraron su destreza para incluso partir una burbuja en dos, o meter su cabeza en una de ellas.
Un momento que arrancó sonrisas y aplausos, fue cuando una gran esfera contuvo dentro a muchas otras, para reventarse luego y dejar libres a las pequeñas burbujas que se esparcieron por el escenario.
«Disfrutamos mucho lo que hacemos, amamos la espontaneidad. Cuando uno trabaja en un escenario con burbujas es arte, se convierte en algo artístico, algo nuevo cada vez», afirma Doug.
Con Doug y Casey viaja Kandi, esposa de Casey, quien cuenta que los tres se conocieron cuando trabajaban en el Circo Ringling Brothers, y decidieron unirse para hacer sus presentaciones independientes.
«Ellos están muy felices de estar en México, cuando están juntos con burbujas, son felices», dice.
Juntos han recorrido diversos lugares, sin embargo de México, Chihuahua es el segundo estado que han pisado, luego estar en Aguascalientes.
«Los niños son muy entusiastas, las familias lo han disfrutado, las diferentes generaciones que nos visitan salen contentos y esto, para nosotros es algo muy positivo», afirman.
Como parte de su participación en el FICh, los artistas visitaron la capital del Estado e Hidalgo del Parral, ciudad de la que quedaron enamorados por su arquitectura.
«Es una pequeña ciudad muy bonita, nos gustó bastante», afirma Casey.
La experiencia que han vivido en Ciudad Juárez, también les ha sido positiva e incluso, afirman que les gustaría volver para conocer más nuestro estado, y también, disfrutar de este Festival del que hoy son parte.
Su trabajo es sencillo, dicen, pues a la mayoría de las personas les agrada jugar con burbujas, a lo que aconsejan:
«Las burbujas son arte, belleza, diversión, más divertido que estarlas picando es darles formas, es mejor ser creativos que destructivos. La gente le gustan las burbujas porque son multiformes y llamativas, y mucha gente quiere tocarlas, reventarlas pero es lindo también dejarlas ir. Si haces burbujas no puedes estar triste o enojado», agrega Doug.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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Aspecto del espectáculo. (Foto: Gabriel Cardona / FICh )
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (RanchoNEWS).- Casey, Doug y cientos de burbujas son Bubble Time ya están en Ciudad Juárez para hacer felices a grandes y chicos, como parte de los espectáculos del Festival Internacional Chihuahua (FICh), escribe Sonia Aguilar de la oficina de Comunicación de Gobierno del Estado:
«Ciudad Juárez es hermoso, su gente es amigable y muy gentil», afirman los artistas que tienen 20 años trabajando juntos recorriendo el mundo para entregar momentos de fantasía a la gente.
Esta mañana, repitieron el espectáculo que ofrecieron ayer ante cientos de niños de la localidad, quienes emocionados y llenos de entusiasmo participaron del evento.
Alumnos de diversas primarias, así como de los diferentes Centros de Atención ocuparon las primeras filas.
«Me gustaron todas las burbujas», apenas pudo decir Dulce que cursa el preescolar y en compañía de su grupo fue llevada a la explanada del Centro Cultural Paso del Norte para presenciar el evento.
El espectáculo de Bubble Time no es exclusivo para los niños, pues también los adultos se entregaron a las sonrisas y emoción de ver burbujas de gran tamaño rellenas de helio que suspendidas en el aire se elevaron hasta desaparecer.
Con artículos auxiliares como pelotas, aros de diversos tamaños, globos, cuerdas, los artistas mostraron su destreza para incluso partir una burbuja en dos, o meter su cabeza en una de ellas.
Un momento que arrancó sonrisas y aplausos, fue cuando una gran esfera contuvo dentro a muchas otras, para reventarse luego y dejar libres a las pequeñas burbujas que se esparcieron por el escenario.
«Disfrutamos mucho lo que hacemos, amamos la espontaneidad. Cuando uno trabaja en un escenario con burbujas es arte, se convierte en algo artístico, algo nuevo cada vez», afirma Doug.
Con Doug y Casey viaja Kandi, esposa de Casey, quien cuenta que los tres se conocieron cuando trabajaban en el Circo Ringling Brothers, y decidieron unirse para hacer sus presentaciones independientes.
«Ellos están muy felices de estar en México, cuando están juntos con burbujas, son felices», dice.
Juntos han recorrido diversos lugares, sin embargo de México, Chihuahua es el segundo estado que han pisado, luego estar en Aguascalientes.
«Los niños son muy entusiastas, las familias lo han disfrutado, las diferentes generaciones que nos visitan salen contentos y esto, para nosotros es algo muy positivo», afirman.
Como parte de su participación en el FICh, los artistas visitaron la capital del Estado e Hidalgo del Parral, ciudad de la que quedaron enamorados por su arquitectura.
«Es una pequeña ciudad muy bonita, nos gustó bastante», afirma Casey.
La experiencia que han vivido en Ciudad Juárez, también les ha sido positiva e incluso, afirman que les gustaría volver para conocer más nuestro estado, y también, disfrutar de este Festival del que hoy son parte.
Su trabajo es sencillo, dicen, pues a la mayoría de las personas les agrada jugar con burbujas, a lo que aconsejan:
«Las burbujas son arte, belleza, diversión, más divertido que estarlas picando es darles formas, es mejor ser creativos que destructivos. La gente le gustan las burbujas porque son multiformes y llamativas, y mucha gente quiere tocarlas, reventarlas pero es lindo también dejarlas ir. Si haces burbujas no puedes estar triste o enojado», agrega Doug.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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Libros / México: Anuncian programa de la Feria del Libro Chihuahua 2011
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José Vicente Anaya. (Foto: JMV / RanchoNEWS)
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (RanchoNEWS).- Este viernes 30 de septiembre se realizará la ceremonia de inauguración, a las 10:00 horas, con que dará inicio la doceava edición de la Feria Estatal del Libro en la ciudad de Chihuahua y en los municipios de Parral, Madera, Nuevo Casas Grandes, Guachochi, Delicias, Aquiles Serdán y Ojinaga. Con más de cien editoriales invitadas, se ofrecerán presentaciones de libros, mesas de diálogo de escritores, espectáculos musicales, teatro, talleres infantiles y juveniles, cuenta-cuentos, productos regionales, muchos libros y más, informa en un comunicado el Instituto Chihuahuense de la Cultura (Ichicult):
A realizarse del 30 de septiembre al 9 de octubre, será la Plaza Mayor de la ciudad de Chihuahua el recinto oficial para el desarrollo de la XII Feria Estatal de Libro, en cuyo marco se presentarán escritores de la talla de Ignacio Solares, con su libro El Jefe Máximo, autor que además recibirá el Premio Gawí Tónara 2011, como reconocimiento a su trayectoria como escritor y promotor cultural.
Visitará Chihuahua la señora Guadalupe Loaeza para presentar su libro Infancia es destino, José Vicente Anaya con su obra La brevedad en la poesía y los cuentos de la China Clásica; Pedro Salmerón con su libro Los Carrancistas; el historiador Víctor Orozco ofrecerá su magna obra La toma de Ciudad Juárez en imágenes, así también Joaquín Cosío con su poemario Bala por mí el cordero que me olvida, entre otros.
En recuerdo del inolvidable Carlos Montemayor el viernes 30 de septiembre, a las 16:00 horas, en el Foro Carlos Montemayor, se realizarán las Mesas de Culturas Indígenas, donde cuatro personajes como son Natalia Toledo, Natalio Hernández, José del Val y Raúl González debatirán en una mesa sobre literatura indígena.
También en homenaje del parralense ausente, el viernes 7 de octubre, a las 19:00 horas, en el Foro Carlos Montemayor, se ofrecerá una Mesa de diálogo sobre la obra del autor, con la participación de Rubén Mejía, Mario Humberto Chávez, Arturo Rico Bovio y Martha Estela Torres.
En municipios
La Feria Estatal del Libro que se desarrollará también en municipios, contará con exposición y venta de libros,espectáculos musicales y teatro, presentaciones de libros, editoriales invitadas, diálogo con escritores, talleres infantiles y juveniles, muestra de productos regionales, libros y mucho más.
• En Hidalgo del Parral, del 30 de septiembre al 2 de octubre.
• En Ciudad Madera del 30 de septiembre al 2 de octubre, en la explanada frente a la Presidencia Municipal. Informes: Presidencia Municipal. Dirección de Fomento Económico, Turismo y Cultura, Brígido León Orozco. Tels. (652) 572-10-11 ext. 109.
• En Nuevo Casas Grandes, del 6 al 8 de octubre en dos sedes principales: la Plaza Benito Juárez y la Biblioteca «Eduardo Contreras». Informes: Presidencia Municipal de Nuevo Casas Grandes, Ing. Jorge Chio Portillo, tel. (636) 694-09-75. Director de Bibliotecas, Miguel Montalvo, tel. (636) 694-42-72.
• En Guachochi, del 6 al 8 de octubre.
• En Ciudad Delicias, del 4 al 6 de octubre.
• En Aquiles Serdán, del 6 al 8 de octubre.
• En ciudad Ojinaga del 3 al 5 de octubre.
Invitados especiales
Ignacio Solares. Presentará su libro El Jefe Máximo el viernes 30 de septiembre, a las 18:00 horas, en el Foro Carlos Montemayor. Nacido en ciudad Juárez, Chih, en 1945. Autor de las novelas Delirium tremens, Anónimo, Madero el otro, La noche de Ángeles (Premio Diana Novedades, 1989), y El gran Elector, llevada al teatro, obteniendo Premio a la mejor obra del año.
Pedro Salmerón. Presentará su libro Los Carrancistas el sábado 1 de octubre, a las 17:30 horas, en Foro Carlos Montemayor. Es licenciado, maestro y doctor en historia por la UNAM. Profesor e investigador en la Escuela de Antropología e Historia y del Instituto Tecnológico Autónomo de México. Autor de los libros La División del Norte: la tierra, los hombres y la historia de un ejército del pueblo (2006), Planeta y Juárez, la rebelión interminable (2007), Los
Carrancistas (2010), entre otros.
Joaquín Cosío. Presentará su libro Bala por mí el cordero que me olvida, lunes 3 de octubre, 16:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Actor mexicano reconocido por papeles como Rubén Mascarita en Matando cabos, Juan en Arráncame la vida; General Medrano en Quantum of Solace (007: Quantum), y su último personaje como El Cochiloco en El Infierno. Su primera obra literaria es un libro de poesía titulado Bala por mí el cordero que me olvida, editada por la Universidad Autónoma de Zacatecas y las Editoriales Ediciones Sin Nombre, Nod y Taberna Libraria.
Rosario Sanmiguel. Presenta Revista Levrel el martes 4 de octubre, a las 18:00 horas y el libro Árboles el jueves 6 de octubre, a las 18:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Nació en Manuel Benavides, Chihuahua, en 1954. Candidata a Doctor por la Universidad Estatal de Arizona, donde cursó la especialidad en novela histórica mexicana del Siglo XX. Ha sido incluída en la Antología Sin límites imaginarios. Cuentos del norte de México (UNAM 2006). Es autora
del cuentario Callejón Sucre y otros relatos (1994), la novela Árboles o apuntes de viaje (2006) y el libro de ensayos De la historia a la ficción (inédito). Actualmente escribe una novela histórica relacionada con el norte de México.
José Vicente Anaya. Presentará su libro La brevedad en la poesía y los cuentos de la China Clásica. Miércoles 5 de octubre, 18:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Nacido en Villa Matamoros, Chih, en 1947, José Vicente Anaya es poeta, ensayista, editor, traductor y periodista cultural. Fundador de Alforja, revista de poesía (1997-2008) y Ediciones Alforja, presidente de Alforja, Arte y Literatura, A.C. colabora con una columna quincenal en la sección de cultura del periódico El Financiero. Ha realizado lecturas de poesía y conferencias en varias universidades y centros culturales de Italia, Estados Unidos, Colombia, Costa Rica y México.
Guadalupe Loaeza. Presentará su libro Infancia es destino, el viernes 7 de octubre, a las 16:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Es originaria de la ciudad de México (1946). Su estilo combina la ironía con el análisis agudo para retratar a la clase privilegiada en México. Ha publicado sus libros Las niñas bien, Las reinas de Polanco, Primero las damas, Simplemente Martita, Compro, luego existo y Las yeguas finas (primera novela). Ha participado en diferentes medios como radio, cine, televisión, prensa escrita y revistas. Ha sido columnista del periódico Reforma, colabora con Ricardo Rocha y es conductora del Programa «A través del espejo», de Proyecto 40.
