martes, septiembre 30, 2014

Galería / Brassai (Gyula Halasz)

.


Picasso Posing as the Artist with Jean Marais as His Model 
1944 


  REGRESAR A LA REVISTA

Obituario / Luis Nishizawa

.
La obra del artista mexicano puede apreciarse en espacios como el CCU, Museo de Arte Moderno, Museo Carrillo Gil, entre otros. (Foto: Archivo)

C iudad Juárez, Chihuahua. 29 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS).- Referir a la obra de Luis Nishizawa (1918-2014) es trazar un recorrido por distintas técnicas de la pintura; desde el dibujo y el grabado, el óleo y el fresco, hasta la cerámica y el temple en las que están contenidos por igual costumbres de la herencia cultural mexicana que la experimentación moderna del arte. Una nota de Sonia Ávila para Excélsior:

Fue, pues, un artesano de las técnicas y un alquimista de los materiales pictóricos. Por ello, su muerte, ocurrida ayer por la mañana a los 96 años de edad, representa la pérdida de uno de los pintores mexicanos más prolíficos no sólo por su producción, sino por su influencia como docente de varias generaciones, en las que intervino desde distintos aspectos.

«Yo lo admiraba mucho porque él hacía cosas que yo no me atrevía. Como era el mayor de la generación, era un hermano mayor al que podíamos consultarle cuando teníamos algún problema de cómo preparar un barniz o cosas», recordó Manuel Felguérez sobre Nishizawa, con quien compartió el aula de la Academia de Artes como alumno, y después la de la Academia San Carlos como maestro.

«Era muy admirado y muy útil para todas las generaciones, porque era el gran maestro; sabía todo y todo lo compartía», añadió el escultor y pintor.

En ello coincidieron la crítica de arte Teresa del Conde, los artistas Gabriel Macotela y Arnaldo Coen, el coleccionista Andrés Blaisten y la especialista en muralismo mexicano Guillermina Guadarrama, quienes –en entrevista por separado– destacaron las facetas del artista fallecido por causas naturales. La mañana de hoy será velado en la funeraría Gayosso, de Félix Cuevas.

De su producción pictórica, caracterizada por la constante experimentación, Cohen y Blaisten refirieron que es el paisaje su género por excelencia al plasmar de manera simultánea una atmósfera típica mexicana con elementos de la técnica japonesa, que a la mirada del espectador se presenta como una búsqueda de lenguajes y procesos nuevos.

«Fue un artista que manejó dos mundos; uno tradicional, en el sentido de ser un gran paisajista y manejar una atmósfera que supo adaptar muy bien esa frescura de la acuarela japonesa y aplicarla a un paisaje de clara identidad mexicana; al mismo tiempo experimentó en el uso de nuevos materiales, en nuevas formas de expresarse y combinó lo que era las texturas», destalló Coen al recordar al Premio Nacional de Ciencias y Artes 1996 como un «maestro generoso».

Así, las pinturas del también galardonado con la Medalla Bellas Artes 2013 son un juego entre la abstracción y lo figurativo, entre elementos orientales y mexicanos, entre materias primas tradicionales y experimentales. «Dos mundos opuestos que se complementan en una sola obra».

Piezas que consiguió en cierta medida por su condición de alquimista de materiales para pintar, pues pronto dejó el óleo y acrílico para hurgar en barnices, ceras, resinas e incluso la yema de huevo con agua.

«Formó a mucha gente con respecto a técnica de materiales; es decir, lo que es, propiamente hablando, en la cocina pictórica, creo que es de sus principales aportes dentro del campo de la docencia», resaltó Del Conde. «Su pintura no podría describirse en breve porque tiene muchos vaivenes, muchos caminos», añadió.

En este sentido, para la historiadora de arte Nishizawa –alumno de José Chávez Morado y Alfredo Zalce– debe entenderse como uno de los maestros por excelencia, tarea a la que dedicó más de cuatro décadas en la entonces Escuela Nacional de Artes Plásticas de la UNAM, y después en su Taller-Museo Luis Nishizawa, fundado en 1992 en Toluca, Estado de México.

Un muralista desconocido

Para la especialista Guillermina Guadarrama, el trabajo de Nishizawa como muralista es poco conocido y valorado, aun cuando realizó obras que rebasaron la frontera del fresco tanto en México como en Japón.

«No se encasilló en una técnica, sino que siempre fue diferente y trató de no quedarse en un solo estilo; rompió un poco con la tradición del arte, pero tampoco se quedó en la línea de la abstracción», señaló.

Relató que uno de sus murales, El aire es vida, ubicado en el vestíbulo del Centro Médico Siglo XXI, es una suerte de síntesis de su producción pictórica, en la que hay una narrativa histórica con técnicas de la época.

«Luego encontramos su mural en la Biblioteca Iberoamericana de la Secretaría de Educación Púbica hecho en cerámica que nada tiene que ver con el pasado», agrega.

«Fue un artista muy completo al abordar cualquier área de la pintura, y el muralismo no fue la excepción, donde tuvo encargos importantes, aunque creo que su fundamental contribución a la plástica y la historia del arte de México es su paisaje», consideró Blaisten, quien en su colección resguarda tres pinturas del artista plástico fallecido ayer.

Nishizawa, de padre japonés y madre mexicana, se formó en la Academia de San Carlos y desde su obra temprana se observa su búsqueda por expresar temas nacionalistas al tiempo que mezclarse con el «abstraccionismo absoluto». Ello le mereció reconocimientos como Creador Emérito del Sistema Nacional de Creadores de Arte, Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional Autónoma de México y fue miembro de número de la Academia de Artes.

Su obra forma parte de colecciones como la del Museo de Arte Moderno, del de la Estampa Mexicana, de las Bellas Artes en Toluca, la Colección de Bancomer y del Museo de Arte Moderno Kioto. Aunque el grueso de su pintura y escultura se encuentra en el recinto de Toluca, donde hay un acervo documental.

«Hace tiempo que no hay una retrospectiva de Nishizawa, su obra está presente en muchas exposiciones, pero no una individual; esperemos que para honrar su memoria pueda lograrse una», concluyó Del Conde.


REGRESAR A LA REVISTA

lunes, septiembre 29, 2014

Hasta la cocina / Ciudad Juárez: Expo-maridaje 2014 «La Gastronomía de Chihuahua»

.
Aspecto del evento. (Foto: GobEd)

C iudad Juárez, Chihuahua. 26 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS).- Con la asistencias de funcionarios públicos, estudiantes de turismo, promotores turísticos y público en general, se llevó a cabo la inauguración de la Primera Expo-
maridaje Ciudad Juárez 2014. «La Gastronomía de Chihuahua», informa GobEd en un comunicado.


