C iudad Juárez, Chihuahua. 30 de octubre de 2014. (RanchoNEWS / Rubén Moreno Valenzuela).- «De acuerdo a Germán Palomares, este festival se encuentra ya entre los tres mejores del país», anunció Gerry López, el gran director y saxofonista juarense, casi a la mitad del concierto del debut de la Orquesta de Jazz de Ciudad Juárez (OJCJ).
La participación en esta cuarta edición de Óscar Stagnaro, Seamus Blake Quartet, Kurt Rosenwinkel New Quartet, Nir Felder, Aaron Goldberg Trio, Pete Rodríguez Quintet, Hekselman / Klampanis / Nandayapa y el mismo Gerry López, seguramente influyeron para que Palomares, considerado uno de los más reconocidos expertos mexicanos en jazz, emitiera tan favorable juicio para un festival tan joven.
El evento
El festival, realizado entre el 19 y el 26 de octubre, constó de 29 recitales en tres sedes. Se presentaron 18 grupos en Chihuahua, 8 en Ciudad Juárez y 3 en Parral. Hubo 15 talleres en Chihuahua (incluyendo la clase magistral de Óscar Stagnaro y de Aaron Goldberg); 6 talleres en Ciudad Juárez (incluyendo otra clase magistral de Óscar Stagnaro).
En la capital del estado los conciertos se realizaron en la Plaza de Armas (4), en el Teatro de los Héroes (2), en el Teatro de Cámara Fernando Saavedra, en el Paraninfo de la UACh y en Palacio de Gobierno (1 respectivamente).
Mientras que en Ciudad Juárez hubo 4 conciertos en el Teatro Rascón Banda y 4 en el Teatro Experimental del Centro Cultural Paso del Norte. En tanto que en Parral todos los conciertos fueron en el Palacio Alvarado. El reporte general es que hubo muy buena asistencia en las tres sedes.
Para quienes desconozcan la geografía chihuahuense basta decir que la distancia entre esta frontera e Hidalgo del Parral son alrededor de 8 horas en carretera, y que Chihuahua queda a la mitad de ambas poblaciones, con lo cual se puede comprender el esfuerzo que implicó para algunos músicos, como el propio Gerry López, quien el 24 estuvo en concierto con su cuarteto en Parral y el 26 ya estaba de regreso en Juárez alrededor del mediodía para el ensayo final de la recién formada OJCJ antes de su concierto esa noche.
Orquesta de Jazz de Ciudad Juárez
Comenzamos esta reseña con la presentación de la OJCJ por toda su trascendecia y la emoción que suscita a este cronista.
No obstante que los recitales de los grupos de Óscar Stagnaro, Kurt Rosenwinkel y de Gilad Hekselman fueron brillantes, así como muy buenas fueron las participaciones de los grupos mexicanos; este concierto de la OJCJ –de entrada– tiene la característica peculiar de haber sido compartido por más de mil personas.
Con este dato regresamos al tema de la trascendencia: el domingo 26 de octubre fue la primera ocasión que yo tenga memoria, que una cantidad tan significativa de personas acudieron a un concierto de jazz de un conjunto local.
Como una premonición de lo que veríamos un niño del público de cerca de 10 años se subió sin permiso al escenario e interpretó una breve melodía en el piano, tal vez enseñada por algún instructor del instrumento. Su audacia fue gratamente aplaudida por la concurrencia.
Entonces llegó Gerry y presentó a la orquesta.
Sección de Sax: Mario Trejo, Daniel Rivera, Alfredo Flores, Gabriel Balderas y Víctor Méndes. Trompetas: Jaime Mata, A. Plaza y Juan Carlos García. Trombones: Rafa Mendoza y Roberto Beltrán.
Bajo: Iván «El Ganso» López. Guitarra eléctrica: Azael Martínez. Piano: Mike Rodríguez. Baterista: Daniel Jurado. Vocalista: Kenia N. Miranda.
Quince músicos en total bajo la dirección de este muy talentoso joven de 26 años, llamado Gerry López, quien a su edad ya conoce las principales capitales europeas donde ha sido invitado dar conciertos o compartirlos. Premio nacional de Jazz en Francia 2012 y Premio de Jazz de París en 2013.
Todos los músicos visten camisas blancas, trajes y corbatas negras. El único que no está uniformado es el director.
La noche comenzó con la legendaria melodía «Bye bye blackbird» (1926), después continuó con «Prelude to a kiss» (1938) de Duke Ellington.
Enseguida el director hizo un homenaje al saxofonista veracruzano Fortunato Pérez, de larga y fructífera residencia en esta ciudad, a quien llamó al escenario para que se dirigiera al público y después la OJCJ interpretó, de su autoría, el tema «El duende y el arlequín».
La siguiente pieza fue una composición del propio Gerry López, la cual no había titulado todavía y estaba entre la disyuntiva de nombrarla «Burrito Blues» o «Juárez blues», para lo cual solicitaría la opinión del público, siendo que los músicos se inclinaban por preferir la primera opción. La composición de López es muy buena y está dotada de una gran energía.
Memorable es también que invitó en esa pieza a tocar a Andrick Fierro, un saxofonista de doce años, quien se comportó como todo un profesional cuando fue demandado para que ofreciera solos.