Marcelino Cereijido. Prsentará su libro Teoría general sobre los hijos de puta, viernes 7 de octubre, 18:00 horas. Foro Carlos Montemayor. Doctor en fisiología por la Universidad de Buenos Aires, realizó su post-doctorado en la Universidad de Harvard. Se ha desempeñado como profesor en el Instituto de Fisiología de la Universidad de Munich, del departamento de Biología Celular de la Universidad de Nueva York. Es profesor emérito del Centro de investigaciones y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, en México. Ha fungido como asesor de la UNESCO. Algunos de sus libros son: ¿Por qué no tenemos ciencia?, La ignorancia debida y Ciencia sin
seso, locura doble.
Víctor Orozco. Presentará su libro La toma de ciudad Juárez, una historia en imágenes. Sábado 8 de octubre, 17:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Es abogado, periodista, militante político, doctor en ciencia política y miembro del Sistema Nacional de Investigadores desde 1991. Fue profesor titular por oposición en la UNAM y actualmente es profesor de tiempo completo en la UACJ. Ha publicado varios libros y artículos sobre el estado de Chihuahua. Fundador y director de la revista Cuadernos del norte.
La Feria es posible por la participación del Gobierno del Estado de Chihuahua y su Programa Chihuahua Vive en la Cultura, la Secretaría de Educación, Cultura y Deporte, el Instituto Chihuahuense de la Cultura, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, la Presidencia Municipal de Chihuahua, la Universidad Autónoma de Chihuahua y la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
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José Vicente Anaya. (Foto: JMV / RanchoNEWS)
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (RanchoNEWS).- Este viernes 30 de septiembre se realizará la ceremonia de inauguración, a las 10:00 horas, con que dará inicio la doceava edición de la Feria Estatal del Libro en la ciudad de Chihuahua y en los municipios de Parral, Madera, Nuevo Casas Grandes, Guachochi, Delicias, Aquiles Serdán y Ojinaga. Con más de cien editoriales invitadas, se ofrecerán presentaciones de libros, mesas de diálogo de escritores, espectáculos musicales, teatro, talleres infantiles y juveniles, cuenta-cuentos, productos regionales, muchos libros y más, informa en un comunicado el Instituto Chihuahuense de la Cultura (Ichicult):
A realizarse del 30 de septiembre al 9 de octubre, será la Plaza Mayor de la ciudad de Chihuahua el recinto oficial para el desarrollo de la XII Feria Estatal de Libro, en cuyo marco se presentarán escritores de la talla de Ignacio Solares, con su libro El Jefe Máximo, autor que además recibirá el Premio Gawí Tónara 2011, como reconocimiento a su trayectoria como escritor y promotor cultural.
Visitará Chihuahua la señora Guadalupe Loaeza para presentar su libro Infancia es destino, José Vicente Anaya con su obra La brevedad en la poesía y los cuentos de la China Clásica; Pedro Salmerón con su libro Los Carrancistas; el historiador Víctor Orozco ofrecerá su magna obra La toma de Ciudad Juárez en imágenes, así también Joaquín Cosío con su poemario Bala por mí el cordero que me olvida, entre otros.
En recuerdo del inolvidable Carlos Montemayor el viernes 30 de septiembre, a las 16:00 horas, en el Foro Carlos Montemayor, se realizarán las Mesas de Culturas Indígenas, donde cuatro personajes como son Natalia Toledo, Natalio Hernández, José del Val y Raúl González debatirán en una mesa sobre literatura indígena.
También en homenaje del parralense ausente, el viernes 7 de octubre, a las 19:00 horas, en el Foro Carlos Montemayor, se ofrecerá una Mesa de diálogo sobre la obra del autor, con la participación de Rubén Mejía, Mario Humberto Chávez, Arturo Rico Bovio y Martha Estela Torres.
En municipios
La Feria Estatal del Libro que se desarrollará también en municipios, contará con exposición y venta de libros,espectáculos musicales y teatro, presentaciones de libros, editoriales invitadas, diálogo con escritores, talleres infantiles y juveniles, muestra de productos regionales, libros y mucho más.
• En Hidalgo del Parral, del 30 de septiembre al 2 de octubre.
• En Ciudad Madera del 30 de septiembre al 2 de octubre, en la explanada frente a la Presidencia Municipal. Informes: Presidencia Municipal. Dirección de Fomento Económico, Turismo y Cultura, Brígido León Orozco. Tels. (652) 572-10-11 ext. 109.
• En Nuevo Casas Grandes, del 6 al 8 de octubre en dos sedes principales: la Plaza Benito Juárez y la Biblioteca «Eduardo Contreras». Informes: Presidencia Municipal de Nuevo Casas Grandes, Ing. Jorge Chio Portillo, tel. (636) 694-09-75. Director de Bibliotecas, Miguel Montalvo, tel. (636) 694-42-72.
• En Guachochi, del 6 al 8 de octubre.
• En Ciudad Delicias, del 4 al 6 de octubre.
• En Aquiles Serdán, del 6 al 8 de octubre.
• En ciudad Ojinaga del 3 al 5 de octubre.
Invitados especiales
Ignacio Solares. Presentará su libro El Jefe Máximo el viernes 30 de septiembre, a las 18:00 horas, en el Foro Carlos Montemayor. Nacido en ciudad Juárez, Chih, en 1945. Autor de las novelas Delirium tremens, Anónimo, Madero el otro, La noche de Ángeles (Premio Diana Novedades, 1989), y El gran Elector, llevada al teatro, obteniendo Premio a la mejor obra del año.
Pedro Salmerón. Presentará su libro Los Carrancistas el sábado 1 de octubre, a las 17:30 horas, en Foro Carlos Montemayor. Es licenciado, maestro y doctor en historia por la UNAM. Profesor e investigador en la Escuela de Antropología e Historia y del Instituto Tecnológico Autónomo de México. Autor de los libros La División del Norte: la tierra, los hombres y la historia de un ejército del pueblo (2006), Planeta y Juárez, la rebelión interminable (2007), Los
Carrancistas (2010), entre otros.
Joaquín Cosío. Presentará su libro Bala por mí el cordero que me olvida, lunes 3 de octubre, 16:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Actor mexicano reconocido por papeles como Rubén Mascarita en Matando cabos, Juan en Arráncame la vida; General Medrano en Quantum of Solace (007: Quantum), y su último personaje como El Cochiloco en El Infierno. Su primera obra literaria es un libro de poesía titulado Bala por mí el cordero que me olvida, editada por la Universidad Autónoma de Zacatecas y las Editoriales Ediciones Sin Nombre, Nod y Taberna Libraria.
Rosario Sanmiguel. Presenta Revista Levrel el martes 4 de octubre, a las 18:00 horas y el libro Árboles el jueves 6 de octubre, a las 18:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Nació en Manuel Benavides, Chihuahua, en 1954. Candidata a Doctor por la Universidad Estatal de Arizona, donde cursó la especialidad en novela histórica mexicana del Siglo XX. Ha sido incluída en la Antología Sin límites imaginarios. Cuentos del norte de México (UNAM 2006). Es autora
del cuentario Callejón Sucre y otros relatos (1994), la novela Árboles o apuntes de viaje (2006) y el libro de ensayos De la historia a la ficción (inédito). Actualmente escribe una novela histórica relacionada con el norte de México.
José Vicente Anaya. Presentará su libro La brevedad en la poesía y los cuentos de la China Clásica. Miércoles 5 de octubre, 18:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Nacido en Villa Matamoros, Chih, en 1947, José Vicente Anaya es poeta, ensayista, editor, traductor y periodista cultural. Fundador de Alforja, revista de poesía (1997-2008) y Ediciones Alforja, presidente de Alforja, Arte y Literatura, A.C. colabora con una columna quincenal en la sección de cultura del periódico El Financiero. Ha realizado lecturas de poesía y conferencias en varias universidades y centros culturales de Italia, Estados Unidos, Colombia, Costa Rica y México.
Guadalupe Loaeza. Presentará su libro Infancia es destino, el viernes 7 de octubre, a las 16:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Es originaria de la ciudad de México (1946). Su estilo combina la ironía con el análisis agudo para retratar a la clase privilegiada en México. Ha publicado sus libros Las niñas bien, Las reinas de Polanco, Primero las damas, Simplemente Martita, Compro, luego existo y Las yeguas finas (primera novela). Ha participado en diferentes medios como radio, cine, televisión, prensa escrita y revistas. Ha sido columnista del periódico Reforma, colabora con Ricardo Rocha y es conductora del Programa «A través del espejo», de Proyecto 40.
Marcelino Cereijido. Prsentará su libro Teoría general sobre los hijos de puta, viernes 7 de octubre, 18:00 horas. Foro Carlos Montemayor. Doctor en fisiología por la Universidad de Buenos Aires, realizó su post-doctorado en la Universidad de Harvard. Se ha desempeñado como profesor en el Instituto de Fisiología de la Universidad de Munich, del departamento de Biología Celular de la Universidad de Nueva York. Es profesor emérito del Centro de investigaciones y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, en México. Ha fungido como asesor de la UNESCO. Algunos de sus libros son: ¿Por qué no tenemos ciencia?, La ignorancia debida y Ciencia sin
seso, locura doble.
Víctor Orozco. Presentará su libro La toma de ciudad Juárez, una historia en imágenes. Sábado 8 de octubre, 17:00 horas, Foro Carlos Montemayor. Es abogado, periodista, militante político, doctor en ciencia política y miembro del Sistema Nacional de Investigadores desde 1991. Fue profesor titular por oposición en la UNAM y actualmente es profesor de tiempo completo en la UACJ. Ha publicado varios libros y artículos sobre el estado de Chihuahua. Fundador y director de la revista Cuadernos del norte.
La Feria es posible por la participación del Gobierno del Estado de Chihuahua y su Programa Chihuahua Vive en la Cultura, la Secretaría de Educación, Cultura y Deporte, el Instituto Chihuahuense de la Cultura, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, la Presidencia Municipal de Chihuahua, la Universidad Autónoma de Chihuahua y la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
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Festival Internacional Chihuahua / Ciudad Juárez: «Los Caifanes, entre la nostalgia y la retoma de Juárez», crónica
.
Aspecto del público asistente. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- Fueron a escuchar su nostalgia, fueron a reencontrarse con sus recuerdos, consigo mismos, casi veinte años después, y los más jóvenes fueron a escuchar el mito que generaciones anteriores habían creado.
Concierto de Los Caifanes. Clausura del Festival Internacional Chihuahua. Estacionamiento del Estadio Olímpico Benito Juárez. Lunes 26 de septiembre.
Y no eran pocos. Diversas fuentes hablan de entre 20 y 30 mil asistentes, algunos reservando lugares desde las 16:00 horas, demostrando el poder de convocatoria que tiene este grupo que fue uno de los emblemas del llamado Rock en tu idioma, que prendió con mucha fuerza entre adolescentes y jóvenes en la década de los años ochenta en medios urbanos de clase media, la mayoría que no entendía el Rock en inglés y para quienes un grupo como Los Caifanes, con canciones facilonas y con una leve barnizada de poesía en sus letras, era sumamente atractivo y les proporcionaba un consecuente sentido de identidad.
Pero el tiempo es el tiempo y a los oídos de quienes no vivieron ese fenómeno la música de Los Caifanes suena estancada, con un vocalista de voz débil; de hecho no lograron que la gente bailara y realmente se entusiasmara (un joven a mi izquierda bosteza), la participación del público consistió en corear los temas más conocidos y dos horas fue excesivo. Los Caifanes pueden defenderse bien con los últimos cinco o seis temas que interpretaron.
Pero, para la mayoría, la noche no se trataba de eso. Se trataba de un entregado acto de nostalgia y también de otro acto: un ejercicio más de retomar la ciudad. «Juárez está vivo», gritó Saúl Hernández y precisamente a eso fue la juventud juarense, a demostrar que como comunidad estamos luchando por recuperar nuestra casa y que no nos hemos rendido ni hemos huido de ella.
El saldo fue blanco. Botellas de plástico con agua lanzadas al aire, condones fungiendo como globos, olor a mariguana. La policía cumpliendo como buena policía. Saldo blanco.
Y el sabor mexicano que siempre se cuela. «¡Papas light! ¡Papas light!», voceaba una muy obesa vendedora de papas fritas y por si fuera poco agregaba: «Lo que engorda son los elotes». Luego durante la canción de «La Negra Tomasa», una vendedora algodones de dulce, de más de setenta años, se puso a bailar como si se tratara de una cumbia, apoyada en el palo de los algodones, para el festejo de los concurrentes; y finalmente un gordito ques se subió al escenario, quién sabe cómo, tomó el micrófono principal y prácticamente terminó el concierto sin que ninguna persona lo interrumpiera.