Este evento se realizará los días 26 y 27 de septiembre en las instalaciones del Hotel Lucerna, ubicado en la Avenida Triunfo de la República No. 3976.

Se precisa que durante el desarrollo de la exposición, reunirá en un mismo espacio físico a centros de consumo y profesionales de la gastronomía en Ciudad Juárez. En esta ocasión el tema será «la gastronomía del Estado de Chihuahua

El evento será complementado con talleres y conferencias sobre el arte de la cata, ensamble y encorche de botellas, aromas y gastronomía en general, entre otros temas.

Durante la ceremonia de inauguración, Jorge Ruiz Garcés, presidente de la asociación civil Promotora Turística, dijo que la exposición tiene como objetivo promover la cultura del vino y su relación con la gastronomía, pero también se busca con ello generar una mejor imagen de Ciudad Juárez.

Indicó que por las circunstancias que todos vivimos en años pasados, el turismo se quedó un poco rezagado, pero ahora con la confianza y el apoyo de las autoridades, del gremio hotelero y de los promotores de turismo seguramente saldremos adelante.

Por su parte, el Presidente Municipal de Ciudad Juárez, Enrique Serrano Escobar, felicitó a los organizadores del evento por promover la cultura y consumo del vino.

El edil aprovechó su mensaje para hacer una reseña histórica de la cultura del vino desde que la trajeron los españoles y que en varios lugares de nuestro continente ha tenido mucho éxito por su calidad, cantidad y nivel industrial, pero en nuestro país nos hemos quedado un poco rezagados pese a que hay zonas importantes como Aguascalientes y Coahuila.

Indicó que en Chihuahua ya podemos presumir de tener viñedos y vinos muy buenos.

Sostuvo que muchas veces se cree que consumir el vino solamente es con platillos muy caros, pero no es así, el vino puede acompañar perfectamente con una enchiladas o un planto de frijoles. Hay un maridaje del vino con platillos de la cocina popular.

«Qué bueno que eventos como este nos permite dar a conocer a la comunidad la cultura del vino que, tomado con moderación es un excelente complemento de la alimentación», precisó el jefe de la comuna juarense.

Expuso que está muy bien que a estas alturas en Ciudad Juárez ya se esté hablando de otros temas que tienen que ver con la cultura, nuestras tradiciones, la historia, la industria y el turismo, porque estos son los temas importantes que hay que resaltar.

Al término de su mensaje, el Presidente Municipal y acompañantes cortaron el tradicional listón de inauguración de la exposición, para luego realizar un recorrido por los diferentes módulos de vinos, artesanías y comidas.

Integraron el presídium Jorge Carreón González, director de Comercio de la Frontera; Leobardo Armenta Quijas, Jefe de Turismo Zona Norte; Alcalde Enrique Serrano Escobar; Jorge Ruiz Garcés, presidente de Promotora Turística A.C.; Juan Ubaldo Benavente, director general de Desarrollo Económico y Financiero del Municipio; Carlos Riquelme Canales, presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Ciudad Juárez; Federico Ziga y
Sergio Pequeros Soler, del comité organizador de la exposición.

Galería








REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse

Obituario / Luis Nishizawa

.
El pintor mexicano.  (Foto: Cuartoscuro)

C iudad Juárez, Chihuahua. 29 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS).- El pintor mexicano, Luis Nishizawa, murió a los 96 años de edad, dio a conocer el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Rafael Tovar y de Teresa. Una nota de la redacción de Milenio:

A través de su cuenta de Twitter (rtovarydeteresa) el titular del Conaculta lamentó el fallecimiento del artista y envió sus condolencias a los deudos de Nishizawa y a la comunidad pictórica nacional e internacional.

Luis Nishizawa nació en la Hacienda de San Mateo, municipio de Cuautitlán, Estado de México el 2 de febrero de 1918.

En 1996 obtuvo el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Bellas Artes, su obra se encuentra en colecciones privadas de Estados Unidos, Japón y México, pero también en importantes recintos del extranjero y del país como el Instituto Nacional de Bellas Artes, el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México, entre otros.

No solo se preocupó por el arte contemporáneo sino que también recuperó una de las tradiciones más importantes de la entidad, la quema de judas, a la que impulsó a través del establecimiento de un concurso en el que hoy en día participan decenas de artesanos que realizan figuras de carrizo y cartón para continuar con esta costumbre de Semana Santa.


REGRESAR A LA REVISTA

Poesía / Briceida Cuevas Cob: «Wolis t’an / Pelota de voz»

Ch’eene’ ma’ utz tu t’an a pulik tunich ti’i.
Ka ch’amik u ch’eeneknakil.
Jumpulí ma’ utz tu t’ane’ báaxal beyo’.
Wa taak a báaxal tu yéetele’
woliskut a t’ane
ka jalk’esti’,
bin a wil bix ken u ka’ sutil ti’ teech.

Al pozo no le gusta que le tires piedras.
Lastimas su quietud.
Ese juego no le agrada.
Si quieres jugar con él,
haz de tu voz una pelota,
arrójala,
Verás que te la devuelve.

Del libro:
Carlos Montemayor (compilador) (2005) Las lenguas de América. Recital de poesía. Ediciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), 2005


REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse

Poesía / Briceida Cuevas Cob: «K’ik’ix k’in / Sol con espinas»

Uchakile’
munyalo’ob ku tuunichil way yook’ol lu’ume’:
Uj na’ tun,
K’in yum tun.
Jach uchakil.
Le ka’ach munyalo’ob ma’ u yoojelo’ob ba’ax nonojbaí.
Le ka’ach ma’ pok’en síis uj.
Le ka’ach ma’ yanak u k’ixel k’iin.

Hace tiempo
las nubes fueron piedras aquí en la tierra:
Madre piedra la luna,
Padre piedra el sol
Hace mucho tiempo
Cuando las nubes no sabían de soberbia,
la luna no era fría,
al sol no le habían crecido espinas.

Del libro:
Carlos Montemayor (compilador) (2005) Las lenguas de América. Recital de poesía. Ediciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), 2005

REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse


Radio / Orlando Julius & his Modern Aces: «Super Afro Soul» (álbum completo, 1966)





Para volver a escuchar le recomendamos que pulse el botón de PLAY


En RADIO Rancho Las Voces... Orlando Julius & his Modern Aces... y su...«Super Afro Soul»... en RADIO Rancho Las Voces... Orlando Julius was unnoticed by the international community until 2000, when Super Afro Soul was re-released on Strut and distributed throughout the world to wide critical acclaim....



REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse

Estampas de la Frontera / Anuario «1970» ESTECOM-3

.
Portada del anuario.  (Foto: JMV)

  C iudad Juárez, Chihuahua. 29 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS).- El Lic. Pedro Mejía nos compartió este ejemplar del anuario del año 1970 de la Escuela Técnica Comercial, dicha escuela fue fundada en esta ciudad en 1918 por la Cámara de Comercio de la ciudad y su primer local estuvo ubicado en las calles Lerdo y 16 de septiembre, tuvo otro local en la calle 5 de mayo y 16 de septiembre, en 1946 se estableció en la calle Ramón Corona. En la actualidad en ese edificio se encuentra la Preparatoria Enrique C. Ledezma que dirige el Lic. Mejía. 
















REGRESAR A LA REVISTA

Libros / México: «La cámara sangrienta» de Angela Carter

.
Ilustración de Alejandra Acosta. (Foto: Archivo)

C iudad Juárez, Chihuahua. 28 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS).- Reinventar y reescribir algunos cuentos clásicos de Charles Perrault fue un ejercicio que la escritora inglesa Angela Carter (1940-1992) llevó a buen puerto en La cámara sangrienta, en el que historias clásicas como Caperucita roja, El gato con botas o La bella y la bestia fueron transformadas en cuentos con un carácter más tenebroso, gótico y cargados de erotismo. Una nota de Juan Carlos Talavera para Excélsior:

Originalmente escrito en 1979, para esta nueva edición Sexto Piso seleccionó a la ilustradora chilena Alejandra Acosta, influida por el trabajo y la técnica de los artistas Max Ernst y de los estudios con niñas del también polaco Balthasar Klossowski de Rola, conocido como Balthus.

«Para mí este libro es un rescate muy acertado, porque sucede, al menos a mí y a muchas personas de mi generación, que no conocíamos a Carter como autora. Sin embargo, tiene un montón de cuentos fantásticos y me parece muy interesante que la reinterpretación que hace de estas historias, ese punto de vista más erótico y feminista es muy potente», explica Acosta en entrevista con Excélsior.

El libro cuenta con diez relatos: La cámara sangrienta, El cortejo del señor león, La novia del tigre, El gato con botas, El rey de los trasgos, La niña de nieve, La dama de la casa del amor, El hombre lobo, La compañía de los lobos y Lobalicia.

«Me agradó trabajar con estos textos, pues, aunque están inspirados en cuentos clásicos, tienen muchos elementos que durante mucho tiempo han estado contenidos en mi obra gráfica. En el fondo me sentí un poco en casa trabajando con elementos con los que me siento muy identificada, como el bosque, los niños, las mujeres y los lobos, sobre todo ese tema tan potente de la mujer como personaje reivindicado, como la heroína», detalla la ilustradora.

Arte y emoción

Para Acosta, lo más importante fue trabajar a partir del contraste entre las historias y sus ilustraciones, «pues el ilustrador funciona como una especie de intérprete y en términos generales mi forma de abordar los textos es bastante emocional».

Trabajar a partir de elementos opuestos dentro de la trama visual, como la luz y la sombra, la bondad y la perversión, «me permite hacer una reinterpretación alejada de lo textual».

¿Por qué la figura humana es el centro de su trabajo?, se le cuestiona a la también artista. «La mujer es la protagonista de mis ilustraciones y para este trabajo quise convertirlas en heroínas, en el tema principal donde enfoca la luz, el punto de color o ponerlas simplemente al centro, esa mezcla de la mujer como un animal perverso, sin perder elegancia y feminidad».

¿Cuál es el fondo de su trabajo como ilustradora?, se le inquiere. «Mi ilustración tiene como característica una fuerza silenciosa, una especie de hablar desde el símbolo y la sugerencia. Me gusta entregar respuestas simbólicas, es decir, no busco entregar solución terminadas, sino sugerir algunas respuestas o emociones que el lector interprete».

¿Con qué historias se sintió más cercana? «Soy fanática de Alicia y Caperucita. Con ambos personajes trabajé muy rápido, sobre todo con Alicia fluyó y fluyeron todas las respuestas de forma muy rápida».

¿Es la ilustración el complemento en las historias de Carter? «Más bien pienso que en los libros ilustrados habitan dos autores: el del texto y de la ilustración. En ese sentido, siempre he pensado que ambos se complementan, pero desde un punto de vista muy diferente, porque cada uno tiene un discurso muy distinto y eso me parece que tiene un gran valor. Y aunque siempre hay conexiones entre los dos, siempre intento reinterpretar desde un punto de vista personal para que se aleje de la carga del texto. Es como si convivieran dos historias diferentes en un mismo libro».

Dentro de las 16 ilustraciones que acompañan La cámara sangrienta, se puede apreciar una serie compleja de paisajes fantásticos con espejos, sangre, cuchillos, aves, conejos y flores. Sin embargo, la ilustradora asegura que su fuente de inspiración no está precisamente en la literatura fantástica, sino en la poesía.

«Yo leo más poesía y me gusta mucho Alejandra Pizarnik, pero también me gusta ver la obra de Frida Kahlo y de Leonora Carrington. Pero en general soy lectora de poetas y de una cuentista chilena llamada María Luisa Bombal, que tiene unos cuentos catalogados como surrealistas», expresa.

Por último, Acosta habla sobre la técnica que utilizó para este trabajo. «Es un trabajo muy lento. Primero me planteo una idea central que trato de plasmar con un dibujo rápido, el cual me sirve de referencia para comprender los elementos que debo reunir para armar esta imagen».

Después comienza la búsqueda de los elementos, por ejemplo el bosque o determinado animal, una niña con ciertas características, el cordero, un cuchillo… y así arma la escena como un collage hasta que consigue el último elemento.

Esto le permitió establecer una conexión emocional con Angela Carter, para obtener una interpretación distinta a la literal. «Como estas historias están inspiradas en ‘cuentos clásicos’ me parecía necesario trabajar con una técnica clásica, así recopilé distintos grabados de los siglos XVIII y XIX, con los que fui armando cada collage».

Se trata de un trabajo inspirado en la técnica que utilizó Max Ernst, uno de los referentes para la artista en el terreno visual. «Sabemos que su trabajo es muy respetado, pero le cuesta mucho al público comprender la importancia del collage como arte. Entonces muchas personas le quitan mérito al trabajo, pero a mí me parece súper interesante trabajar en el rescate de imágenes olvidadas, que me han permitido rearmar escenarios con una obra nueva», concluye.



