La plaza principal de Jiménez, al fondo una torre del templo Santo Cristo de Burgos, cuya primera piedra fue colocada en 1804. (Foto: RMV / Rancho NEWS)
Ciudad Juárez, Chihuahua. 1 de julio de 2010. (RanchoNEWS).- Cuando llegué a Jiménez me recibió una llovizna que olía a paz rural. Había salido de Juárez a las 13:06 horas este jueves 10 de junio con la esperanza de llegar lo menos tarde posible al acto inaugural del Quinto Encuentro de Mujeres Poetas en Huejuquilla «Al Filo del Poema», en el que ahora convergía el Primer Encuentro Regional de Mujeres Poetas del Noreste.
Partía de Juárez después de casi una semana con temperaturas arriba de los 38 grados celsius y con el desgaste de soportar la dosis cotidiana de la violencia de la narcoguerra, que parecía perseguirme: en el camión de Ómnibus de México (con destino a Monterrey) un pasajero comenta la portada del periódico policiaco fronterizo PM que tiene en sus manos, lo mismo comentan los cocineros del establecimiento de Villa Ahumada donde consumo un burrito. En la portada un decapitado. ¿No son los mismos medios de comunicación cómplices de la barbarie? Pero claro, como vivimos en un sistema capitalista, el honor significa saber hacer dinero sin importar las consecuencias.
La felicidad retorna con el paisaje del viaje Juárez-Chihuahua que es capaz, en mi caso, de apaciguar cualquier mal sentimiento; y todavía mejor cuando a una hora de llegar a la ciudad de Chihuahua se vislumbra hacia el sur una extensísima formación nubosa que anticipa lluvia. Así fue. El resto del recorrido íbamos persiguiendo la lluvia por Chihuahua, por Camargo, hasta llegar a Jiménez, casi a las nueve de la noche, y ser recibido por esta ligera llovizna. Luego busco por sus calles, cargando mi mochila, el salón de la Asociación Ganadera, sede del evento.
Cuando entro está concluyendo la representación de Bemori del grupo Teatro Necrotono de la ciudad Chihuahua (en la que actúan Inet Simental, Wendy Domínguez y Melisa Baca), me he perdido también la conferencia «Independencia, Revolución y Expresión Femenina» a cargo de la maestra Dolores Castro (quien cambiaría la conferencia acerca de su vida y los tiempos en que conoció a Rosario Castellanos). Invitan a la actriz camarguense Evangelina Martínez a dirigir unas palabras a los asistentes, después el brindis que me da oportunidad de avisarle a mi amiga Edna Ojeda, la principal organizadora del evento junto con Olga Varela, de mi llegada; y saludar a mis amigas concurrentes.
Luego prosigue la cena en la Casona o la Casa de la Palmera, como es popularmente conocida, ubicada en la Calzada Juárez de altos álamos. La Casona merece, por su historia, un relato aparte. En síntesis es una edificación realizada entre 1908 y 1912, fue construida por Dr. Luis Estavillo Muñoz, un rosacruz como lo ostenta los símbolos que la adornan; después fue abandonada en tiempos de la Revolución. Francisco «Pancho» Villa la compra y en ella aloja a la familia de uno de los suyos muerto en un paredón. Son la madre y dos hijas, pero una de ellas se casa en secrecía con un carrancista y deviene un conflicto con el Centauro del Norte. Después fue propiedad del doctor Garza hasta que la compra la familia de Edna, según nos informa su madre la amable señora Leopoldina «Polita» Barrios de Ojeda.
Rumbo a la casa de campo de la nogalera, donde habremos de ser hospedados, Lilly Blake me cuenta sobre los antecedentes de los festivales de poesía en Chihuahua, que datan de finales de la década de los 80 del siglo pasado y que también merecen un relato aparte. Cuando llegamos Arminé Arjona me muestra el jardín de la casa. «Es un paraíso», le digo. Al día siguiente me entero que así precisamente le llaman al predio y a la casa que oficialmente se llama San Pedro. El olor de la noche es el olor de la nogalera más grande de Chihuahua recién humedecida por la llovizna.
Mis amigas, las poetas chihuahuenses, y el poblado han logrado el milagro. Le han devuelto la cabeza al decapitado y además, en los próximos dos días, le tejerán un collar de rosas blancas.