Así es México. Así somos los mexicanos.
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Aspecto del público asistente. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- Fueron a escuchar su nostalgia, fueron a reencontrarse con sus recuerdos, consigo mismos, casi veinte años después, y los más jóvenes fueron a escuchar el mito que generaciones anteriores habían creado.
Concierto de Los Caifanes. Clausura del Festival Internacional Chihuahua. Estacionamiento del Estadio Olímpico Benito Juárez. Lunes 26 de septiembre.
Y no eran pocos. Diversas fuentes hablan de entre 20 y 30 mil asistentes, algunos reservando lugares desde las 16:00 horas, demostrando el poder de convocatoria que tiene este grupo que fue uno de los emblemas del llamado Rock en tu idioma, que prendió con mucha fuerza entre adolescentes y jóvenes en la década de los años ochenta en medios urbanos de clase media, la mayoría que no entendía el Rock en inglés y para quienes un grupo como Los Caifanes, con canciones facilonas y con una leve barnizada de poesía en sus letras, era sumamente atractivo y les proporcionaba un consecuente sentido de identidad.
Pero el tiempo es el tiempo y a los oídos de quienes no vivieron ese fenómeno la música de Los Caifanes suena estancada, con un vocalista de voz débil; de hecho no lograron que la gente bailara y realmente se entusiasmara (un joven a mi izquierda bosteza), la participación del público consistió en corear los temas más conocidos y dos horas fue excesivo. Los Caifanes pueden defenderse bien con los últimos cinco o seis temas que interpretaron.
Pero, para la mayoría, la noche no se trataba de eso. Se trataba de un entregado acto de nostalgia y también de otro acto: un ejercicio más de retomar la ciudad. «Juárez está vivo», gritó Saúl Hernández y precisamente a eso fue la juventud juarense, a demostrar que como comunidad estamos luchando por recuperar nuestra casa y que no nos hemos rendido ni hemos huido de ella.
El saldo fue blanco. Botellas de plástico con agua lanzadas al aire, condones fungiendo como globos, olor a mariguana. La policía cumpliendo como buena policía. Saldo blanco.
Y el sabor mexicano que siempre se cuela. «¡Papas light! ¡Papas light!», voceaba una muy obesa vendedora de papas fritas y por si fuera poco agregaba: «Lo que engorda son los elotes». Luego durante la canción de «La Negra Tomasa», una vendedora algodones de dulce, de más de setenta años, se puso a bailar como si se tratara de una cumbia, apoyada en el palo de los algodones, para el festejo de los concurrentes; y finalmente un gordito ques se subió al escenario, quién sabe cómo, tomó el micrófono principal y prácticamente terminó el concierto sin que ninguna persona lo interrumpiera.
Así es México. Así somos los mexicanos.
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Festival Internacional Chihuahua / Ciudad Juárez: «La noche del reencuentro con Los Caifanes», reseña
.
El grupo mexicano en el templete del estacionamiento del Estadio Olímpico Benito Juárez. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (Jacqueline Rodríguez / RanchoNEWS).- La hora cero llegó y el reencuentro de los juarenes con Caifanes se dio, la música de la banda que marcó la vida de muchos y que aún continúa haciéndolo, se escuchó por todo lo alto en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez.
Cuando se supo que la banda se reencontraba siendo el festival Vive Latino donde lo harían, jamás de imaginó «la raza» juarense que también sería testigos de este acontecimiento luego de 16 años de haber desaparecido de la escena musical.
Así que los fans de hueso colorado y las nuevas generaciones no dudaron en acudir al llamado de la banda y transportarse a aquella época en el que el rock en el español despegaba con gran fuerza, sobre todo en manos de Caifanes.
Emotivo resultó ver sobre el mismo escenario a Sabo Romo, Alejandro Marcovich, Diego Herrera, Alfonso André y Saúl Herrera, quienes fueron recibidos con una estruendosa ovación para así marcar el inicio del tan esperado concierto.
Fue entonces que se empezó a escucar las primera notas de «Viento», lo cual causó más alegría entre el público y así preparse a cantar con todas sus fuerzas para que Los Caifanes los escucharan.
A pesar de que la legendaría banda ya estaba en el escenario muchos continuaban incrédulos de vivir ese momento, otros más emocionados por ser los privilegiados de estar ahí, de aguantar horas resisitiendo el calor solo para vivir en carne propia del momento.
En tanto, la agrupación hacía lo suyo en el escenario, difrutando de tocar nuevamente en vivo la música, de que los malos entendidos quedaron atrás, podría vérseles en completa armonía, sonreírse, acercarcándose entre ellos en alguna nota de una canción o ponerse de acuerdo.
Así, entre la cordialidad del grupo y del público trancurrió la velada, entre temas como «Para que no digas que no pienso en ti», «Antes de que nos olviden», «Perdí mi ojo de venado», «Los dioses ocultos», «Detrás de ti», «Amanece» y «Mátenme por que me muero».
«Muchas gracias, Juárez está más vivo que nunca, Caifanes a sus pies"» fueron de las palabras que dirigió Saúl al público mientras que este último respondía con gritos y aplausos en cada intervención que hacía.
Luego de haber comenzado el concierto a las 8:30 de la noche y trancurrír los minutos a las 10:15, la agrupación anunciaba su adiós pero todavía faltaban de tocar sus más grandes éxitos por lo que la raza no tardó en ejercer presión para que regresar al escenario y les regalaran más buena música.
Sin duda que Los Caifanes sabían que no podían irse, reservando lo mejor de su repertorio se dejó para el super final, fue entonces que llegó «La negra tomasa» ante el júbilo de los presentes que la cantaron de principio a fin.
Acto seguido se siguió con «Nubes», «La célula que explota», «Afuera» y «No dejes que», con las que la adenalina subió de nivel y con las que definitivamente habían dejado más que satisfechos a los presentes que fácil podían superar la cantidad de 20 mil en asistencia.
Fue así como se cerró con broche de oro las festividades en exterior del séptimo Festival Internacional Chihuahua, con un concierto emotivo, de añoranza y sana convivivencia donde una vez más los juarenses no tuvieron miedo de salir y olvidar, aunque fuera por unos instantes, la problemática que se vive en la región.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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El grupo mexicano en el templete del estacionamiento del Estadio Olímpico Benito Juárez. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 27 de septiembre de 2011. (Jacqueline Rodríguez / RanchoNEWS).- La hora cero llegó y el reencuentro de los juarenes con Caifanes se dio, la música de la banda que marcó la vida de muchos y que aún continúa haciéndolo, se escuchó por todo lo alto en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez.
Cuando se supo que la banda se reencontraba siendo el festival Vive Latino donde lo harían, jamás de imaginó «la raza» juarense que también sería testigos de este acontecimiento luego de 16 años de haber desaparecido de la escena musical.
Así que los fans de hueso colorado y las nuevas generaciones no dudaron en acudir al llamado de la banda y transportarse a aquella época en el que el rock en el español despegaba con gran fuerza, sobre todo en manos de Caifanes.
Emotivo resultó ver sobre el mismo escenario a Sabo Romo, Alejandro Marcovich, Diego Herrera, Alfonso André y Saúl Herrera, quienes fueron recibidos con una estruendosa ovación para así marcar el inicio del tan esperado concierto.
Fue entonces que se empezó a escucar las primera notas de «Viento», lo cual causó más alegría entre el público y así preparse a cantar con todas sus fuerzas para que Los Caifanes los escucharan.
A pesar de que la legendaría banda ya estaba en el escenario muchos continuaban incrédulos de vivir ese momento, otros más emocionados por ser los privilegiados de estar ahí, de aguantar horas resisitiendo el calor solo para vivir en carne propia del momento.
En tanto, la agrupación hacía lo suyo en el escenario, difrutando de tocar nuevamente en vivo la música, de que los malos entendidos quedaron atrás, podría vérseles en completa armonía, sonreírse, acercarcándose entre ellos en alguna nota de una canción o ponerse de acuerdo.
Así, entre la cordialidad del grupo y del público trancurrió la velada, entre temas como «Para que no digas que no pienso en ti», «Antes de que nos olviden», «Perdí mi ojo de venado», «Los dioses ocultos», «Detrás de ti», «Amanece» y «Mátenme por que me muero».
«Muchas gracias, Juárez está más vivo que nunca, Caifanes a sus pies"» fueron de las palabras que dirigió Saúl al público mientras que este último respondía con gritos y aplausos en cada intervención que hacía.
Luego de haber comenzado el concierto a las 8:30 de la noche y trancurrír los minutos a las 10:15, la agrupación anunciaba su adiós pero todavía faltaban de tocar sus más grandes éxitos por lo que la raza no tardó en ejercer presión para que regresar al escenario y les regalaran más buena música.
Sin duda que Los Caifanes sabían que no podían irse, reservando lo mejor de su repertorio se dejó para el super final, fue entonces que llegó «La negra tomasa» ante el júbilo de los presentes que la cantaron de principio a fin.
Acto seguido se siguió con «Nubes», «La célula que explota», «Afuera» y «No dejes que», con las que la adenalina subió de nivel y con las que definitivamente habían dejado más que satisfechos a los presentes que fácil podían superar la cantidad de 20 mil en asistencia.
Fue así como se cerró con broche de oro las festividades en exterior del séptimo Festival Internacional Chihuahua, con un concierto emotivo, de añoranza y sana convivivencia donde una vez más los juarenses no tuvieron miedo de salir y olvidar, aunque fuera por unos instantes, la problemática que se vive en la región.
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lunes, septiembre 26, 2011
Festival Internacional Chihuahua / Ciudad Juárez: «Noche de añoranza y pisotones con Los Enanitos Verdes», reseña
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El grupo argentino en el templete de la explanada del CCPN. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 26 de marzo de 2011. (Jacqueline Rodríguez / RanchoNEWS).- Ni un solo alfiler cabía en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte pues anoche se efectuó la presentación de Enanitos Verdes quienes lograron prender con los éxitos que los han mantenido en la industria de la música por 32 años.
Para este penúltimo evento en exterior del Festival Internacional Chihuahua se rebasaron las expectativas ya que se tuvo una asistencia de más de 15 mil personas. Así que a donde se quisiera voltear, había gente, de todas la edades, desde chavitos hasta aquellos que viveron la gloriosa época de los ochentas donde fue el apogeo de la banda argentina.
Con atuendos por demás sencillos y con ganas de rocanrolear con los fronterizos, los Enanitos Verdes se dispusieron a tocar lo mejor de su repertorio por cerca de dos horas en que la gente no paraba de cantar y de registrar cada momento del concierto a través de sus cámaras o celulares.
«Francés limón» fue con el que arrancaron el recorrido musical que abarcó sus quince álbumes, prosiguiendo con «Dale Pascual», «Cordillera», «Amores lejanos», «Eterna soledad», «Por el resto de tus días» y «Tu cárcel», que sorprendentemente fue la más ovacionada de la noche ya que no es original de la agrupación.
Por momentos los ánimos se caldeaban pues por la gran cantidad de gente que había en el lugar, ya que algunos querían pasar hacía otro punto, causando la molestía entre los que ya se encontraban fijos.
Un total de 18 canciones fueron intepretadas por los músicos argentinos, en las que también figuraron «Lamento boliviano», «Mejor no hablemos de amor», «Tus viejas cartas» y «Guitarras blancas" con la cual cerraron con éxito su actuación.
También hubo aventones, pisotones, relajo, diversión y añoranza por parte de todos los que se reunieron en el recinto por última vez, el cual albergó en su séptima edición a los eventos masivos del Festival Internacional Chihuahua y que su clausura se efecturá este lunes con la presentación de Caifanes en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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El grupo argentino en el templete de la explanada del CCPN. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 26 de marzo de 2011. (Jacqueline Rodríguez / RanchoNEWS).- Ni un solo alfiler cabía en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte pues anoche se efectuó la presentación de Enanitos Verdes quienes lograron prender con los éxitos que los han mantenido en la industria de la música por 32 años.
Para este penúltimo evento en exterior del Festival Internacional Chihuahua se rebasaron las expectativas ya que se tuvo una asistencia de más de 15 mil personas. Así que a donde se quisiera voltear, había gente, de todas la edades, desde chavitos hasta aquellos que viveron la gloriosa época de los ochentas donde fue el apogeo de la banda argentina.
Con atuendos por demás sencillos y con ganas de rocanrolear con los fronterizos, los Enanitos Verdes se dispusieron a tocar lo mejor de su repertorio por cerca de dos horas en que la gente no paraba de cantar y de registrar cada momento del concierto a través de sus cámaras o celulares.