REGRESAR A LA REVISTA

domingo, septiembre 28, 2014

Noticias / Ciudad Juárez: Asociación de Historiadores presenta proyecto al Presidente Municipal

.
Aspecto de la reunión. (Foto: Comunicación Social del Municipio de Juárez)

C iudad Juárez, Chihuahua. 9 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS).- Integrantes de la Asociación de Historiadores de Ciudad Juárez se reunieron este día con el Presidente Municipal, Enrique Serrano Escobar, para solicitarle su apoyo para la realización del Encuentro de Historiadores y Escritores, que se realizará en fecha próxima en Ciudad Juárez, se informa en un comunicado.

En el marco de la reunión, le hicieron entrega al edil de un cuadro con su imagen elaborada al óleo por Ulises Torres Pereira, uno de los miembros de la agrupación que encabeza el historiador Felipe Talavera pero que en esta ocasión fue representado por su suplente, Antonio Ruíz Caballero.

Filiberto Terrazas, explicó al Presidente Municipal el trabajo que se ha realizado para presentar la historia de sus antecesores, de 1960 a la fecha, con la edición de la publicación «La voz de los siglos», solicitándole su apoyo para llevar a cabo la Cuarta Edición.

Le comentó que él tuvo la oportunidad de conocerlos a todos, para luego pedirle el apoyo para la reedición de este libro, con la actualización correspondiente. El Presidente Municipal indicó que le haría este encargo al Director de Educación y Cultura, Francisco Alfonso Muela Reyes.

El presidente municipal recibe su retrato de manos del  autor, dond Antonio Ruíz Caballero observa el acto. (Foto: Comunicación Social del Municipio de Juárez)

El Presidente Municipal destacó la importancia que tiene que los ciudadanos conozcan su historia, la que desgraciadamente no es considerada en los programas educativos, que solo se refieren a la historia estatal, nacional e internacional, con algunos pasajes que han tenido repercusión en el país, como lo fue la Revolución Mexicana y la época de la Reforma, con el Presidente Benito Juárez despachando desde el antiguo Paso del Norte.

Les agradeció su amor por Juárez, «porque no se puede ser historiador de algo si no se ama, no es un trabajo, es una pasión», dijo para luego ofrecerles el apoyo para que cumplan con su objetivo.

Expresó su agradecimiento por el cuadro que le obsequiaron, el que dijo pondrá en un lugar especial de su hogar.

Los historiadores le expresaron su apoyo y la decisión de continuar trabajando para mostrar la historia de Ciudad Juárez,  para que la conozcan propios y extraños.


REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse

Textos / Enrique Alberto Servín Herrera: «Un viaje a Grecia»

.
El intelectual chihuahuense en Atenas. (Foto: EASH)

C iudad Juárez, Chihuahua. 28 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS).- Cuando abro el 4 de agosto el mensaje de Dino Siotis en el que me invita a participar en el Festival Internacional Literario de Tinos, en Grecia, mi primera reacción es, por supuesto de una atónita incredulidad y de un gran entusiasmo. Grecia ha sido consagrada al nivel de «cultura madre» por diversas instituciones de aquello que llamamos la Civilización Occidental, y esa idea se difunde en escuelas, medios masivos de comunicación o incluso al nivel de la cultura popular. Y aunque ahora reconocemos que los procesos de génesis de una civilización son siempre complejos, rizomáticos, multidireccionales, y nunca involucran a una única sociedad (de hecho, ni siquiera existe nunca una «única sociedad», pues cada sociedad es un conjunto de elementos disímbolos en continuo movimiento), de todas maneras es difícil rechazar esta veneración por la cultura y la sociedad griegas de la gran época, el llamado «Siglo de Pericles» y los siglos inmediatamente anteriores y posteriores a él.

Los griegos fueron, como cualquier otro pueblo, contradictorios: eran esclavistas, misóginos, etnocéntricos, a veces fanáticos e hicieron guerras que, como dijera Mario Soares sobre las de Portugal, «no se distinguieron por las buenas maneras».

Pero de manera muy temprana aquella gente perfeccionó a tal grado un arte y una estética propios, que sus principios generales han sido los más perdurables en el mundo occidental e incluso más allá de sus (de por sí) dilatadas fronteras. Europa, las Américas y Australia están sembradas de edificios que son ecos de aquella lejana estética griega. Es menos conocido, sin embargo, el hecho de que el edificio de la Dieta Nacional Japonesa, el Gran Palacio de Tailandia, el edificio principal de la Universidad del Cairo, en Egipto, o el Rashtrapati Bhavan en la India (entre muchos otros en el lejano oriente, Asia y África), son igualmente edificios renacentistas o neoclásicos, de raíz ultimadamente helénica.

La ciencia griega estaba tan avanzada hace dos milenios y medio que uno de sus libros fundamentales, los Elementos de Geometría, de Euclides, tardó más de dos mil años en ser superado. Eratóstenes de Cirene, doscientos años antes de Cristo, calculó la circunferencia de la tierra, con un error, de acuerdo a los cálculos modernos, de tan sólo unos cuantos kilómetros.

Las aplicaciones de aquella ciencia fueron también asombrosas: el mecanismo de Antikíthera, descubierto hace décadas entre los restos de un naufragio, resultó ser una computadora analógica destinada a predecir, con una gran exactitud, los movimientos del sol, la luna y los principales planetas, y convirtió, a partir de fue entendido su funcionamiento, en verosímiles las descripciones de Píndaro, según las cuales las calles de Rodhas estaban adornadas con autómatas de mármol capaces de mover los miembros de sus cuerpos.

La estructura del gobierno ateniense, ya perfeccionada hacia la época de Pericles y producto de dilatados conflictos internos, así como de una evidente capacidad de innovación política, dio origen al concepto de democracia universal y constituye ahora el más extendido ideal de gobierno a nivel planetario, aunque muy pocas veces haya podido ser aplicado de manera incuestionable y aunque haya degenerado en tantas partes del mundo en una simple máscara que oculta refinados mecanismos de control y manipulación social.

Además, la reflexión en torno a las formas de gobierno alcanzó en Grecia niveles muy altos y dio origen a la teoría política, proporcionando conceptos que siguen siendo centrales: tiranía, monarquía, demagogia, democracia. Las palabras «teoría» y «política», por cierto, también son inventos griegos y, de hecho, en numerosas lenguas del mundo es casi imposible discutir sobre cualquier tema técnico, científico o filosófico sin acudir, casi de continuo, a los préstamos que la lengua griega aportó al mundo entero.