Viernes 11 de junio
Mesa de Chihuahua: (de izq. a der.) Lilly Blake, Carmen Julia Holguín, Margarita Muñoz y Arminé Arjona. (Foto: RMV / Rancho NEWS)
El partido del futbol entre la selección nacional de México y la de Sudáfrica, que inaugura el campeonato mundial, está en curso; mientras que 80 alumnos de secundaria, en su mayoría jovencitas, acuden a talleres sobre poesía impartidos por la maestra de secundaria Estela Guerra, de Temascalcingo, Estado de México; la maestra de secundaria jubilada María Elena Solórzano; Carmen Amato de Ciudad Juárez y Magdalena Guerrero del Estado de Morelos, Coahuila; Angélica Rodríguez Liscano Parras, Coahuila; y Elena Emma Fernández quien propone a los alumnos «vivir poéticamente».
En el salón de la Aosciación Ganadera se exponen fotografías de Héctor Jaramillo, Edna Gutiérrez, Rosario Segovia y Rosario Segovia Lizcano.
Al filo de mediodía se organiza la partida de varios grupos de poetas que habrán de leer en instituciones educativas y en la cárcel, a donde acompaño a Lilly Blake, Arminé Arjona, María Eugenia Rodríguez, Lidia Yépes (Monterrey), Cynthia Rodríguez Leija (Nuevo Laredo) y María Cristina Salas (Durango). Carmen Amato y Magdalena Guerrero arribarán después. El grupo es guiado por Luis Iván Carlos del Instituto Chihuahuense de Cultura (Ichicult).
«¿Cuánto tiempo estarán ahí?», pregunta el chofer de la camioneta cuando el grupo desciende. Le contesto: «Entre un año y medio y dos».
Ingresamos a la cárcel precedidos de un guardia que muy solícito va aromatizando el ambiente con un bote cilíndrico color rosa. Pasamos la aduana en la que se quedan mi cámara, grabadora de audio y mi teléfono. Nos llevan a un aula-taller de unos 5 x 15 metros, de paredes descarapeladas color amarillo, tiene un gran pizarrón, bajo el cual toman asiento en sillas de plástico once reos, que al rato se les unirán seis más. Al fondo, a través de dos ventanas enrejadas, se ve el patio del reclusorio.
Lilly, con su habitual inteligencia, se ha pintado en la mejilla tres franjas con los colores de la bandera, favor que les pidió a unos estudiantes. El detalle cumple el objetivo de romper el hielo y nos enteramos que la selección de México ha empatado a un gol, en un juego que –según los internos– el arbitraje no le fue favorable a nuestro equipo.
–¿A qué se debe el honor de su visita? –pregunta uno de ellos. Entonces Luis Iván Carlos se hace cargo de la presentación. Lidia Yépes inicia la lectura entre los metálicos ruidos de la cárcel y un gallo que canta.
Y la poesía obra su magia. Los hombres, jóvenes en su mayoría, escuchan cada palabra en respetuoso silencio, absortos. Al finalizar la lectura y cederles el uso de la palabra, uno de ellos solicita tímidamente una copia de un poema que Carmen Amato ha escrito sobre la violencia en Juárez. en seguida los demás también externan sus preferencias, las poetas les obsequian libros y Lilly rifa tres audiolibros suyos. Un reo, en su pobre manejo del idioma, les agradece y dice haberse sentido transformado. El grupo se despide, Lilly se queda con la última imagen. Brazos que salen entre las rejas.
Por la tarde se realiza propiamente el Encuentro Regional de Mujeres Poetas del Noreste, con Carmen Amato coordinando las mesas, en este orden:
Mesa1, Tamaulipas: Erika Said Izaguirre; Celeste Alba Iris (Ciudad Victoria); Marisol Vera, (Tampico); Cynthia Rodríguez Leija (Nuevo Laredo). Mesa 2, Nuevo León: Laura Fernández, María Elena Rodríguez, Lupita Pérez y Lucía Yépez. Mesa 3, Coahuila: Adriana Meza, (Monclova); Rocío Ivonne Ramírez (Torreón) y María Luisa Iglesias (en lectura). Mesa 4, Durango: Lidia Acevedo; Socorro Soto (Durango); María Cristina Salas (Durango); Leticia Salazar. Mesa 5, Chihuahua: Arminé Arjona (Juárez); Margarita Muñoz (Chihuahua); Carmen Julia Holguín (Parral); y Lilly Blake (Chihuahua).