«Francés limón» fue con el que arrancaron el recorrido musical que abarcó sus quince álbumes, prosiguiendo con «Dale Pascual», «Cordillera», «Amores lejanos», «Eterna soledad», «Por el resto de tus días» y «Tu cárcel», que sorprendentemente fue la más ovacionada de la noche ya que no es original de la agrupación.
Por momentos los ánimos se caldeaban pues por la gran cantidad de gente que había en el lugar, ya que algunos querían pasar hacía otro punto, causando la molestía entre los que ya se encontraban fijos.
Un total de 18 canciones fueron intepretadas por los músicos argentinos, en las que también figuraron «Lamento boliviano», «Mejor no hablemos de amor», «Tus viejas cartas» y «Guitarras blancas" con la cual cerraron con éxito su actuación.
También hubo aventones, pisotones, relajo, diversión y añoranza por parte de todos los que se reunieron en el recinto por última vez, el cual albergó en su séptima edición a los eventos masivos del Festival Internacional Chihuahua y que su clausura se efecturá este lunes con la presentación de Caifanes en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez.
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domingo, septiembre 25, 2011
Festival Internacional Chihuahua / «Omáwari 2011», crónica
.
Aspecto de la conferencia de Omáwari. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 23 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- «Quisiera ser un portavoz de esa inconformidad que tenemos los pueblos originarios de nuestra región y de nuestro territorio, no nada más a nivel nacional sino a nivel mundial, por la terrible opresión que tenemos por parte de la globalización que pretende exterminar nuestras costumbres y que perdamos nuestra identidad», dice enfático Esteban Bernal, de la etnia otomí e integrante del grupo musical Los Colibríes de Xonacatlán (Estado de México).
Lobby del Teatro Experimental. Centro Cultural Paso del Norte (CCPN). Ciudad Juárez. 23 de septiembre 2011.
Este mediodía se realiza una conferencia de prensa con los participantes del Omáwari («Encuentro de Naciones», en rarámuri), la expresión artistica y cultural de las etnias originales de América, dentro de la programación del Festival Internacional Chihuahua.
Y ahí están, tras una mesa, con su vestimenta típica, serios, los representantes de los grupos Amanecer del Llano, Seguidores de la Huasteca, Yawar Chicchi, el citado Los Colibríes de Xonacatlán, sólo falta el grupo Té-Con-Té, que en ese momento hace pruebas de sonido en el templete de la explanada del centro, quince personas en total.
Ahí están en espera de una cita con la prensa juarense, a la cual acudiría únicamente la Revista Rancho Las Voces y un diario impreso secundario.
«El grupo de Los Colibríes ha tratado de preservar la lengua otomí mediante las canciones para de esa manera transmitir a las generaciones nuevas una parte de nuestra identidad que es la lingüística», explica Benal a Rancho Las Voces.
Este conjunto se dedica a investigar, preservar y difundir la música otomí producida en un radio de varios kilómetros en torno a Toluca, en el Estado de México.
Yawar Chicchi
El peruano Reichichi (que es su nombre artístico y que en su lengua quechúa significa «Lluvia y granizo») fungiría como vocero del grupo andino Yawar Chicchi (Danzantes de Tijeras) del poblado Huacandica en el país sudamericano.
Reichichi dice que la Danza de las Tijeras, que la Unesco ha designado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, es una danza autóctona y milenaria de «los profundos andes», que se baila acompañando con quenas, tinya, lajas de piedras, violín y arpa, estos dos últimos instrumentos incorporados por la influencia española.
Los danzantes además portan cada uno una indumentaria relacionada con el culto a los Apus Wamanis (el dios Andino), con colores vivos que recuerdan el colorido de la iconografía huichol.
Esta danza que, según unas fuentes, era ejercida por chamanes con motivos de la siembra, la cosecha, la esquila de auquénidos, de ahí las lajas de piedra o actualmente tijeras. A la llegada de los españoles sus practicantes huyeron a lo más alto de las montañas para preservarla y los españoles después transigieron con ellos para que participaran en fiestas católicas.
El grupo, en esta ocasión compuesto por 18 artistas, ha realizado giras por China y Europa. En México se ha presentado en los estados de Hidalgo y Nuevo León, siendo ésta su primera visita a Chihuahua.
Los Seguidores de la Huasteca
El trío Los Seguidores de la Huasteca, está conformado por Maurilio Hernández, violín; Juan Peña, quinta huapanguera, y Joaquín Morales, jarana, proceden de Tamanzuchale, San Luis Potosí.
Su cometido, según informa Maurilio Hernández, líder del grupo, además de interpretar el son huasteco tradicional mejor conocido como huapango, es preservar los sones utilizados para festividades y rituales de los indígenas de la Huasteca; y para reforzar esta vocación agradeció en su lengua náhuatl la invitación al Festival.
Yúmari
En la sala también estuvieron presentes, Martín y Clemente Cruz ambos Guachochi, dos de los rarámuris que oficiarían el Yúmari, que es la ceremonia más importante de la cultura Rarámuri (Tarahumara), en la cual se agradece al dios Onorúame por la cosecha y el buen invierno; y se le pide por el binestar de todos los seres vivos.
Amanecer del Llano
María Albina Domínguez y Eleazar Alfonso Domínguez, representaron al Grupo Cultural Mazahua Amanecer del Llano, que dentro de sus actividades cuentan con un grupo de danza tradicional.
La lengua mazahua es una lengua que se habla en el centro de México. Sus hablantes denominan a la lengua con el nombre de jñatio, con el que también se designan a sí mismos los mazahuas. Este último es un etnónimo náhuatl que significa gente que posee venados.
A continuación ofrecemos –en exclusiva– una muestra de este idioma con la señora María Albina Domínguez, de 76 años, en un audio donde habla de su sentimiento ante la extinción de su lengua.
A partir de las seis de la tarde se llevaría a cabo el Omáwari en la explanada del CCPN, del cual les ofrecemos la siguiente galería fotógrafica del juarense Gabriel Cardona.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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Aspecto de la conferencia de Omáwari. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 23 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- «Quisiera ser un portavoz de esa inconformidad que tenemos los pueblos originarios de nuestra región y de nuestro territorio, no nada más a nivel nacional sino a nivel mundial, por la terrible opresión que tenemos por parte de la globalización que pretende exterminar nuestras costumbres y que perdamos nuestra identidad», dice enfático Esteban Bernal, de la etnia otomí e integrante del grupo musical Los Colibríes de Xonacatlán (Estado de México).
Lobby del Teatro Experimental. Centro Cultural Paso del Norte (CCPN). Ciudad Juárez. 23 de septiembre 2011.
Este mediodía se realiza una conferencia de prensa con los participantes del Omáwari («Encuentro de Naciones», en rarámuri), la expresión artistica y cultural de las etnias originales de América, dentro de la programación del Festival Internacional Chihuahua.
Y ahí están, tras una mesa, con su vestimenta típica, serios, los representantes de los grupos Amanecer del Llano, Seguidores de la Huasteca, Yawar Chicchi, el citado Los Colibríes de Xonacatlán, sólo falta el grupo Té-Con-Té, que en ese momento hace pruebas de sonido en el templete de la explanada del centro, quince personas en total.
Ahí están en espera de una cita con la prensa juarense, a la cual acudiría únicamente la Revista Rancho Las Voces y un diario impreso secundario.
«El grupo de Los Colibríes ha tratado de preservar la lengua otomí mediante las canciones para de esa manera transmitir a las generaciones nuevas una parte de nuestra identidad que es la lingüística», explica Benal a Rancho Las Voces.
Este conjunto se dedica a investigar, preservar y difundir la música otomí producida en un radio de varios kilómetros en torno a Toluca, en el Estado de México.
Yawar Chicchi
El peruano Reichichi (que es su nombre artístico y que en su lengua quechúa significa «Lluvia y granizo») fungiría como vocero del grupo andino Yawar Chicchi (Danzantes de Tijeras) del poblado Huacandica en el país sudamericano.
Reichichi dice que la Danza de las Tijeras, que la Unesco ha designado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, es una danza autóctona y milenaria de «los profundos andes», que se baila acompañando con quenas, tinya, lajas de piedras, violín y arpa, estos dos últimos instrumentos incorporados por la influencia española.
Los danzantes además portan cada uno una indumentaria relacionada con el culto a los Apus Wamanis (el dios Andino), con colores vivos que recuerdan el colorido de la iconografía huichol.
Esta danza que, según unas fuentes, era ejercida por chamanes con motivos de la siembra, la cosecha, la esquila de auquénidos, de ahí las lajas de piedra o actualmente tijeras. A la llegada de los españoles sus practicantes huyeron a lo más alto de las montañas para preservarla y los españoles después transigieron con ellos para que participaran en fiestas católicas.
El grupo, en esta ocasión compuesto por 18 artistas, ha realizado giras por China y Europa. En México se ha presentado en los estados de Hidalgo y Nuevo León, siendo ésta su primera visita a Chihuahua.
Los Seguidores de la Huasteca
El trío Los Seguidores de la Huasteca, está conformado por Maurilio Hernández, violín; Juan Peña, quinta huapanguera, y Joaquín Morales, jarana, proceden de Tamanzuchale, San Luis Potosí.
Su cometido, según informa Maurilio Hernández, líder del grupo, además de interpretar el son huasteco tradicional mejor conocido como huapango, es preservar los sones utilizados para festividades y rituales de los indígenas de la Huasteca; y para reforzar esta vocación agradeció en su lengua náhuatl la invitación al Festival.
Yúmari
En la sala también estuvieron presentes, Martín y Clemente Cruz ambos Guachochi, dos de los rarámuris que oficiarían el Yúmari, que es la ceremonia más importante de la cultura Rarámuri (Tarahumara), en la cual se agradece al dios Onorúame por la cosecha y el buen invierno; y se le pide por el binestar de todos los seres vivos.
Amanecer del Llano
María Albina Domínguez y Eleazar Alfonso Domínguez, representaron al Grupo Cultural Mazahua Amanecer del Llano, que dentro de sus actividades cuentan con un grupo de danza tradicional.
La lengua mazahua es una lengua que se habla en el centro de México. Sus hablantes denominan a la lengua con el nombre de jñatio, con el que también se designan a sí mismos los mazahuas. Este último es un etnónimo náhuatl que significa gente que posee venados.
A continuación ofrecemos –en exclusiva– una muestra de este idioma con la señora María Albina Domínguez, de 76 años, en un audio donde habla de su sentimiento ante la extinción de su lengua.
A partir de las seis de la tarde se llevaría a cabo el Omáwari en la explanada del CCPN, del cual les ofrecemos la siguiente galería fotógrafica del juarense Gabriel Cardona.
Galería
Trío de rarámuris en el Lobby del CCPN. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Parte del elenco de Yawar Chichi. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 1. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 2. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 3. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 4. (Foto: gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 5. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Té-Con-Té. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
El zapateado de Té-Con-Té. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
El tradicional baile en torno al fuego. (Foto: gabriel Cardona / FICh)
Trío de rarámuris en el Lobby del CCPN. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Parte del elenco de Yawar Chichi. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 1. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 2. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 3. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 4. (Foto: gabriel Cardona / FICh)
Yawar Chichi en escena 5. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
Té-Con-Té. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
El zapateado de Té-Con-Té. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
El tradicional baile en torno al fuego. (Foto: gabriel Cardona / FICh)
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Festival Internacional Chihuahua / Ciudad Juárez: «La memorable noche de Mozart Group», reseña
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De izq. a der.: Filip Jáslar, Michail Sikorski, Pawel Kowaluk y Bolek Blaszczyk en el escenario del Teatro Rascón Banda. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 25 de septiembre de 2011. (Jacqueline Rodríguez / RanchoNEWS).- Lo que se pensaba que sería un recital de música clásica, sobre todo por el nombre del conjunto que lo interpretaría, resultó muy alejado de la realidad pues fue un concierto lleno de ironía y buen humor.
Mozart group, un cuarteto de cuerdas de origen polaco, hizo una verdadera delicia la estadía del público anoche en el teatro del Centro Cultural Paso del Norte donde se presentaron como parte de las jornadas del Séptimo Festival Internacional Chihuahua.
No hay que negar que hubo música de este importante compositor austriaco o de otro célebre representante del género, sólo que eran fusionadas con otros temas más contemporáneos, lo cual fue verdaderamente sorprendente y muy, pero muy divertido.
El conjunto compuesto por dos violines, Filip Jáslar en el primero y Michail Sikorski como segundo, Pawel Kowaluk en la viola y Bolek Blaszczyk en el chello, deslumbraron con su talento e ingenio para ir de lo tradicional a lo inconcebible.
