Compañía Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, 1910. Reproducción: Museo Estudio Casa Diego Rivera. (Foto:Archivo) M éxico, 26 de Marzo 2007. (Leticia Sánchez/Milenio).- Guillermo Kahlo Kaufmann (Pforzheim, 1872-Ciudad de México, 1941) fue el primer fotógrafo oficial contratado durante el porfiriato para realizar un inventario de los edificios civiles en plena construcción a principios del siglo XX, y de los inmuebles religiosos que estaban en poder del gobierno federal, tras el triunfo republicano.
El creador realizó centenares de fotografías de un país que lo acogió en 1891, con la encomienda de mostrar una imagen positiva del México gobernado por Porfirio Díaz, y es ese el espíritu que se muestra en la exposición Guillermo Kahlo. De oficio fotógrafo, que se inaugura hoy en el Museo Nacional de San Carlos.
Kahlo, el padre de la famosa pintora Frida Kahlo, fue contratado en 1904 por José Ives Limantour, quien se desempeñaba como ministro de Hacienda en aquella época, con el propósito de difundir la visión positiva de México que el Presidente Porfirio Díaz anhelaba.
Mucho de su material está desaparecido o en manos de coleccionistas privados, pero también es cierto que gran parte de su trabajo se preserva en la Fototeca Nacional de Pachuca y el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo.
Ahora que está en puerta la celebración del Fórum de las Culturas en Monterrey, el Museo de San Carlos muestra algunas de las placas tomadas de 1909 a 1910 por Guillermo Kahlo, a solicitud de Carlos Prieto dueño de la Compañía Fundidora.
Las imágenes que se exhibirán —en el marco del XXI Festival de México en el Centro Histórico dedicado al centenario del natalicio de Frida Kahlo y el cincuentenario del fallecimiento de Diego Rivera—, dan cuenta de algunas de las estructuras metálicas que eran construidas por esa empresa, además de una serie de fotografías extraordinarias que le indican al espectador de hoy en día, cómo era esa fábrica, el conjunto de esas tomas integran el álbum Compañía Fundidora de Fierro Acero de Monterrey,S.A.
En esta búsqueda Guadalupe Ruiz, curadora de la exposición Guillermo Kahlo. De oficio fotógrafo, se encontró con una gran imagen que sale totalmente de la temática manejada por el fotógrafo de origen alemán; se trata de un retrato de un Ensamble musical integrado por tres pares de músicos. Este hallazgo se realizó en el Archivo General de la Nación, “desgraciadamente la política de ellos es que no prestan obra, aunque te dan la oportunidad de realizar una reproducción fotográfica”.
Kahlo se dedicó a tomar fotografías de la Ciudad de México y las integraba en pequeñas carpetas, fue entonces hizo un álbum con puras imágenes del paisaje de Chapultepec. “Los visitantes del bosque, cabe aclarar aparecen como un pequeño detalle, no hay retrato de las personas. Pero las fotos son muy lindas porque te remiten a esta idea del costumbrismo del siglo XIX, e incluso a algunas de las pinturas que hicieron los impresionistas”, precisa Ruiz.
Kahlo fue uno de los artífices de todos los eventos y preparación que hubo para organizar las fiestas del Centenario de la Independencia de 1910. El tuvo a su cargo hacer el registro de la construcción del edificio de Correos, del Palacio de Bellas Artes, de la cimentación de la Columna de la Independencia.
“Con su lente captó el proceso constructivo de la Ciudad de principios del siglo XX, por eso al mostrar estas imágenes ahora en el Museo de San Carlos, estamos siendo precursores”, dice Lupita Ruiz, curadora de la exhibición.
Se incorporó al equipo que comandó los preparativos del Centenario de la Independencia, lo hizo apoyado de su cámara, logró difundir a través de la fotografía, que finalmente es un medio de comunicación, un documento histórico, es decir, la imagen del progreso que se vendió a los inversionistas, según los postulados del propio Porfirio Díaz.
A pesar de que su gusto por el retrato era menor, porque en su opinión “no quería mejorar lo que Dios había hecho naturalmente feo”, Juan Coronel publicó en el catálogo de la exposición realizada en 1993 por el Museo estudio Diego Rivera, en torno a Guillermo Kahlo, su acervo fotógrafo que asciende a 300 retratos. De ahí las imágenes que hiciera de Porfirio Díaz y de Venustiano Carranza.
La realidad, aclara Ruiz, es que las imágenes de Kahlo parten de la historia de aquellos años. Es un hombre que padece la Revolución Mexicana porque se le derrumba el ideal de país que había comprado y vendido por medio de sus placas. Su auge como creador cae con el inicio de la revuelta social. Deja de producir a consecuencia de la inseguridad y de la depresión en la que cae.
La muestra permanecerá montada hasta el 23 de abril en el Museo de San Carlos, en Puente de Alvarado número 50. Colonia Tabacalera.
REGRESAR A LA REVISTA