El día concluye con el monólogo La danza de las mutaciones a cargo de la actriz Inet Simental del grupo Teatro Necrotono. La obra intercala una exposisión del credo artístico del grupo con ejercicios de actuación, de mucho rigor y dificultad, que la actriz cumple con gran profesionalismo.
Sábado 12 de junio
Lluvia de poemas. (Foto: RMV / Rancho NEWS)
Estamos en la plaza principal de Jiménez, donde destaca el templo de Santo Cristo de Burgos, cuya primera piedra fue colocada el 22 de marzo de 1804. Ya han sido instalados los tendederos donde penden poemas escritos en tela por las visitantes. A una niña le gusta uno que dice «Para esta lluvia de balas, un arco iris de paz», y conocerá a la autora: Arminé Arjona.
Se vive un ambiente de fiesta. Sobre un templete el señor José Silva («De nuestra gente que canta», me dice Edna) interpreta canciones populares mexicanas y comienza con una de Javier Solís.
Encuentro a José Luis Domínguez, el poeta de Cuauhtémoc, y le felicito por su poemario «El amor destruye lo que inventa» que bastante me gustó y converso un buen rato con él, que ha venido al cierre del encuentro.
Edna toma el micrófono y anuncia una sorpresa. Minutos después una avioneta vuela sobre nosotros, tripulada por el Chato Abe, y envía por cuatro ocasiones una lluvia de poemas impresos. Entonces tanto Lilly como Arminé se transforman en niñas terribles y empiezan a contender por los poemas con los más ágiles niños verdaderos.
Después de la comida el programa continúa con el monólogo Arroz rojo, de Estela Leñero, actuado por Evangelina Martínez, quien demostrando su vasta experiencia en este oficio, particularmente en las improvisaciones y diálogos con el público, se gana un fuerte aplauso.
Luego sigue la presentación del libro Transgresión femenina: Estudios sobre quince escritoras mexicanas (1900-1946), de Patricia Rosas Lopategui, a cargo de Margarita Muñoz, Sandra Montoya y Carmen Julia Holguín, quienes combinaron sus intervenciones con lecturas del texto. Esta edición de la revista incluye el texto leído por Margarita. Después vino la presentación de la antología Agualluvia - 50 años de poesía femenina chihuahuense de Federico Corral Vallejo, quien tras unas palabras invitó a leer a las poetas antalogadas presentes; y leyeron Edna Ojeda, Arminé Arjona, María Merced Nájera Migoni, Carmen Julia Holguín, Lilly Blake, Carmen Amato, Susana Flores, María Elena Solórzano, Margarita Muñoz y Tita Bilbao.
Arminé Arjona coordinaría una Mesa 2 de Chihuahua, con la participación de América Zapata, Faridy Bujaidar y Lily Poveda. Después Lety Luna, de la Ciudad de México, ofrecería una erudita conferencia sobre literatura femenina mexicana. Lilly Blake conduce la mesa de la Ciudad de México y el Estado de México con la presencia de Estela Guerra, María Eugenia Rodríguez, Magdalena Guerrero y Lety Luna.
Luego la fascinante conferencia de Yamelí Paz Paredes que nos comparte inolvidables episodios de su infancia como cuando visitó su casa el poeta cubano Nicolás Guillén y ella y su hermano lo recibieron recitándole una buena cantidad de sus poemas.
La maestra Dolores Castro se dispone a leer, a su izquierda Minerva Salado y a la derecha Yamilé Paz Paredes. (Foto: RMV / Rancho NEWS)
Y llegamos a la mesa final con la poeta cubana Minerva Salado, Yamilé Paz Paredes y doña Dolores Castro, quien no obstante su avanzada edad y su delicada salud, se empeñó en leer un largo poema de cerca de diez minutos de duración, cuyo audio reproducimos felizmente junto con toda su participación en esta edición.
Fue un cierre de Encuentro muy emotivo precedido por la poesía de Yamilé, que al igual que «Al Filo del Poema», han llegado a una madurez espléndida.
Galería fotográfica
Lectura de Dolores Castro 1
Lectura de Dolores Castro 2
Lectura de Dolores Castro 3
«Tras la huella de tu semen» de Yamilé Paz Paredes
«Transgresión femenina», texto de Margarita Muñoz
Crónica de Margarita Muñoz
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