Como lo es el empezar a escuchar los primeros acordes de «Pequeña Serenata Nocturna» de Mozart para seguir con un recorrido por piezas de rock and roll como «Around the clock» hasta llegar con los Beatles y terminar con una parodia de Michale Jackson «Mozart-beat».
Su lema es el siguiente: «Existimos a pesar de la formalidad sobria de las grandes salas de concierto, a pesar de la vida aburrida de los músicos clásicos, a pesar de los fanáticos amantes de la musica clasica, a pesar de los fans de rock, rap o pop que tienen miedo de la musica clásica. Tratamos a nuestro público con una cierta dosis de ironía humorística y estamos seguros de que no tendrán nada en contra de ella».
Y así fue, el público no paró de reír a carcajada abierta y siempre estaba expectante a lo que acontecería, pues cuando se pensaba que ya se tomaría más en serio el asunto surgía algo en el acto que lo cambiaba en su totalidad.
Como por ejemplo el recrear la clásica escena de la película Titanic, hacer sonidos con sus instrumentos de animales o convetirlos en guitarra para interpretar el tema de la película Desperado de Antonio Banderas.
Bailar, cantar, hasta tocar sus instrumentos en pareja o con una sola mano mientras la otra la ocultaban dentro de la bolsa del pantalón, fueron sólo algunas de las acciones que realizaban este grupo de artistas, mismos que eran alabados por el público.
Sorprendentes y virtuosos al momento de interpretar cada pieza que podría ir de Beethoven y proseguir bajo el ritmo del jazz, cha cha cha, tango e incluir un tema de Elvis Presley o Abba. Y por estar en México no podría faltar una melodía de esta tierra como lo fue «La bamba».
El público no estaba dispuesto a dejarlos ir haciéndolos regresar en varias ocasiones, siendo en una de ellas cuando Jáslar bajó del escenario para inivtar a un caballero del público a ser participe del siguiente número que era una imitación de los Tres Tenores con «O sole mio», lo cual fue verderamente hilarante.
Una velada en que la risa fue el ingrendiente principal en un espectáculo que definitivamente quedará guardado en la memoria de los juarenses por largo tiempo.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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De izq. a der.: Filip Jáslar, Michail Sikorski, Pawel Kowaluk y Bolek Blaszczyk en el escenario del Teatro Rascón Banda. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 25 de septiembre de 2011. (Jacqueline Rodríguez / RanchoNEWS).- Lo que se pensaba que sería un recital de música clásica, sobre todo por el nombre del conjunto que lo interpretaría, resultó muy alejado de la realidad pues fue un concierto lleno de ironía y buen humor.
Mozart group, un cuarteto de cuerdas de origen polaco, hizo una verdadera delicia la estadía del público anoche en el teatro del Centro Cultural Paso del Norte donde se presentaron como parte de las jornadas del Séptimo Festival Internacional Chihuahua.
No hay que negar que hubo música de este importante compositor austriaco o de otro célebre representante del género, sólo que eran fusionadas con otros temas más contemporáneos, lo cual fue verdaderamente sorprendente y muy, pero muy divertido.
El conjunto compuesto por dos violines, Filip Jáslar en el primero y Michail Sikorski como segundo, Pawel Kowaluk en la viola y Bolek Blaszczyk en el chello, deslumbraron con su talento e ingenio para ir de lo tradicional a lo inconcebible.
Como lo es el empezar a escuchar los primeros acordes de «Pequeña Serenata Nocturna» de Mozart para seguir con un recorrido por piezas de rock and roll como «Around the clock» hasta llegar con los Beatles y terminar con una parodia de Michale Jackson «Mozart-beat».
Su lema es el siguiente: «Existimos a pesar de la formalidad sobria de las grandes salas de concierto, a pesar de la vida aburrida de los músicos clásicos, a pesar de los fanáticos amantes de la musica clasica, a pesar de los fans de rock, rap o pop que tienen miedo de la musica clásica. Tratamos a nuestro público con una cierta dosis de ironía humorística y estamos seguros de que no tendrán nada en contra de ella».
Y así fue, el público no paró de reír a carcajada abierta y siempre estaba expectante a lo que acontecería, pues cuando se pensaba que ya se tomaría más en serio el asunto surgía algo en el acto que lo cambiaba en su totalidad.
Como por ejemplo el recrear la clásica escena de la película Titanic, hacer sonidos con sus instrumentos de animales o convetirlos en guitarra para interpretar el tema de la película Desperado de Antonio Banderas.
Bailar, cantar, hasta tocar sus instrumentos en pareja o con una sola mano mientras la otra la ocultaban dentro de la bolsa del pantalón, fueron sólo algunas de las acciones que realizaban este grupo de artistas, mismos que eran alabados por el público.
Sorprendentes y virtuosos al momento de interpretar cada pieza que podría ir de Beethoven y proseguir bajo el ritmo del jazz, cha cha cha, tango e incluir un tema de Elvis Presley o Abba. Y por estar en México no podría faltar una melodía de esta tierra como lo fue «La bamba».
El público no estaba dispuesto a dejarlos ir haciéndolos regresar en varias ocasiones, siendo en una de ellas cuando Jáslar bajó del escenario para inivtar a un caballero del público a ser participe del siguiente número que era una imitación de los Tres Tenores con «O sole mio», lo cual fue verderamente hilarante.
Una velada en que la risa fue el ingrendiente principal en un espectáculo que definitivamente quedará guardado en la memoria de los juarenses por largo tiempo.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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Obituario / José Miguel Varas
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El escritor chileno. (Foto: Archivo)
C iudad Juárez, Chihuahua, 24 de septiemebre 2011. (RanchoNEWS).- El periodista y escritor José Miguel Varas, ganador del Premio Nacional de Literatura en 2006, conocido también como un locutor de rostro serio e imperturbable, murió el viernes. Tenía 83 años. Una entrega de AP:
Varas falleció en su hogar como consecuencia de un ataque cardiaco, según informaron diversas fuentes de la familia a los medios.
El ganador del máximo galardón de las letras chilenas el 2006, fue miembro del Partido Comunista hasta 1990 cuando abandonó esa colectividad.
En una ocasión dijo que lo habría hecho muchos antes, si no hubiese sido porque se prolongaba la dictadura del general Augusto Pinochet, a quien combatió tenazmente.
Hijo de un militar, Varas nació el 28 de marzo de 1928 en Santiago, y desarrolló su veta literaria al mismo tiempo que ejercía el periodismo, aunque gustaba resaltar que primero que nada era «un hombre de radio», medio en que se desempeñó desde joven.
Fue director del diario El Siglo, del Partido Comunista, y también se ocupó el cargo de jefe de prensa del canal de televisión estatal durante el gobierno del presidente socialista Salvador Allende, y durante un tiempo apareció en cámara leyendo los noticiarios.
Tras el golpe militar de 1973 salió al exilio, y se radicó Moscú, desde donde su voz profunda y su perfecta modulación se hicieron populares entre los chilenos que resistían a la dictadura y que, noche a noche, sintonizaban clandestinamente «Escucha, Chile» por la onda corta de Radio Moscú.
De su permanencia en la antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, surgió su obra Las pantuflas de Stalin.
Varas fue muy cercano al poeta chileno y militante comunista Pablo Neruda, ganador del premio Nobel en 1971. Inspirado en su amigo escribió Neruda clandestino (2003), obra en la que mezcló el reportaje con la novela. También fue autor de Neruda y la espada de Damocles (1992) y Nerudario (1999).
El escritor murió como su amigo Neruda también un 23 de septiembre.
Aunque también incursionó en otros géneros, fue el cuento el que le significó ser distinguido con el máximo galardón de la literatura chilena.
A los 18 años publicó su primer libro, Cahuín. «Es el más completo escritor de cuentos que ha habido en la historia de Chile, tanto en el número de cuentos publicados como por su calidad literaria», sostuvo el jurado que le entregó el Premio Nacional de Literatura.
Al morir no alcanzó a concluir sus memorias que preparaba.
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El escritor chileno. (Foto: Archivo)
C iudad Juárez, Chihuahua, 24 de septiemebre 2011. (RanchoNEWS).- El periodista y escritor José Miguel Varas, ganador del Premio Nacional de Literatura en 2006, conocido también como un locutor de rostro serio e imperturbable, murió el viernes. Tenía 83 años. Una entrega de AP:
Varas falleció en su hogar como consecuencia de un ataque cardiaco, según informaron diversas fuentes de la familia a los medios.
El ganador del máximo galardón de las letras chilenas el 2006, fue miembro del Partido Comunista hasta 1990 cuando abandonó esa colectividad.
En una ocasión dijo que lo habría hecho muchos antes, si no hubiese sido porque se prolongaba la dictadura del general Augusto Pinochet, a quien combatió tenazmente.
Hijo de un militar, Varas nació el 28 de marzo de 1928 en Santiago, y desarrolló su veta literaria al mismo tiempo que ejercía el periodismo, aunque gustaba resaltar que primero que nada era «un hombre de radio», medio en que se desempeñó desde joven.
Fue director del diario El Siglo, del Partido Comunista, y también se ocupó el cargo de jefe de prensa del canal de televisión estatal durante el gobierno del presidente socialista Salvador Allende, y durante un tiempo apareció en cámara leyendo los noticiarios.
Tras el golpe militar de 1973 salió al exilio, y se radicó Moscú, desde donde su voz profunda y su perfecta modulación se hicieron populares entre los chilenos que resistían a la dictadura y que, noche a noche, sintonizaban clandestinamente «Escucha, Chile» por la onda corta de Radio Moscú.
De su permanencia en la antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, surgió su obra Las pantuflas de Stalin.
Varas fue muy cercano al poeta chileno y militante comunista Pablo Neruda, ganador del premio Nobel en 1971. Inspirado en su amigo escribió Neruda clandestino (2003), obra en la que mezcló el reportaje con la novela. También fue autor de Neruda y la espada de Damocles (1992) y Nerudario (1999).
El escritor murió como su amigo Neruda también un 23 de septiembre.
Aunque también incursionó en otros géneros, fue el cuento el que le significó ser distinguido con el máximo galardón de la literatura chilena.
A los 18 años publicó su primer libro, Cahuín. «Es el más completo escritor de cuentos que ha habido en la historia de Chile, tanto en el número de cuentos publicados como por su calidad literaria», sostuvo el jurado que le entregó el Premio Nacional de Literatura.
Al morir no alcanzó a concluir sus memorias que preparaba.
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sábado, septiembre 24, 2011
Festival Internacional Chihuahua / Ciudad Juárez: «Gianni Schicchi o la comicidad lograda», reseña
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Adriana Valdés en el papel de Lauretta y Ángel Ruz en el papel de Rinuccio. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 23 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- Una impecable escenificación logró esta noche la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (OSUACJ), con la dirección artística del maestro Carlos García Ruiz, en el montaje de Gianni Schicchi, ópera cómica en un acto de Giacomo Puccini, en el Teatro Rascón Banda del Centro Cultural Paso del Norte, dentro del programa de eventos del séptimo Festival Internacional Chihuahua.
Los oficios de Óscar Tapia, como director de escena, se dejaron sentir una vez más en la ópera juarense universitaria y el espectáculo, además del profesionalismo musical, logró una muy afortunada teatralidad, donde los cantantes aparte de sus dotes como intérpetes se convirtieron en actores de primera, en particular el barítono Juan Orozco en el papel protagónico de Gianni Schicchi, que apoyado por su corpulencia y sus capacidades histriónicas, consiguió una soberbia representación que marcó el paso de la puesta.
En especial resaltamos la escena donde Schicchi les recuerda a los parientes de Buso Donati la pena (mutilación de una mano y expulsión de Florencia) a quienes dan falso testimonio de una herencia, donde el manejo del lenguaje teatral de Tapia se expresó magistralmente.
También brillaron por su participación la bella soprano Adriana Valdés en el papel de Lauretta, quien tras cantar la aria O mio babbino caro la obra fue interrumpida por aplausos del público; y el barítono Jorge Eleazar Álvarez, que tuvo una muy afortunada actuación como el médico Spinelloccio, además que también hizo el papel del Notario.
Tanto la escenografía, muy práctica, simulando altas paredes, casi torres; el vestuario; y el maquillaje con el fino detalle de la gran nariz de Schicchi cumplieron muy bien su cometido.
La orquesta se comportó con la calidad que nos tiene acostumbrados, con la dirección de García Ruiz tan espléndida y compenetrada que éste practicamente estaba conduciendo y cantando a la vez.
Para finalizar la sorpresa escénica, que es típica en Tapia, consisitió en que desde las gradas superiores fueron lanzados globos y pelotas.