Pero tal vez los aspectos más influyentes de aquellos siglos griegos en los que la reflexión era una pasión intensa y extendida fueron, precisamente, la cosmovisión y la filosofía que hicieron posibles. Ya desde su mitología, preservada y expresada de manera excepcional, los griegos mostraron una tendencia a humanizar a los dioses y divinizar al individuo.

Las dos grandes epopeyas homéricas son quizá la más grande muestra temprana de esta tendencia. A diferencia de las grandes culturas e imperios orientales (Egipto, Mesopotamia, Persia), en los que la colectividad es una expresión inconmensurable del rey –un teócrata que encarna la idea de la divinidad y que es concebido como puente entre el mundo y lo sagrado–, los griegos concedieron al individuo, tal vez por primera vez en la historia, un lugar central en el cosmos, pero cifraron su importancia y su valor en la capacidad de cada individuo para aportar algo valioso (algo virtuoso) a la esfera pública. Es en esta tensión en la que se vuelven posibles la democracia, la libre discusión de las ideas y la expresión de un arte al mismo tiempo realista y equilibrado, centrado en el individuo pero desprovisto de casi cualquier moralismo intimista. En cuanto a la filosofía griega, se trata, por supuesto, de un pensamiento diverso, sofisticado y muy atrevido en sus concepciones y alcances generales. En Grecia aparecen los primeros idealismos, materialismos, ateísmos, escepticismos, y sus grandes pensadores han ejercido una influencia tan grande durante dos mil años, que el filósofo inglés Alfred N. Whitehead pudo decir en alguna parte, aunque no fuera sino de forma exagerada y un tanto humorística, que la filosofía occidental no ha sido desde entonces sino «una serie de comentarios» a la obra de Platón.

Por más relativistas que seamos, y por más que entendamos que cada cultura es un sistema auto-referencial en sí mismo y, como tal, es igual de valiosa que las demás, el «milagro griego» seguirá deslumbrándonos por siglos, tal y como lo predijo Pericles, justamente uno de sus protagonistas más famosos: «Somos admirados hoy. Y seremos admirados siempre».

Así que: ¿Es posible decir «no» a un viaje a Grecia? Y más, a un viaje dedicado al cultivo de la poesía, esa zona de refugio del espíritu humano en este tiempo de endurecimientos, deshumanización y retroceso...

Sin embargo, poco después de leer la invitación al festival en Tinos una serie de dudas comienzan a interferir con mis emociones. El viaje implica, por más que los organizadores cubran viáticos y alimentación, una serie de gastos inevitables. Y otros más que, aunque sean evitables, yo no voy a saber, de seguro, evitar, por ejemplo la compra de libros y música, o la degustación de la culinaria regional.

También me acecha, debo confesarlo, la certidumbre de que aquella Grecia, verdadera o no, existe tan solo en el remoto pasado, y que la Grecia contemporánea, como cualquier otro país, se encuentra inmersa en el inclemente entramado de la globalización y es ahora, justamente, uno de los países que más la han sufrido.

Pero están la inmensa roca de la Acrópolis, y el Partenón –ese sitial sagrado y perfecto del espíritu griego–, están los museos, y los anfiteatros (¡no he dicho nada del teatro griego, ni, por supuesto, de tantas otras cosas!). Y están la gente y la lengua, esas dos vastas continuidades, todavía floreciendo en grandes poetas y novelistas. Y están el mar griego y, de cualquier forma posible, está la luz de Grecia.

Éxodos, letrero que anuncia la salida. (Foto: EASH)

16 de agosto

Después de recorrer las zonas comerciales del aeropuerto de Frankfurt, en el que veo por todas partes diversos tipos físicos y escucho veintenas de idiomas diferentes, llego al andén del que habrá de partir el avión hacia Atenas.

Inmediatamente siento el ambiente mediterráneo, del que los latinoamericanos hemos heredado algunas características fáciles de ser percibidas. Con excepción de un grupo de suecos, el resto de las personas que están esperando son griegos. Niños corriendo, mujeres que alzan la voz y se llaman entre ellas, casi gritándose: «Andígona», «Klitimnistra», «Dafni».

Es la primera vez que escucho esos nombres prestigiosos fuera del universo mitológico o literario. Me voy acercando a ese mundo reconocible, que ha estado en nuestra cultura desde siempre y cuyos destellos y ecos comienzo a percibir.

Cuando hago fila para abordar, un hombre de unos sesenta años, viendo el sello del Gobierno del Estado en un costado de mi camisa, le dice en griego a su esposa: «Estoy seguro de que habla español, pero no sé de qué país sea».

Al buscar mi asiento en el interior de la aeronave, lo primero que veo es el letrero que anuncia la salida de emergencia: «Éxodos». Me emociono. En griego, «éxodos» no significa sino «salida». Pero para un hablante de español, la palabra se abre hacia otras direcciones y niveles mentales: El éxodo de los pueblos y los correligionarios perseguidos; «Éxodo», el libro del Antiguo Testamento judáico, llamado así desde la recensión de los Septuaginta, escrita en griego koiné cuando el griego era la lengua internacional del mundo mediterráneo; los éxodos en la siempre repetida tragedia de la guerra. En efecto, lo griego, fuera de Grecia, se desdobla con frecuencia hacia otras dimensiones y despliega significados cultos de tipo histórico, artístico, filosófico y científico porque, durante más de dos mil años, ha sido continuamente copiado, adoptado, adaptado y remotivado semánticamente.

Es curioso, algunas de las personas que viajan en los asientos cercanos podrían ser mexicanos de ciertas regiones (puesto que México es uno de los países racialmente más diversos del mundo), pero de pronto aparecen, a dos o tres lugares del mío, rostros que podrían ser los de las antiguas estatuas, de facciones rectas y finas que en el algún caso incluyen el famoso perfil griego, algo que yo imaginaba como un simple arquetipo o como una mera estilización. En las mujeres son comunes los ojos grandes y levemente rasgados, un rasgo oriental que ya aparece en la pintura y la escultórica antigua (por ejemplo en las «kores» arcáicas), pero que también recuerda los siglos de presencia otomana en Grecia y los Balcanes. Por supuesto, las tipologías físicas no coinciden con las fronteras políticas en ninguna parte del mundo, y casi las mismas características podrían ser observadas en los habitantes del sur de Italia, o de otras partes del Mediterráneo, pero esto me lleva a que la primera vez que visité Yucatán los rostros en el mercado me recordaban mucho los perfiles de las esculturas y las inscripciones mayas, y pienso en el apego poderoso que, a través de milenios, las poblaciones guardan a sus territorios ancestrales.

