El embajador Felice Scauso (al centro), durante la firma del convenio. (Foto: Javier García)M éxico, 6 de noviembre, 2007. (Jesús Alejo/Milenio).- La Feria Internacional del Libro de Guadalajara todavía no comienza en su edición de 2007 —se llevará a cabo del 24 de noviembre al 2 de diciembre— y ya se encuentra listo el que será el país invitado de honor para el próximo año: Italia, que se convierte en el primer país europeo de habla no española en mostrar su cultura y su industria editorial en la capital de Jalisco.
Durante una breve ceremonia para formalizar su presencia —con la firma del convenio de colaboración—, el embajador de Italia en México, Felice Scauso, habló de la importancia que tendrá el encuentro editorial como vitrina de la cultura italiana, no sólo la que se refiere a su pasado, «sino también en lo que hoy representa como cultura y sus aportes al mundo contemporáneo».
Y agregó: «Espero que la presencia italiana sirva para llenar los vacíos entre ambos países, porque parece que se sabe mucho de Italia, pero en realidad no hay un conocimiento recíproco como los merecerían dos países con gran cultura y de origen común».
Si bien ya se había invitado a la región francófona de Canadá, Québec, como región invitada de honor de la feria del libro, se trata del primer país europeo que estará presente en Guadalajara sin que el español sea su lengua, lo que esperan los organizadores se convierta en una puerta de la FIL a Europa.
Para Raúl Padilla López, presidente del comité organizador de la FIL-Guadalajara, resultaba muy importante tener a Italia, en su calidad de cuna y cúspide de la civilización occidental. «Sentimos una doble satisfacción porque entre las editoriales de lengua no española, la que por mucho recoge más a nuestros autores son, precisamente, las editoriales italianas».
Falta el intercambio
Nubia Macías, directora de la feria, hizo hincapié en la importancia de iniciar un intercambio cultural con Italia a través de la FIL, como el comienzo de una nueva relación, que se fundamenta en el hecho de que la industria editorial italiana ve a Guadalajara como un puente para trabajar con todo el continente americano.
«Ellos se sienten frustrados porque sus libros y sus autores no están penetrando. Por eso quieren venir, para que sus autores sean conocidos en el resto del continente.»
En su edición de 2007, la Feria Internacional del Libro de Guadalajara repite como país invitado de honor a Colombia, si bien varios países no han participado, como las naciones centroamericanas o Paraguay y Uruguay, lo que se debe, a decir de Raúl Padilla, porque asistir a «Guadalajara implica un desembarco no menor.»
«No es sencillo hacer la invitación a un país con poca densidad demográfica, por lo que hemos pensado para el futuro en una presencia colectiva». Francia había sido contemplada en el pasado como una opción para ser el invitado de la feria en el 2008, pero con Italia sintieron una mayor coincidencia en intereses culturales, hasta por la misma cercanía del idioma, siendo el reto conseguir que se muestre a los más de 500 mil asistentes al encuentro, la gran diversidad cultural de Italia, como uno de las comunidades líderes en la cultura europea.
«Se trata de un nuevo perfil de la feria de Guadalajara hacia lo multicultural y lo multirregional. Habiendo tenido a la mayor parte de los países de lengua hispana como invitados de honor, Italia se convierte en la puerta de entrada al resto de Europa y da la pauta para destacar su vocación multicultural».
REGRESAR A LA REVISTA