El argumento
La acción transcurre en Florencia, en el año de 1299. El acaudalado Buoso Donati ha muerto en su cama. Su familia le llora hipócritamente, pero recuerdan el rumor de que Donati habría dejado todo su dinero a un monasterio local en su testamento, así que lo buscan por la casa desesperados. Rinuccio, un sobrino lejano de Donati, lo encuentra y condiciona su entrega a su tía Zita a que ésta y la familia acepten su matrimonio con Lauretta, la hija de Gianni Schicchi, un campesino con fama de astuto. La familia acepta y Rinuccio manda a llamar a su prometida y a su progenitor.
Entonces, con grandes lamentaciones, se dan cuenta que el rumor es cierto y que la fortuna de Donati pasará al convento. En ese momento llegan Schicchi y Lauretta que son recibidos de mala gana, Rinuccio ha insistido que el único que puede resolver el problema, por su experiencia, es precisamente Schicchi, pero éste se niega por el maltrato recibido y por el tipo de personas que son los familiares de Donati, aunque Lauretta se lo suplica y lo convence. Éste accede y la aleja para llevar a cabo su plan: suplantará a Donati en su lecho de muerte.
En el momento de exponer el plan llega el médico y logra engañarlo. Confiados llaman al notario y mientras cada famliar pide su parte, pero no se ponen de acuerdo en cuanto a lo más valioso que son la mula, la casa y los molinos; así que deciden que sea el mismo Schicchi quien decida y cada uno trata de sobornarlo. Antes que arribe el notario les recuerda el castigo por falsear el testimonio de una herencia. Cuando llega el notario el falso Donati cede a cada familiar lo pedido, pero de deja a su querídisimo amigo Gianni Schicchi la mula, la casa y los molinos, ante la impotencia de los familiares de Donati.
Schicchi los corre de su casa y, dirigiéndose al público, señala a la pareja que ahora podrá casarse y dice que ya que Dante, por esta razón lo ha enviado al Infierno, pide de la audiencia la indulgencia de su aplauso.
La obra
Esta obra, precedida por Il tabarro y Suor Angelica, es la última de las óperas que conforman El tríptico (Il Trittico). Cada una de ellas es una alegoría de una de las partes de la Divina Comedia, de Dante Alighieri (1265-1321). A Gianni Schicchi le corresponde El Cielo. El Tríptico se estrenó junto a las otras dos, en la ópera del Metropolitan Opera House de Nueva York el 14 de diciembre de 1918.
Fue la primera ópera cómica de Giacomo Puccini (1858-1924) y la última que escribiera, el libreto es de Giovaccino Forzano (1884-1970), basado en los cantos XXV y XXX de El Infierno y en un libro anónimo titulado Comentario de la Divina Comedia (1866); aunque la historia de amor entre Rinuccio y Lauretta es inventada, Gianni Schicchi fue un personaje histórico que vivió en el el siglo XIII en Florencia, con las características descritas en la obra.
Elenco
Gianni Schicchi: Juan Orozco; Rinuccio: Ángel Ruz; Lauretta: Adriana Valdés; Zita: Belem Rodríguez; Simone: Daniel Cervantes; Beto: Luis Rodarte; Gherardo: Juan Carlos Morales; Nella: Marco: MarioTarín; Ciesca: Ángela Moreno; Notario / Spinelloccio: Jorge Eleazar Álvarez; Guccio: Pedro Martínez; Pinelino: Jaime Villarreal; y Gherardino: Paola Muruato.
Créditos técnicos
Pianistas repasadores: Eric Fernández y Jorge Vargas; realización del vestuario: Esther Orozco; Supertitulaje: Juan Velázquez y Adrián Romero; Concepto de maquillaje: Penélope Rivera; Producción: Universidad Autónoma de Ciudad Juárez; Productor Ejecutivo: Erick Roberto Pérez; Dirección de Escena: Óscar Tapia; Director Concertador: Carlos García Ruiz.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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Adriana Valdés en el papel de Lauretta y Ángel Ruz en el papel de Rinuccio. (Foto: Gabriel Cardona / FICh)
C iudad Juárez, Chihuahua. 23 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- Una impecable escenificación logró esta noche la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (OSUACJ), con la dirección artística del maestro Carlos García Ruiz, en el montaje de Gianni Schicchi, ópera cómica en un acto de Giacomo Puccini, en el Teatro Rascón Banda del Centro Cultural Paso del Norte, dentro del programa de eventos del séptimo Festival Internacional Chihuahua.
Los oficios de Óscar Tapia, como director de escena, se dejaron sentir una vez más en la ópera juarense universitaria y el espectáculo, además del profesionalismo musical, logró una muy afortunada teatralidad, donde los cantantes aparte de sus dotes como intérpetes se convirtieron en actores de primera, en particular el barítono Juan Orozco en el papel protagónico de Gianni Schicchi, que apoyado por su corpulencia y sus capacidades histriónicas, consiguió una soberbia representación que marcó el paso de la puesta.
En especial resaltamos la escena donde Schicchi les recuerda a los parientes de Buso Donati la pena (mutilación de una mano y expulsión de Florencia) a quienes dan falso testimonio de una herencia, donde el manejo del lenguaje teatral de Tapia se expresó magistralmente.
También brillaron por su participación la bella soprano Adriana Valdés en el papel de Lauretta, quien tras cantar la aria O mio babbino caro la obra fue interrumpida por aplausos del público; y el barítono Jorge Eleazar Álvarez, que tuvo una muy afortunada actuación como el médico Spinelloccio, además que también hizo el papel del Notario.
Tanto la escenografía, muy práctica, simulando altas paredes, casi torres; el vestuario; y el maquillaje con el fino detalle de la gran nariz de Schicchi cumplieron muy bien su cometido.
La orquesta se comportó con la calidad que nos tiene acostumbrados, con la dirección de García Ruiz tan espléndida y compenetrada que éste practicamente estaba conduciendo y cantando a la vez.
Para finalizar la sorpresa escénica, que es típica en Tapia, consisitió en que desde las gradas superiores fueron lanzados globos y pelotas.
El argumento
La acción transcurre en Florencia, en el año de 1299. El acaudalado Buoso Donati ha muerto en su cama. Su familia le llora hipócritamente, pero recuerdan el rumor de que Donati habría dejado todo su dinero a un monasterio local en su testamento, así que lo buscan por la casa desesperados. Rinuccio, un sobrino lejano de Donati, lo encuentra y condiciona su entrega a su tía Zita a que ésta y la familia acepten su matrimonio con Lauretta, la hija de Gianni Schicchi, un campesino con fama de astuto. La familia acepta y Rinuccio manda a llamar a su prometida y a su progenitor.
Entonces, con grandes lamentaciones, se dan cuenta que el rumor es cierto y que la fortuna de Donati pasará al convento. En ese momento llegan Schicchi y Lauretta que son recibidos de mala gana, Rinuccio ha insistido que el único que puede resolver el problema, por su experiencia, es precisamente Schicchi, pero éste se niega por el maltrato recibido y por el tipo de personas que son los familiares de Donati, aunque Lauretta se lo suplica y lo convence. Éste accede y la aleja para llevar a cabo su plan: suplantará a Donati en su lecho de muerte.
En el momento de exponer el plan llega el médico y logra engañarlo. Confiados llaman al notario y mientras cada famliar pide su parte, pero no se ponen de acuerdo en cuanto a lo más valioso que son la mula, la casa y los molinos; así que deciden que sea el mismo Schicchi quien decida y cada uno trata de sobornarlo. Antes que arribe el notario les recuerda el castigo por falsear el testimonio de una herencia. Cuando llega el notario el falso Donati cede a cada familiar lo pedido, pero de deja a su querídisimo amigo Gianni Schicchi la mula, la casa y los molinos, ante la impotencia de los familiares de Donati.
Schicchi los corre de su casa y, dirigiéndose al público, señala a la pareja que ahora podrá casarse y dice que ya que Dante, por esta razón lo ha enviado al Infierno, pide de la audiencia la indulgencia de su aplauso.
La obra
Esta obra, precedida por Il tabarro y Suor Angelica, es la última de las óperas que conforman El tríptico (Il Trittico). Cada una de ellas es una alegoría de una de las partes de la Divina Comedia, de Dante Alighieri (1265-1321). A Gianni Schicchi le corresponde El Cielo. El Tríptico se estrenó junto a las otras dos, en la ópera del Metropolitan Opera House de Nueva York el 14 de diciembre de 1918.
Fue la primera ópera cómica de Giacomo Puccini (1858-1924) y la última que escribiera, el libreto es de Giovaccino Forzano (1884-1970), basado en los cantos XXV y XXX de El Infierno y en un libro anónimo titulado Comentario de la Divina Comedia (1866); aunque la historia de amor entre Rinuccio y Lauretta es inventada, Gianni Schicchi fue un personaje histórico que vivió en el el siglo XIII en Florencia, con las características descritas en la obra.
Elenco
Gianni Schicchi: Juan Orozco; Rinuccio: Ángel Ruz; Lauretta: Adriana Valdés; Zita: Belem Rodríguez; Simone: Daniel Cervantes; Beto: Luis Rodarte; Gherardo: Juan Carlos Morales; Nella: Marco: MarioTarín; Ciesca: Ángela Moreno; Notario / Spinelloccio: Jorge Eleazar Álvarez; Guccio: Pedro Martínez; Pinelino: Jaime Villarreal; y Gherardino: Paola Muruato.
Créditos técnicos
Pianistas repasadores: Eric Fernández y Jorge Vargas; realización del vestuario: Esther Orozco; Supertitulaje: Juan Velázquez y Adrián Romero; Concepto de maquillaje: Penélope Rivera; Producción: Universidad Autónoma de Ciudad Juárez; Productor Ejecutivo: Erick Roberto Pérez; Dirección de Escena: Óscar Tapia; Director Concertador: Carlos García Ruiz.
Mayor información: Festival Internacional Chihuahua
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viernes, septiembre 23, 2011
Festival Internacional Chihuhaua / Ciudad Juárez: Cambian lugar del concierto de Caifanes
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De izq. a der.: Arq. Fermín Gutiérrez, Lic. Javier González Mocken y el Lic. Miguel Ángel Mendoza. (Foto: Gabriel Cardona / Ichicult)
C iudad Juárez, Chihuahua. 23 de septiembre de 2011. (RanchoNEWS).- Por cuestiones de mayor comodidad y seguridad para el público, así como por asuntos de logística, organizadores del Séptimo Festival Internacional Chihuahua (FICH) anunciaron que el concierto del grupo musical Caifanes, programado inicialmente en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte, será definitivamente el lunes 26 de septiembre en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez, informó el Instituto Chihuahuense de la Cultura (Ichicult) en un comunicado de prensa.
Mientras que el concierto de Enanitos Verdes que extraoficialmente se había manejado que también tendría lugar en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez, se conformó de manera oficial que no sufre ningún cambio y será en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte.
Se indicó que el plan inicial era que Enanitos Verdes también se presentara en la explanada del Estadio Benito Juárez, pero por cuestiones de tiempo ya no pudo cambiar el soporte escénico por lo que el concierto será en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte.
Lo anterior fue dado a conocer en conferencia de prensa efectuada este mediodía en el teatro experimental Octavio Trías, la cual fue presidida por el Lic. Javier González Mocken, Subsecretario de Educación, Cultura y Deporte Zona Norte; Arq. Fermín Gutiérrez, titular del Ichicult; y el Lic. Miguel Ángel Mendoza, coordinador de Ichicult en Ciudad Juárez.
El coordinador de Ichicult dijo que en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez se tiene una capacidad de 30 mil a 40 mil personas, en tanto que en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte el cupo está entre 15 mil a 17 mil; pero para el domingo 25 de septiembre cuando se presente el concierto de Enanitos Verdes, se proyecta cerrar la calle Lara Leos para contar con 5 mil espacios más.
En relación a las áreas de estacionamientos para el público que acudirá al concierto de Caifanes, mismo que será para clausurar el Festival Internacional Chihuahua en esta localidad, manifestó que se utilizarán los terrenos conocidos como los «hoyos» laterales de la avenida Heroico Colegio Militar, concretamente a la altura de las calles 5 de Mayo y Costa Rica, así como las áreas del Parque Chamizal.
En materia de seguridad para los dos eventos musicales citados, el funcionario estatal señaló que se contará con 250 a 300 elementos policiacos para cada uno.
Mencionó que en el operativo de seguridad habrá filtros para evitar que la gente acuda con bebidas alcohólicas, pues solamente se permitirá la entrada de agua en envases de plástico, con la finalidad de tener un saldo blanco al término del evento.
Para el concierto de Caifanes, se contempla brindar acreditaciones especiales para los representantes de los medios de difusión, medida que se hará saber con toda oportunidad, dijo Mendoza.