Comienza a oscurecer y abajo las tierras se borran poco a poco, hasta quedar tan solo el brillo de las ciudades, grandes y pequeñas. De acuerdo a las pantallas que señalan el itinerario, el avión va ahora sobrevolando Albania, y me doy cuenta de que hace apenas unas cuantas semanas nunca hubiera pensado que algún día iba a estar sobrevolando Albania. Descendemos lentamente. Aparecen las luces de Atenas.

Pisar tierra griega. Seguramente parezco una versión laica del peregrino, que en tantas tierras y culturas remonta en las rutas y los tiempos en busca de un reencuentro significativo, de una fuerza particular. Al descender del avión y subir al autobús que nos llevará a las salas de llegadas del aeropuerto, el hombre que me había identificado como hispanohablante se me acerca y me pregunta, en un castellano correctísimo, si soy mexicano. Me cuenta que vivió muchos años en Cuba, que recorrió varios países de la América Latina y que hace algunos que regresó a Grecia «para morir».

Luego me entrega, sonriente, un mapa del país y otro de Atenas. Me despide con un dicho que no es desconocido en los Balcanes: «Las montañas no pueden moverse, pero los hombres sí: tal vez algún otro día nos volvamos a encontrar». En la zona de recepción distingo desde lejos al poeta, novelista y traductor Giorgos Rouvalis, quien vino a recibirme al aeropuerto.

Pisando el Partenón. (Foto: EASH)

1 de septiembre

La primera impresión es de prosperidad, lo que contrasta con la avalancha de noticias que durante los últimos años hemos escuchado en relación a la crisis griega. El aeropuerto podría estar en cualquier parte de los Estados Unidos, y tal vez lo mismo podría decirse de la infraestructura carretera que lo comunica con la capital y los suburbios de los alrededores. La metrópolis griega, por supuesto, es una gran urbe contemporánea, centro principal de un país que ahora es parte integrante de la Unión Europea y, por lo tanto, plenamente inmerso en los procesos de globalización que se han intensificado en el mundo durante las últimas décadas. Como voy llegando de noche, durante el trayecto es difícil apreciar los alrededores de la ciudad, pero de todas maneras son visibles el entorno árido y la particular vegetación del Ática, en las montañas y la pequeña llanura en la que, hace ya casi tres milenios, una serie de aldeas se conurbaron para dar origen a la ciudad dedicada a la diosa de la sabiduría. Recuerdo –o creo recordar– que uno de los autores antiguos calificó a Atenas de «polvorienta».

La señalización, una vez más, anuncia nombres milenarios y va disparando conexiones mentales con eventos históricos, obras de la literatura y ceremonias religiosas: «Elevsina», por ejemplo, la antigua Eleusis, en donde se celebraban los antiquísimos misterios sagrados. Al acercarnos al centro, comienzan a aparecer edificios modernistas, muchos de ellos construidos durante la primera mitad del Siglo Veinte y casi todos de la misma altura, lo que le da a la ciudad un cierto ritmo y una cierta armonía. Las avenidas son, por lo general, muy arboladas, y entre los árboles y las estructuras que los protegen Giorgos me va haciendo ver las principales librerías y restoranes. El taxi dobla por algunas vialidades secundarias, acercándonos a nuestra dirección, y de pronto, al fondo de una de las avenidas por las que acabamos de pasar, aparece de lejos el Partenón. Iluminado. Del color de la lumbre. Flotando sobre Atenas.

Duermo inquieto, no tanto por el desfase de los horarios como por la emoción de encontrarme en el lugar en que me encuentro. Sueño imágenes sin conexión ni aparente sentido, pero pronto despierto, una y otra vez, y en la penumbra miro las paredes, las rejillas del aire acondicionado, las ventanas: me hallo, por supuesto, rodeado por la modernidad, idéntica en todas partes, pero estoy en Grecia; allá afuera, a pocas cuadras, quedan la Acrópolis y sus excepcionales monumentos, centrales en la historia de toda la Civilización Occidental; alrededor de ellos, la Torre de los Vientos, los restos el ágora, el Hefestión; los tesoros innumerables que –a pesar de siglos de saqueos y despojos– todavía colman los museos de este país; las partes viejas de la ciudad, construidas sobre la Atenas milenaria. Pero además, de una manera silenciosa y secreta, también los restos de columnas, esculturas, ánforas y las fragmentarias y multiformes evidencias históricas que todavía estarán sin descubrir, yaciendo en la absoluta oscuridad del subsuelo, algunas tal vez para siempre.

Después de desayunar me pongo de acuerdo con Giorgos y Elia Rouvalis para visitar la Acrópolis y el museo que alberga los descubrimientos hechos durante las sucesivas restauraciones que han sido llevadas a cabo en los Propileos, el Erekhteion y, en primerísimo lugar, el Partenón. Recorremos en un taxi la Atenas moderna, nos acercamos a la Plaka, el barrio antiguo, y llegamos por el lado de la Puerta de Adriano, un más bien modesto pero elegante monumento que durante el reinado del famoso emperador romano fue construido, junto con otros, en su admirada ciudad. La Plaka está llena de jóvenes, vendedores, meseros y turistas que, como yo, acuden a este lugar soleado y cargado de belleza e historia.
Caminamos sobre el empedrado de mármol y a los pocos minutos aparece la Acrópolis, engarzada por sus enormes muros y rodeada por un pequeño bosque de olivares y laureles entre los que sobreviven las ruinas de otros edificios importantes. La Acrópolis, la «ciudad elevada». Esencial. Poderosa. Como una fortaleza o un templo naturales.

No se «va» al Partenón. Como en el caso del Muro de las Lamentaciones en Jerusalem, o la Kaaba en la Meca, se «sube» hacia él. El transcurso, a pesar de las veredas contemporáneas, los señalamientos y las hordas de turistas, tiene algo de ritual. El calor, la intensa luz del mediodía, reflejada en los mármoles, hacen que la sombra de los olivares y las ráfagas de brisa que van llegando del Ática, o desde el mar, se sientan como verdaderas caricias. Uno se va abstrayendo y deja de poner atención a las conversaciones o a los personajes de todo tipo que aparecen entre las filas de los visitantes. Al pasar los majestuosos pórticos de los Propileos, y caminando sobre el gastado, pulido piso de piedra del techo de la Acrópolis, comienza a perfilarse la verdadera meta de esta peregrinación: el virginario, el Templo de Atenea, diosa de la sabiduría; Hekatómpodos: el de las Cien Columnas.

