Rancho Las Voces: Festival Internacional Chihuahua / Gracia y belleza orientales, Sounds of Korea; reseña de J. Jiménez
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martes, septiembre 21, 2010

Festival Internacional Chihuahua / Gracia y belleza orientales, Sounds of Korea; reseña de J. Jiménez

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Intérprete del instrumento de cuerda Haegum durante la presentación. (Foto: JMV / RanchoNEWS)

Ciudad Juárez, Chihuahua. 20 de septiembre de 2010. (J. Jiménez / RanchoNEWS).- La gracia y belleza de sus danzas y los sonidos melancólicos se apropiaron del Centro Cultural Paso del Norte con la presentación de «Sounds of Korea», un espectáculo en que la Asociación de Artes Escénicas de Tradición Coreanas mostró parte de la esencia de su cultura.

Durante la velada el público tuvo la oportunidad de conocer un poco más de la herencia folclórica a través de nueve cuadros donde la música popular y los ceremoniales pertenecientes a la nobleza fueron recreados sobre el escenario.

Cuatro damas y un caballero, con instrumentos en mano dieron la bienvenida al público al interpretar música rítmica al son de las percusiones como el Changgo y Puk, ejecuciones que iban acompañadas por sencillas danzas.

Posteriormente se daría paso a la música de cámara donde el primer número consistía en un dueto de Haegum y Changgo, instrumentos propios de estas culturas que el primero podría decirse que es una especie de violoncelo pero en miniatura ya que se toca en posición vertical apoyado sobre la pierna izquierda y del cual su intérprete, una bella joven, dio cátedra pues fue maravilloso como cada movimiento de manos ejercía diversidad de tonalidades que envolvían los sentidos.

A continuación se añadieron dos instrumentos más, el Taegum y el Tanso, que son dos flautas, con las cuales nos remitían a esas películas orientales donde la música es también protagonista.

Luego, la fundadora del espectáculo la maestra She Yeon Park hizo acto de presencia para hacer una danza que se destacaba por los movimientos tan delicados y sutiles, en una completa armoniosidad de cuerpo y manos.

Los atuendos coloridos y perfectos fueron otros de los atractivos del espectáculo donde las damas los lucían con gran porte mientras ejecutaban sus respectivas danzas.

El número con el que se cerró el espectáculo implicó la utilización de grandes abanicos en un baile que implicaba mayor dinamismo y que era propio de los actos dedicados a la nobleza.

Después de recibir la ovación, la directora y fundadora de la asociación hizo una reverencia al público en señal de agradecimiento por haberlos acompañado por espacio de una hora que duró el espectáculo.

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