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De izq. a der.: Arq. Fermín Gutiérrez, Lic. Javier González Mocken y el Lic. Miguel Ángel Mendoza. (Foto: Gabriel Cardona / Ichicult)
C iudad Juárez, Chihuahua. 23 de septiembre de 2011. (RanchoNEWS).- Por cuestiones de mayor comodidad y seguridad para el público, así como por asuntos de logística, organizadores del Séptimo Festival Internacional Chihuahua (FICH) anunciaron que el concierto del grupo musical Caifanes, programado inicialmente en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte, será definitivamente el lunes 26 de septiembre en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez, informó el Instituto Chihuahuense de la Cultura (Ichicult) en un comunicado de prensa.
Mientras que el concierto de Enanitos Verdes que extraoficialmente se había manejado que también tendría lugar en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez, se conformó de manera oficial que no sufre ningún cambio y será en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte.
Se indicó que el plan inicial era que Enanitos Verdes también se presentara en la explanada del Estadio Benito Juárez, pero por cuestiones de tiempo ya no pudo cambiar el soporte escénico por lo que el concierto será en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte.
Lo anterior fue dado a conocer en conferencia de prensa efectuada este mediodía en el teatro experimental Octavio Trías, la cual fue presidida por el Lic. Javier González Mocken, Subsecretario de Educación, Cultura y Deporte Zona Norte; Arq. Fermín Gutiérrez, titular del Ichicult; y el Lic. Miguel Ángel Mendoza, coordinador de Ichicult en Ciudad Juárez.
El coordinador de Ichicult dijo que en el estacionamiento del Estadio Benito Juárez se tiene una capacidad de 30 mil a 40 mil personas, en tanto que en la explanada del Centro Cultural Paso del Norte el cupo está entre 15 mil a 17 mil; pero para el domingo 25 de septiembre cuando se presente el concierto de Enanitos Verdes, se proyecta cerrar la calle Lara Leos para contar con 5 mil espacios más.
En relación a las áreas de estacionamientos para el público que acudirá al concierto de Caifanes, mismo que será para clausurar el Festival Internacional Chihuahua en esta localidad, manifestó que se utilizarán los terrenos conocidos como los «hoyos» laterales de la avenida Heroico Colegio Militar, concretamente a la altura de las calles 5 de Mayo y Costa Rica, así como las áreas del Parque Chamizal.
En materia de seguridad para los dos eventos musicales citados, el funcionario estatal señaló que se contará con 250 a 300 elementos policiacos para cada uno.
Mencionó que en el operativo de seguridad habrá filtros para evitar que la gente acuda con bebidas alcohólicas, pues solamente se permitirá la entrada de agua en envases de plástico, con la finalidad de tener un saldo blanco al término del evento.
Para el concierto de Caifanes, se contempla brindar acreditaciones especiales para los representantes de los medios de difusión, medida que se hará saber con toda oportunidad, dijo Mendoza.
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jueves, septiembre 22, 2011
Noticias / México: Otorgan a Vicente Leñero y a José Agustín Medalla de Oro de Bellas Artes
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De izq. a der.: los escritores Vicente Leñero y José Agustín en el momento de recibir el reconocimiento. (Foto: Roberto Armocida)
C iudad Juárez, Chihuahua. 21 de septiembre de 2011. (Porky Villalay / RanchoNEWS).- A todas luces merecido. Un acto celebratorio a dos de los escritores más versátiles del México, a partir de los años sesenta del siglo XX: Vicente Leñero y José Agustín. Ambos surgen de los medios de comunicación con sus muy particulares formas de expresar su talento creativo. De ahí que también llegaran a formalizar una relación profesional, maestro el uno, por madurar el otro. Relación que finalmente terminaría en una amistad desde que ambos, en esos años, trabajaron juntos en la revista Claudia, en la que también colaboró, allá en sus inicios, el periodista Ignacio Solares, actual director de la Revista de la Universidad de México.
Entrenado en las filas del periodismo Vicente Leñero se forjó en el mundo de la literatura, de tal manera que prodigiosamente desparramó con su escritura, a lo largo de los años –aunque afirma que escribía a máquina con dos dedos– tanta riqueza en su material narrativo, que pudo distinguirse por la frescura y lo objetivo de su prosa, que contaba los sucesos más sencillos con un dramatismo y una ironía, muy fuera de lo común. Con todo ese bagaje literario logró realizar reportajes, ensayos, artículos de fondo, análisis políticos, obras de teatro, libros, scripts para películas y novelas.
José, por su parte, redactó su primer libro a la retadora edad de los 19 años. Retadora porque en aquel entonces el despertar a una libertadora independencia juvenil para evadir los innumerables obstáculos que imponía la falsa doble moral de aquella sociedad, un tanto clerical, en la que prevalecía el criterio de que el joven aún no era apto para ejercer tareas de importancia. Con su primer novela, La Tumba, creó lo que en adelante se conocería como la literatura de «la onda», termino aplicado por la influencia «hippie» que empezaba a permear en aquella juventud que le dio vida a una renovación de moda, música, lenguaje, formas de expresión y del arte en todas sus manifestaciones. José trabajó también como copy writer, donde le conocimos, en Augusto Elías, una de las agencias de publicidad de más prestigio. Ahí tenía que contar en 20 segundos –que son 50 palabras– una breve historia, mencionar el nombre del producto tres veces y el slogan y describir la acción que ilustraría el comercial televiso.
De ahí prosiguió dedicado a la escritura, y también como su amigo Vicente, se adentró en los vericuetos de la filmación. Dirigío la película 5 de Fresa y Uno de Chocolate con la entonces considerada novia de México, la cantante Angélica Maria. También participó en el montaje de bailables el coreógrafo juarense Edmundo Mendoza.
Fue la noche de este miércoles 21 de septiembre, ante una nutrida concurrencia que hizo cola para entrar una hora y media antes del evento al Palacio de Bellas Artes, cuando la directora del Instituto Nacional de Bellas Artes, Teresa Vicencio, entregó a Vicente Leñero y a José Agustín la Medalla de Oro de Bellas Artes, con la cual se honra la carrera literaria de estos prestigiados y muy reconocidos autores.
El evento fue conducido por el experimentado autor y periodista chihuahuense Ignacio Solares (quien presentó este jueves su libro El Jefe Máximo, sobre el presidente Elías Calles, el Turco, en su etapa espiritista,en el Teatro Helénico), quien con un ágil sentido del humor y con la agudeza de la broma a lo largo de la presentación (en parte debido a las continuas fallas del sistema de audio) mantuvo al público siempre divertido y con la presteza mental de Leñero y José Agustín, quienes contaron anécdotas de sus carreras. El actor Jesús Ochoa, participó en el homenaje, al leer un monólogo del libro de Leñero, Los Albañiles y de José Agustin del libro De Perfil.
Disfrutable y placentera noche de homenaje con dos hombres de letras de una muy agradable sencillez. Simpáticos, con la alegría de sentirse honrados, aun cuando Leñero mencionó: «Cuando uno es viejo recibe los estímulos que no recibió cuando joven y necesitaba de esos estímulos». Antes de recibir sus medallas, Solares, en su última intervención de la noche, preguntó qué aconsejarían a un joven lector, y rápidamente José Agustín recomendó leer... a Leñero. Así ambos escritores sellaban su amistad ante un auditorio que siempre sonrió y disfrutó del homenaje que culminó con un vino de honor que compartieron con el público, que al final mantuvo a José Agustín en la tarea de firmar los múltiples libros que llevaron sus lectores.
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De izq. a der.: los escritores Vicente Leñero y José Agustín en el momento de recibir el reconocimiento. (Foto: Roberto Armocida)
C iudad Juárez, Chihuahua. 21 de septiembre de 2011. (Porky Villalay / RanchoNEWS).- A todas luces merecido. Un acto celebratorio a dos de los escritores más versátiles del México, a partir de los años sesenta del siglo XX: Vicente Leñero y José Agustín. Ambos surgen de los medios de comunicación con sus muy particulares formas de expresar su talento creativo. De ahí que también llegaran a formalizar una relación profesional, maestro el uno, por madurar el otro. Relación que finalmente terminaría en una amistad desde que ambos, en esos años, trabajaron juntos en la revista Claudia, en la que también colaboró, allá en sus inicios, el periodista Ignacio Solares, actual director de la Revista de la Universidad de México.
Entrenado en las filas del periodismo Vicente Leñero se forjó en el mundo de la literatura, de tal manera que prodigiosamente desparramó con su escritura, a lo largo de los años –aunque afirma que escribía a máquina con dos dedos– tanta riqueza en su material narrativo, que pudo distinguirse por la frescura y lo objetivo de su prosa, que contaba los sucesos más sencillos con un dramatismo y una ironía, muy fuera de lo común. Con todo ese bagaje literario logró realizar reportajes, ensayos, artículos de fondo, análisis políticos, obras de teatro, libros, scripts para películas y novelas.
José, por su parte, redactó su primer libro a la retadora edad de los 19 años. Retadora porque en aquel entonces el despertar a una libertadora independencia juvenil para evadir los innumerables obstáculos que imponía la falsa doble moral de aquella sociedad, un tanto clerical, en la que prevalecía el criterio de que el joven aún no era apto para ejercer tareas de importancia. Con su primer novela, La Tumba, creó lo que en adelante se conocería como la literatura de «la onda», termino aplicado por la influencia «hippie» que empezaba a permear en aquella juventud que le dio vida a una renovación de moda, música, lenguaje, formas de expresión y del arte en todas sus manifestaciones. José trabajó también como copy writer, donde le conocimos, en Augusto Elías, una de las agencias de publicidad de más prestigio. Ahí tenía que contar en 20 segundos –que son 50 palabras– una breve historia, mencionar el nombre del producto tres veces y el slogan y describir la acción que ilustraría el comercial televiso.
De ahí prosiguió dedicado a la escritura, y también como su amigo Vicente, se adentró en los vericuetos de la filmación. Dirigío la película 5 de Fresa y Uno de Chocolate con la entonces considerada novia de México, la cantante Angélica Maria. También participó en el montaje de bailables el coreógrafo juarense Edmundo Mendoza.
Fue la noche de este miércoles 21 de septiembre, ante una nutrida concurrencia que hizo cola para entrar una hora y media antes del evento al Palacio de Bellas Artes, cuando la directora del Instituto Nacional de Bellas Artes, Teresa Vicencio, entregó a Vicente Leñero y a José Agustín la Medalla de Oro de Bellas Artes, con la cual se honra la carrera literaria de estos prestigiados y muy reconocidos autores.
El evento fue conducido por el experimentado autor y periodista chihuahuense Ignacio Solares (quien presentó este jueves su libro El Jefe Máximo, sobre el presidente Elías Calles, el Turco, en su etapa espiritista,en el Teatro Helénico), quien con un ágil sentido del humor y con la agudeza de la broma a lo largo de la presentación (en parte debido a las continuas fallas del sistema de audio) mantuvo al público siempre divertido y con la presteza mental de Leñero y José Agustín, quienes contaron anécdotas de sus carreras. El actor Jesús Ochoa, participó en el homenaje, al leer un monólogo del libro de Leñero, Los Albañiles y de José Agustin del libro De Perfil.
Disfrutable y placentera noche de homenaje con dos hombres de letras de una muy agradable sencillez. Simpáticos, con la alegría de sentirse honrados, aun cuando Leñero mencionó: «Cuando uno es viejo recibe los estímulos que no recibió cuando joven y necesitaba de esos estímulos». Antes de recibir sus medallas, Solares, en su última intervención de la noche, preguntó qué aconsejarían a un joven lector, y rápidamente José Agustín recomendó leer... a Leñero. Así ambos escritores sellaban su amistad ante un auditorio que siempre sonrió y disfrutó del homenaje que culminó con un vino de honor que compartieron con el público, que al final mantuvo a José Agustín en la tarea de firmar los múltiples libros que llevaron sus lectores.
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Arquitectura / México: Entrevista a Pedro Ramírez Vázquez
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El gran señor de la arquitectura mexicana. (Foto: Excélsior )
C iudad Juárez, Chihuahua. 20 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- Apasionado del futbol, «pero ahora sólo como espectador»; puma de hueso colorado, «aunque el equipo a veces acierte y a veces no»; al arquitecto Pedro Ramírez Vázquez le gusta trabajar con la luz, tanto transformando espacios físicos para que cumplan «con una función de servicio», como esculpiendo el cristal de plomo para dar vida a pequeños universos. Virginia Bautista Excélsior:
En su casa de Jardines del Pedregal, donde tiene sus oficinas en un área contigua, el proyectista de 92 años revisa sus casi siete décadas de trayectoria, que comenzó en 1944 con la construcción de escuelas rurales a lo largo de todo el país, la cual será reconocida el próximo 1 de octubre en el Palacio de Bellas Artes.