Es difícil decir algo sobre el Partenón. Esta suprema obra maestra, cuyo significado fue entendido ya desde el tiempo de su concepción (Pericles llegó a decir que su sola construcción sería suficiente para asegurar a Atenas un sitio en la historia de la humanidad) ha mantenido intacta su enorme fuerza estética y simbólica a lo largo de dos milenios y medio. Ni la guerra, ni los saqueos, ni la simple pero inexorable erosión, ni la evidente incompletud a la que el tiempo lo ha conducido han podido mermar belleza a este prodigio de serenidad y armonía. Para poder irradiar esa perfección, fue diseñado geométricamente como un edificio imperfecto. Es un hecho bastante conocido el que, al contrario de lo que parece, casi no contiene líneas rectas, porque sus volúmenes se comban y se arquean de continuo para poder vencer las leyes de la percepción a distancia: la perspectiva.
Construido en mármol de un color cercano al blanco, alguna vez sus frisos estuvieron pintados de colores realistas sobre un fondo lapislázuli o añil, generando la impresión de un ceñidor que coronara las columnatas del edificio. En el pasado albergó una enorme estatua de Atenea hecha de placas de marfil cuyo vestido estaba todo cubierto de láminas de oro y que llegó a ser considerada parte del tesoro público ateniense. Existen descripciones antiguas de ese altar deslumbrante, pero en la actualidad nada queda de los elementos interiores del edificio, que fueron desapareciendo conforme la desestructuración, eterna ley a la que se abandona toda estructura, fue carcomiendo la obra maestra. Una explosión ocasionada por el ejército veneciano en 1687 destruyó la techumbre y debilitó buena parte del edificio, haciendo llegar a un punto crítico su deterioro. Algunos hombres sueñan, proyectan, construyen; otros arrasan, destruyen, borran. Aun así, incluso ahora el Partenón sigue resplandeciendo.

Al recorrer los exteriores, enfrentándose a sus ritmos y armonías, uno siente una especie de transparencia y limpidez. Cuando el poeta Dino Siotis habla del «silencio dórico», tal vez se refiera, justamente, a esta experiencia. Y sin embargo hay algo de musical en el Partenón.

El viento arrecia, suena entre el bosque de los pilares de mármol. Y dan ganas de callar, uno mismo. De no tratar de añadir.


REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse

Noticias / Ciudad Juárez: Reconocen a la JMAS por sanear agua residual al 100%

.
Fernando Uriarte Zazueta, al centro, en compañía de Carlos Hermosillo, reciben el reconocimiento de manos de Roberto Salmón Castelo. (Foto: JMAS / Juárez)

C iudad Juárez, Chihuahua. 18 de spetiembre de 2014. (RanchoNEWS / Redacción).- La Junta Municipal de Agua y Saneamiento recibió un reconocimiento, por su destacada labor y contar con la capacidad instalada para sanear el 100 por ciento del agua residual, informa la institución en un comunicado.

El reconocimiento lo recibió de manos de la Comisión Nacional de Límites de Agua entre México y Estados Unidos, sección mexicana a través de su comisionado, Roberto Salmón Castelo, quien dijo que esto se debe a que es uno de los mejores organismos operadores en la frontera norte, lo que se ve reflejado en sus operaciones, infraestructura actual, planeación, la satisfacción de sus clientes, el bienestar de la comunidad, el resguardo de los recursos naturales y en su desempeño financiero.

Al respecto, el titular de la JMAS Juárez, Fernando Uriarte Zazueta dijo que «este reconocimiento no es para el presidente, es del trabajo que han realizado los trabajadores a lo largo de muchos años, responsable y serio, lo cual es un motivo de orgullo para ellos, como lo es para mí».

En relación al reconocimiento otorgado a la Junta Municipal de Agua y Saneamiento Juárez, el Presidente de la Junta Central de Agua y Saneamiento Carlos Hermosillo, dijo que esto representa mucha responsabilidad, tanto para el organismo, como para los usuarios, quienes coadyuvan para que el vital líquido perdure para más generaciones.

Por su parte, el alcalde Enrique Serrano felicitó el trabajo de la JMAS, por que el contar con el capacidad instalada para sanear el 100 por ciento del agua residual garantiza más agua para ambos lados de la frontera.

El reconocimiento se entregó en el marco de la Ceremonia del 125 aniversario de CILA y 70 años de la firma del Tratado de Aguas de 1944.

REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse


Obituario / Glenn Cornick

.
El bajista inglés. (Foto: Jethro Tull / Facebook)

C iudad Juárez, Chihuahua. 28 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS / Redacción).- Se nos había quedado en el tintero la triste noticia del deceso de Glenn Cornick, bajista del grupo Jethro Tull, de 1968 a 1970.

En la página de la banda en FB, Ian Anderson publicó el siguiente texto:

It is with great sadness that we learned today of the passing of Glenn Cornick, bass player with Jethro Tull from the band’s inception 1968 until 1970. Of course, he had also played with the John Evan Band for the year during 1967 and so his contribution to the geographical transition from Blackpool to London and into the professional music scene was considerable.

Glenn was a man of great bonhomie and ready to befriend anyone – especially fellow musicians. Always cheerful, he brought to the early stage performances of Tull a lively bravado both as a personality and a musician.

His background in the beat groups of the North of England and his broad knowledge of music were always helpful in establishing the arrangements of the early Tull.

During the many years since then, Glenn continued to play in various bands and was a frequent guest at Tull fan conventions where he would join in with gusto to rekindle the musical moments of the early repertoire.

We will miss him hugely and our condolences go to his wife Brigitte and children.

Glenn Cornick: musician. April 23rd 1947 – August 29th 2014.

Ian Anderson 19.30 August 29th 2014

REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse

Libros / México: Presentan «Un viaje al Paraíso Chihuahuense, Barranca de Batopilas», en el Senado

.
La senadora chihuahuense Lilia Merodio sostiene un ejemplar del libro del maestro Román Corral y un reconocimiento que a ella le hizo la Sociedad de Escritores de Ciudad Juárez. (Foto: Cámara de Senadores)

C iudad Juárez, Chihuahua. 23 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS / Redacción).- Enalteciendo la historia y cultura chihuahuense, la Senadora Lilia Merodio Reza impulsó la presentación del libro Un viaje al Paraíso Chihuahuense, Barranca de Batopilas del escritor Román Corral Sandoval, en el Senado de la República, difundiendo así, dijo, «un poco de lo maravilloso de nuestro bello Estado de Chihuahua».

