Rancho Las Voces: Arqueología / México: La escultura azteca era policroma
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lunes, diciembre 28, 2009

Arqueología / México: La escultura azteca era policroma

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La Piedra del Sol. (Foto: Epa)

C iudad Juárez, Chihuahua. 14 de diciembre de 2009. (RanchoNEWS).- Expertos de México, Italia y EE.UU. descubren policromía prehispánica azteca, informa desde la capital del país la agencia EFE:

Expertos de varios países descubrieron que esculturas emblemáticas de los aztecas como la Piedra del Sol, la Coyolxauhqui, el Chacmool, la Tlaltecuhtli fueron pintadas con pigmentos rojo, ocre, azul, blanco y negro, lo que confirma que era una arte policromo, al igual que la escultura griega y romana.

El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) indicó en un comunicado hoy que investigadores mexicanos, italianos y estadounidenses lograron esclarecer mediante un análisis cuidadoso y con tecnología de punta, qué tipo de pigmentos fueron usados por artistas aztecas a finales del siglo XV y a principios del XVI.

«Un equipo interdisciplinario de alto nivel, compuesto por arqueólogos, restauradores, geólogos y químicos, emprendió una serie de análisis especializados con tecnología de punta, tanto en México como en Estados Unidos», señaló el arqueólogo Leonardo López.

La Piedra del Sol y la Coyolxauhqui son dos de los más conocidos monolitos aztecas y representativos de la cosmovisión de esta cultura.

El arqueólogo precisó que los especialistas analizaron diversos vestigios de pigmentos ocultos en los poros de estas esculturas y lograron determinar la naturaleza de los pigmentos, sus aglutinantes, sus técnicas pictóricas, y los simbolismos de la policromía mexica.

López explicó que tanto en el Museo Nacional de Antropología como la Zona Arqueológica y el Museo del Templo Mayor existen numerosas piezas escultóricas que conservan vestigios de su pintura original, a partir de los cuales se han podido llevar a cabo estudios especializados.

Agregó que, por ejemplo, la Piedra del Sol, fue limpiada y analizada en 2000 y pese a que se mantuvo a la intemperie durante casi un siglo, los restauradores del INAH, dirigidos por Mari Carmen Castro, lograron detectar en los poros de la piedra restos de pigmentos rojo y ocre.

Asimismo, otro equipo dirigido por Fernando Carrizosa, encontró también restos semejantes en la Coyolxauhqui, con los cinco pigmentos citados.

Añadió que otras investigaciones han confirmado que la paleta de los aztecas se limitaba precisamente a estos cinco colores, y que «nunca utilizaron el café, el rosa o el verde en la escultura ni en la pintura mural».

Finalmente, indicó que se hicieron estudios más completos en el monolito de la diosa Tlaltecuhtli, descubierto en 2006, en el centro histórico del Distrito Federal el cual tenía una capa pictórica en un magnifico estado de conservación.

López resaltó que los escultores mexicas usaron fundamentalmente rocas volcánicas como el basalto, la andesita y el tezontle, las cuales tienen por naturaleza tonos negruzcos, grisáceos, violáceos y rosáceos.

El experto adelantó que los principales resultados de estas investigaciones se darán a conocer próximamente al público en la revista Arqueología Mexicana, y en los libros Monte Sagrado-Templo Mayor y Escultura monumental mexica.


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