«Los propósitos siguen siendo los mismos: trabajar con eficacia y con verdad. Si se utilizan bien los materiales de construcción, si se expresa su uso, es una manera de mostrar a México ante otras culturas», afirma en entrevista con Excélsior.
El autor de edificios emblemáticos de la arquitectura mexicana del siglo XX como el Museo Nacional de Antropología, el Estadio Azteca y la nueva Basílica de Guadalupe, descarta que haya formado un estilo propio. «Nunca he pretendido hacer arquitectura de autor. Esta disciplina tiene que cumplir con una función de servicio para quien ocupará esos espacios».
Egresado y catedrático de la UNAM, en cuyo campus central diseñó en 1952 la actual Facultad de Medicina, quien ha proyectado lo mismo escuelas y museos que pabellones internacionales y mercados no siente preferencia por ninguna de sus obras y deja la nostalgia para alguien que ya no ejerza su oficio.
«Sigo diseñando, construyendo. Estoy vivo y activo», señala el autor de inmuebles recientes y otros en proceso de edificación como el Auditorio Siglo XXI en Puebla, los centros de convenciones de Chetumal y Mérida, el Museo de los Presidentes en Coahuila y la nueva sede de la Universidad Autónoma Metropolitana en la delegación Cuajimalpa.
Este defeño nacido el 16 de abril de 1919 no reconoce haber tenido que vencer grandes retos o enfrentar dificultades serias en la construcción de sus obras. Ni siquiera cuando diseñó la imagen de los Juegos Olímpicos que se realizaron en la capital mexicana en 1968, en medio de la lucha estudiantil; o cuando trasladó del pueblo de Coatlinchán al Museo de Antropología al monolito del dios Tláloc, de 125 toneladas, que hoy flanquea la entrada al recinto declarado Monumento Artístico.
Respecto a esa juventud con la que trabajó y vio luchar por sus libertades hace 43 años señala que fue una generación que «cumplió cabalmente, con gran talento, con gran creatividad», con los aspectos que se involucraban con México.
«Llevó a cabo esa doble función: mostrar su inquietud social, natural en la juventud, e incrementar el prestigio del país haciendo una olimpiada como no se había hecho desde la época helénica», recuerda.
Ahora, el Premio Nacional de Bellas Artes 1973 pide a las nuevas generaciones que muestren su potencial. «La juventud es una fuerza viva de México y todos tenemos una gran esperanza en ella».
Un optimista eterno
El autor de las torres de Tlatelolco y el edificio de Mexicana de Aviación, del Palacio Legislativo de San Lázaro y de los museos de Arte Moderno, del Templo Mayor y Amparo, en Puebla, ve al país con optimismo.
«México ha tenido problemas siempre y los ha sabido solventar. Hemos salido de muchas crisis. Cada época tiene su propia terminología para expresarlas, pero hemos sabido resolverlas y seguir adelante», agrega.
Quien fue secretario de Asentamientos Humanos y Obras Públicas de 1976 a 1982 confiesa que le hubiera gustado que el monumento conmemorativo del Bicentenario de la Independencia mexicana fuera suyo.
«Participé en el concurso y, como todo en la vida, a veces se gana y a veces se pierde. No califico al jurado, pero, quienes lo juzgaron, le dieron el tercer lugar a mi propuesta. Pero eso ni nos desilusiona, ni nos frustra. Se trabaja lo mejor que uno puede. A veces se acierta, otras no», añade.
A la pregunta de cómo ve la ciudad donde creció y ha vivido, la manera en que se ha transformado su fisionomía, responde con humor: «Hay muchas cosas que me gustan, y hay muchas que me disgustan. A lo mejor es porque no las hice yo».
De envidiable memoria, el autor de los pabellones de México en las exposiciones mundiales de Bruselas (1958), Seattle (1962), Nueva York (1964) y Sevilla (1992), y de edificios en el extranjero como los museos de las Civilizaciones Negras, en Senegal, y el de Nubia, en Egipto, no extraña el ajetreo que caracterizó la mayor parte de su vida.
Ahora, entre la tranquilidad y el silencio que da vivir rodeado de piedra volcánica, Ramírez Vázquez intercala el diseño arquitectónico con la escultura de rostros de mujer y piezas que evocan a la Piedra de Sol o Calendario Azteca.
«Prefiero el cristal de plomo, que da la transparencia y la calidad que no tiene el vidrio, que es más bien frío. El cristal da más oportunidades de crear nuevas formas. Es casi como trabajar con la luz, porque si uno opaca la pieza tiene otro aspecto. El cristal con tantas facetas es más rico para la expresión», detalla.
Este mundo íntimo y de imaginación no impide al actual miembro del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República estar atento a la realidad política. «Vamos a ver cómo pinta con las elecciones. Con las propuestas y programas que vayan a desarrollar los candidatos posibles. Ya tengo mi voto definido, pero puede cambiar si las propuestas no me gustan o no coinciden con mi forma de pensar», advierte.
A pesar de moverse en silla de ruedas por su oficina, cuyos muros están tapizados con fotografías de sus obras más destacadas, el arquitecto no ha perdido la fortaleza y la agilidad.
Su obra por el mundo
Algunos de los proyectos más destacados de Ramírez Vázquez:
Estadio Azteca
Nueva Basílica de Guadalupe
Torre de Tlatelolco
Palacio Legislativo de San Lázaro
Torre Mexicana de Aviación
Facultad de Medicina de la UNAM
Museo Nacional de Antropología
Museo Arte Moderno
Museo del Templo Mayor
Museo Amparo
Pabellón de México en la exposición mundial de Bruselas
Pabellón de México en la exposición mundial de Seattle
Pabellón de México en la exposición mundial de Nueva York
Pabellón de México en la exposición mundial de Sevilla
Museo de las Culturas Negras de Senegal
Casa Presidencial de Costa Rica
Mayor información: Pedro Ramírez Vázquez
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El gran señor de la arquitectura mexicana. (Foto: Excélsior )
C iudad Juárez, Chihuahua. 20 de septiembre de 2011. (RMV / RanchoNEWS).- Apasionado del futbol, «pero ahora sólo como espectador»; puma de hueso colorado, «aunque el equipo a veces acierte y a veces no»; al arquitecto Pedro Ramírez Vázquez le gusta trabajar con la luz, tanto transformando espacios físicos para que cumplan «con una función de servicio», como esculpiendo el cristal de plomo para dar vida a pequeños universos. Virginia Bautista Excélsior:
En su casa de Jardines del Pedregal, donde tiene sus oficinas en un área contigua, el proyectista de 92 años revisa sus casi siete décadas de trayectoria, que comenzó en 1944 con la construcción de escuelas rurales a lo largo de todo el país, la cual será reconocida el próximo 1 de octubre en el Palacio de Bellas Artes.
«Los propósitos siguen siendo los mismos: trabajar con eficacia y con verdad. Si se utilizan bien los materiales de construcción, si se expresa su uso, es una manera de mostrar a México ante otras culturas», afirma en entrevista con Excélsior.
El autor de edificios emblemáticos de la arquitectura mexicana del siglo XX como el Museo Nacional de Antropología, el Estadio Azteca y la nueva Basílica de Guadalupe, descarta que haya formado un estilo propio. «Nunca he pretendido hacer arquitectura de autor. Esta disciplina tiene que cumplir con una función de servicio para quien ocupará esos espacios».
Egresado y catedrático de la UNAM, en cuyo campus central diseñó en 1952 la actual Facultad de Medicina, quien ha proyectado lo mismo escuelas y museos que pabellones internacionales y mercados no siente preferencia por ninguna de sus obras y deja la nostalgia para alguien que ya no ejerza su oficio.
«Sigo diseñando, construyendo. Estoy vivo y activo», señala el autor de inmuebles recientes y otros en proceso de edificación como el Auditorio Siglo XXI en Puebla, los centros de convenciones de Chetumal y Mérida, el Museo de los Presidentes en Coahuila y la nueva sede de la Universidad Autónoma Metropolitana en la delegación Cuajimalpa.
Este defeño nacido el 16 de abril de 1919 no reconoce haber tenido que vencer grandes retos o enfrentar dificultades serias en la construcción de sus obras. Ni siquiera cuando diseñó la imagen de los Juegos Olímpicos que se realizaron en la capital mexicana en 1968, en medio de la lucha estudiantil; o cuando trasladó del pueblo de Coatlinchán al Museo de Antropología al monolito del dios Tláloc, de 125 toneladas, que hoy flanquea la entrada al recinto declarado Monumento Artístico.
Respecto a esa juventud con la que trabajó y vio luchar por sus libertades hace 43 años señala que fue una generación que «cumplió cabalmente, con gran talento, con gran creatividad», con los aspectos que se involucraban con México.
«Llevó a cabo esa doble función: mostrar su inquietud social, natural en la juventud, e incrementar el prestigio del país haciendo una olimpiada como no se había hecho desde la época helénica», recuerda.
Ahora, el Premio Nacional de Bellas Artes 1973 pide a las nuevas generaciones que muestren su potencial. «La juventud es una fuerza viva de México y todos tenemos una gran esperanza en ella».
Un optimista eterno
El autor de las torres de Tlatelolco y el edificio de Mexicana de Aviación, del Palacio Legislativo de San Lázaro y de los museos de Arte Moderno, del Templo Mayor y Amparo, en Puebla, ve al país con optimismo.
«México ha tenido problemas siempre y los ha sabido solventar. Hemos salido de muchas crisis. Cada época tiene su propia terminología para expresarlas, pero hemos sabido resolverlas y seguir adelante», agrega.
Quien fue secretario de Asentamientos Humanos y Obras Públicas de 1976 a 1982 confiesa que le hubiera gustado que el monumento conmemorativo del Bicentenario de la Independencia mexicana fuera suyo.
«Participé en el concurso y, como todo en la vida, a veces se gana y a veces se pierde. No califico al jurado, pero, quienes lo juzgaron, le dieron el tercer lugar a mi propuesta. Pero eso ni nos desilusiona, ni nos frustra. Se trabaja lo mejor que uno puede. A veces se acierta, otras no», añade.
A la pregunta de cómo ve la ciudad donde creció y ha vivido, la manera en que se ha transformado su fisionomía, responde con humor: «Hay muchas cosas que me gustan, y hay muchas que me disgustan. A lo mejor es porque no las hice yo».
De envidiable memoria, el autor de los pabellones de México en las exposiciones mundiales de Bruselas (1958), Seattle (1962), Nueva York (1964) y Sevilla (1992), y de edificios en el extranjero como los museos de las Civilizaciones Negras, en Senegal, y el de Nubia, en Egipto, no extraña el ajetreo que caracterizó la mayor parte de su vida.
Ahora, entre la tranquilidad y el silencio que da vivir rodeado de piedra volcánica, Ramírez Vázquez intercala el diseño arquitectónico con la escultura de rostros de mujer y piezas que evocan a la Piedra de Sol o Calendario Azteca.
«Prefiero el cristal de plomo, que da la transparencia y la calidad que no tiene el vidrio, que es más bien frío. El cristal da más oportunidades de crear nuevas formas. Es casi como trabajar con la luz, porque si uno opaca la pieza tiene otro aspecto. El cristal con tantas facetas es más rico para la expresión», detalla.
Este mundo íntimo y de imaginación no impide al actual miembro del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República estar atento a la realidad política. «Vamos a ver cómo pinta con las elecciones. Con las propuestas y programas que vayan a desarrollar los candidatos posibles. Ya tengo mi voto definido, pero puede cambiar si las propuestas no me gustan o no coinciden con mi forma de pensar», advierte.
A pesar de moverse en silla de ruedas por su oficina, cuyos muros están tapizados con fotografías de sus obras más destacadas, el arquitecto no ha perdido la fortaleza y la agilidad.
Su obra por el mundo
Algunos de los proyectos más destacados de Ramírez Vázquez:
Estadio Azteca
Nueva Basílica de Guadalupe
Torre de Tlatelolco
Palacio Legislativo de San Lázaro
Torre Mexicana de Aviación
Facultad de Medicina de la UNAM
Museo Nacional de Antropología
Museo Arte Moderno
Museo del Templo Mayor
Museo Amparo
Pabellón de México en la exposición mundial de Bruselas
Pabellón de México en la exposición mundial de Seattle
Pabellón de México en la exposición mundial de Nueva York
Pabellón de México en la exposición mundial de Sevilla
Museo de las Culturas Negras de Senegal
Casa Presidencial de Costa Rica
Mayor información: Pedro Ramírez Vázquez
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