Gaetano Pesce, Sessel "Donna con bambino", 1969
MARTA RODRÍGUEZ BOSCH - 04/01/2006
B arcelona, España. 04/01/2006. (LA VANGUARDIA) Calificados por el propio Gaetano Pesce (La Spezia, Italia, 1939) como muebles en "transformación", la serie de asientos Up marca los inicios profesionales de uno de los creadores más influyentes en el panorama del diseño internacional durante los últimos 40 años. Creada a finales de los años 60, esta colección de voluptuosos asientos que se vendía empaquetada al vacío, al desenfundarse cobraba literalmente vida, creciendo hasta alcanzar su auténtica forma y volumen. Con este diseño Pesce convertía el acto de comprar una butaca en un happening. Puesta de nuevo en el mercado con éxito a principios del siglo XXI, esta serie (que ya no se comercializa con el espectacular sistema de desempaquetado) sigue resultando impactante. En especial la pieza estrella Up 5 I, con su perfil de gran regazo materno que evoca las figuras votivas prehistóricas de diosas de la fertilidad.
A partir de esa creación, la trayectoria profesional de Gaetano Pesce (diseñador, arquitecto y artista), ha despuntado en cada década por su carácter innovador tanto por el uso de materiales como tecnologías, lo que le ha valido que sus muebles formen parte de las colecciones permanentes de los museos más importantes del mundo, como el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMa), el Centro Georges Pompidou de París, el Victoria & Albert Museum de Londres o el Vitra Design Museum de Weil am Rhein.
En la década de los setenta, Pesce ya reflexionaba a través de sus creaciones sobre el derecho de los objetos a ser diferentes y no uniformes, igual que las personas. En la butaca Rag o la Sit Down, una funda acolchada reviste una estructura de madera y actúa como una matriz que toma cuerpo al rellenar con espuma de poliuretano. Esta novedosa construcción implicaba un ahorro, al suprimir los altos costes de montaje.
Pero además, debido a la naturaleza manual del proceso, permitía la posibilidad de realizar ligeras variaciones en cada asiento. Se trata de diseños a través de los que Pesce también cuestiona los cánones de belleza, considerándolos una manifestación de mentalidad totalitaria.
"Existen países -señala- cuyos sistemas democráticos o pluralistas contrastan fuertemente con la idea de una belleza monolítica y claramente definida. La creación de objetos que consienten errores y fallos es una reafirmación que reconoce que el ideal de belleza en este momento histórico corresponde a la vida cotidiana, con todas sus diferencias, contradicciones y transgresiones."
Para este creador, que desde 1980 se instaló a vivir en Nueva York, la auténtica innovación sólo se produce cuando se conjugan tres factores: nuevos lenguajes, nuevas técnicas y nuevos materiales. Con I Feltri Pesce explora las posibilidades de saturar planchas de fieltro con resinas para lograr estructuras textiles autoportantes. De la misma década son sus experimentos con resina de poliuretano de diferentes densidades. En piezas como Dalila o Prat se hace patente la relación ambigua entre arte y diseño introducida en los sistemas de producción industrial. Con estas creaciones de contornos derretidos, visualmente mórbidas pero realizadas con materias rígidas, defiende una relación con los objetos que nos rodean a través de todos los sentidos.
En los años 90 Pesce sigue inventado y concibe un asiento ligero, plegable y portátil, que se transforma de bastón de paseo con sólo apretar un botón, el Umbrella. Con la incorporación de muelles en las patas de la silla Broadway, que amortiguan golpes, logra una sensación deagradable de tambaleo, mientras que el uso de resina translúcida en el asiento y respaldo genera una inusitada ligereza visual.
Una exposición reúne ahora el trabajo de este creador, en un recorrido por nueve temas que ponen de relieve todos los aspectos que le han preocupado en el momento de dar vida a sus piezas: personalización de la serie, expresividad, nuevos materiales y lenguajes, feminidad y masculinidad, definición de belleza y malformaciones, diseño como expresión política y como dimensión religiosa, y participación de los sentidos.
Pesce ha creado una instalación exclusiva para la muestra denominada La estancia del tiempo, sobre la relatividad e inevitable subjetividad de nuestra relación con el tiempo. Mediante este enfoque no cronológico, donde se lleva a cabo una escenificación de su trabajo, se pretende conmover emocionalmente al visitante.
Gaetano Pesce reflexiona sobre el hecho que, desde el punto de vista moderno, el diseño se ha convertido en apolítico y su dimensión de expresión se basa únicamente en una serie de datos pragmáticos, relacionados con el uso adecuado de materiales y características funcionales.
No obstante, apostilla, "estoy seguro de que a comienzos del siglo XXI arquitectura y objetos volverán a recuperar la capacidad y el derecho de expresar la opinión política de cada autor y su modo de pensar, su origen e identidad".