Román Corral Sandoval, a través de su obra Un Viaje al Paraíso Chihuahuense, Barranca de Batopilas, nos permite acompañarlo metro a metro en los aproximadamente ochocientos kilómetros que existen entre Ciudad Juárez y Batopilas, en compañía de sus colegas y amigos Sergio Luján Mancha y Samuel Mancinas Salinas, pero también de todos y cada uno de los recuerdos que de forma vívida persisten en su memoria sobre aquellos, sus primeros años como maestro rural en su primera misión educadora.

La senadora Lilia Merodio estuvo acompañada por el coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, Emilio Gamboa Patrón, quién aplaudió esta presentación y el trabajo que la senadora chihuahuense hace por el Estado.

Lilia Merodio destacó algunos pasajes de la obra presentada, por ejemplo el relato de la convivencia unas veces circunstancial y otras veces forzada entre los tarahumaras y los chabochis, de quienes históricamente se han tenido razones para desconfiar, toda vez que de ellos han sido objeto de discriminación, explotación y marginación, y de quienes en mucho no han recibido más que promesas a través de sus gobernantes, sin que ello mitigue el hambre y la exclusión.

La también secretaria de la Mesa Directiva se dijo orgullosa del talento del autor y del que dijo, refleja las grandes aptitudes que existen en Chihuahua, «en sus niñas y niños; sus mujeres y hombres, sus adultos mayores, en todos los chihuahuenses».

Otro pasaje, se comentó en la conferencia, es el que reza ese ánimo de los tarahumaras para festejar, para el baile de las pascolas en las fechas religiosas como la Candelaria y la Semana Santa; para realizar la carrera de la bola que es sólo una pequeña muestra de la ya reconocida persistencia y condición física de los rarámuri.

Pero paralelamente a este viaje por el que nos lleva Román Corral Sandoval, dijo Merodio Reza, encontramos otro, que es el viaje interior, el viaje del encuentro consigo mismo, con el joven maestro rural que en septiembre de 1970 inició su andar en el arduo trabajo de la educación.

Román Corral enseña en la obra cómo noche tras noche preparó el material didáctico para sus alumnos, apenas iluminado por un par de velas que también había que administrar por la falta de dinero, derivada de la tardanza en los trámites de pago, los cuales en la década de los 70 eran realizados desde la Ciudad de México, sometiendo a los maestros a la necesidad de pedir ayuda económica a sus familiares.

«La vida de esos maestros que forman a nuestros niños, que forman las personalidades que le dan vida a nuestro país. Esos maestros que forjan un país más y mejor educado», dijo la legisladora priísta.

Galería

Aspecto de la presentación. (Foto: Cámara de Senadores)

De izq. a der.: El escritor argentino Ricardo Clark; la senadora Lilia Merodio Reza; el senador Emilio Gamboa Patrón, Coordinador del Grupo Parlamentario del PRI; el autor Román Corral Sandoval; y Sergio Gelista García, escritor del Distrito Federal, Presidente de la Asociación Mexicana de Autobiografía y Biografía, AMAB. (Foto: Cámara de Senadores)


REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse

Libros / Ciudad Juárez: Presentan «La falena de las colinas» de Koulsy Lamko

.
El escritor africano. (Foto: www.jeuneafrique.com)

C iudad Juárez, Chihuahua. 24 de septiembre de 2014. (RanchoNEWS / Redacción).- La Dirección General de Difusión Cultural y Divulgación Científica, en el marco del Convenio de Colaboración UACJ-UNAM 2014, invita a la presentación de la novela La falena de las colinas de Koulsy Lamko.

La cita es este próximo sábado 4 de octubre a las 18:00 horas en la Sala Chihuahua de Rectoría (Plutarco Elías Calles 1210, esq. con Hnos. Escobar).

La presentación estará a cargo de Diego Ordaz, Agustín García y el propio autor. La entrada es libre y habrá vino de honor.

Sobre la novela

A través de la memoria de una reina, violada por un sacerdote y asesinada por sus seguidores, que reencarna en el cuerpo de una falena (mariposa nocturna), Kously Lamko recrea los horrores de la Guerra de Ruanda (1990-1994). La mirada de la mariposa, nos revela el mundo posgenocida y una memoria colectiva que se debate ante un capítulo extremadamente brutal y doloroso, así como los intentos individuales por hacer renacer la esperanza.

La novela describe alegóricamente el genocidio de los tutsis, tomando prestado un recurso de los griots o narradores de la región, y está tejida por varias subtramas, que van desde la travesía de una joven para buscar la tumba de su tía, hasta las evocaciones históricas que sostienen los sobrevivientes al conversar en los cafés.

Obra cantada, lenguaje mágico y poderoso, La falena de las colinas es una de las mejores obras producidas sobre este episodio en el marco del proyecto «Ruanda, escribir por deber de la memoria».

El escritor

Koulsy Lamko (Chad, 1959) es autor de dramaturgia, poesía, novela, cuento y guión. Es promotor cultural, director de escena y actor. Sus cuentos y obras han sido premiados en varias ocasiones.

Sus textos han sido publicados y llevados al teatro por compañías de África, Europa, Canadá y México.

Realizó el disco Bir Ki Mbo (1977), en colaboración con Stéphan Scott y Rémi Stengel, en homenaje a Thomas Sankara.

Cursó estudios en Letras y Artes del Espectáculo. Después de cursar una maestría en Letras y Artes, ejerció la docencia en Costa de Marfil. En Francia concluyó un doctorado en literatura comparada, en la Universidad de Limoges (2003).

Actualmente reside en la ciudad de México, donde dirige, desde 2009, la Casa R. Hankili África, localizada en el Centro Histórico.

De su producción poética destaca: Amargura negra, antología poética, (Kuljaama Editions, 2005), y Bir ki mbo, (Editorial Case Culture, Lomé, 1997).

En relación al teatro ha escrito Théâtre vessies pour lanternes. Antología de obras teatrales de 1985 al 2000 (Kuljaama, Editions 2005).

Algunas de las novelas que ha escrito son: La phalène des collines, (Editorial Le serpent à plume, 2002); Sahr, Champs de folie, (Kuljaama Editions-Vignaubières, 2010); Les Racines du Yucca (Editorial Phillipe Rey, 2011).


REGRESAR A LA REVISTA

Servicio de Suscripción
* requerido
*






Email Marketing by VerticalResponse