Después de dedicar una canción para su padre, continuó con «Dos gardenias para ti», de Isolina Carrillo en un arreglo exclusivo para saxofones.
Enseguida invitó a Kenia Miranda, una vocalista impresionante –por algo fue la seleccionada entre 16 concursantes por el puesto en la orquesta– para interpretar «Alfonsina y el mar».
Siguió una composición de Thelonius Monk. La noche concluyó con el encore en el cual repitieron la composición de Gerry López, la cual, refrendada con aplausos, quedó bautizada como «Juárez Blues».
Y mil corazones se pusieron en pie para darles las gracias.
Óscar Stagnaro y su jazz latinoamericano
No jazz latino, una soberbia muestra de jazz latinoamericano ofreció Óscar Stagnaro y su grupo integrado por Samuel Torres (Puerto Rico) en las congas y otras percusiones, Louis Godwin (Haití) saxofón y clarinete, Manuel Alejandro Varela (Cuba) en el piano; y Joel Mateos Ramos (Colombia) en la batería.
Óscar Stagnaro manifiestó su virtuosismo, como músico y como bajista, y el prestigio que implica ser profesor del Berklee Collage of Music desde 1987.
En siete piezas, que se fueron como el agua, nos instalamos en este género del jazz que sobrepasa el jazz latino porque considera influencias musicales de Sudamérica, como en el caso de la música proveniente de la tierra de Stagnaro: Perú.
El bajista dijo que se sentía súper contento de estar en la ciudad, dijo que «tienen mucha suerte por un festival como éste y que ojalá otras ciudades de América Latina pudieran tener un festival como el de ustedes».
Kurt Rosenwinkel New Quartet, entre Gillespie y Zappa
Kurt Rosenwinkel vino a confirmar la fama que le precedía como uno de los más poderosos guitarristas contemporáneos de jazz .
En compañia de Aaron Goldberg (piano), Orlando Le Fleming (bajo) y Allan Medrard (batería), dieron una lección de elegancia, técnica y energía.
Comenzaron con su versión de «A night in Tunisia» de Dizzie Gilliespie y después estábamos escuchando música cuyo más próximo referente sería Frank Zappa.
Hekselman / Klampanis / Nandayapa y la música global
Glad Hekselman, guitarrista israelí, Petros Kamplanis, bajista griego y Gustavo Nandayapa, baterista mexicano, son un muy buen ejemplo de una vertiente del jazz relacionada con un esfuerzo estético «globalizado», en el mejor sentido de la palabra. Ellos mismos admitieron que se habían reunido para un particular tour por México.
El resultado de esta fusión judeo-griega-mexicana es una finísima música que se deja llevar por el Free Jazz y también revela la influencia de Path Metheny, lo cual es mucho decir.
Le Petit Band y la música mexicana según el Dr. Jazz
Prometieron un viaje por la música tradicional y contemporánea mexicana; y lo cumplieron.
La Petit Band, el proyecto que comanda el baterista juarense Karlo Mireles (uno de los propiciadores, por sus relaciones en la escena jazzística internacional, de la calidad artística del festival); integrado por Miguel Rodríguez (piano), Juan Ramos (bajo), Lizeth Cárdenas (vocalista); y con la participación de las hermanas Claudia y Angélica Zenteno, con Guillermo Méndez, en la marimba; cumplieron con creces su cometido.
Desde una versión de una canción de cuna azteca hasta «La Llorona» y «La Zandunga», estas dos últimas acompañadas por la marimba, el recital transcurrió con piezas de María Grever («Cuando vuelva a tu lado»), Rubén Fuentes («La Bikina») y Agustín Lara con la pieza «Piensa en mí», interpretada a dúo por Lizeth Cáredenas y Juan Ramos, Se incluyó así mismo un danzón contemporáneo.
El desempeño de Juan Ramos y Karlo Mireles sobresalió por su profesionalismo, en particular el baterista quien ofreció una espléndida gama de matices y emociones con su instrumento gracias al sabio empleo de baquetas, escobillas y mazas.
La luz de Luz Varela
Luz Varela, la vocalista y compositora de jazz mexicana, ofreció un recital compartido con el Grupo de Jazz de la UACJ, integrado por Fortunato Pérez (sax), Jesús Rodríguez (piano), Azael Martínez (guitarra eléctrica), Iván López (bajo) y Karlo Mireles (batería y dirección); el cual se llevó a cabo el 20 de octubre en el Teatro Experimental del Centro Cultural paso del Norte de Ciudad Juárez.
Luz compartió la dulzura de su voz en composiciones propias como «My dream» y «Going home»; mientras que el grupo destacó con la composición de Azael Martínez titulada «Pájaro verde».
Luz Varela tuvo dos momentos relevantes cuando interpretó el bolero «Cuando vuelva a tu lado»; pero especialmente con el blues –un demoledor blues– «Don't worry about me»; con el cual expuso la profundidad que puede llegar su sensibilidad.
Fue lamentable que por un detalle técnico, no pudo ser apreciada con plenitud la calidad de su voz.
Colofón: En la esquina
El festival concluye con un inicio, pues ha generado un nuevo lugar en la ciudad dedicado al jazz, denominado Jazz Corner, ubicado en la calle Mejía a dos cuadras al este de Las Américas, donde algunos de los músicos que han concurrido al festival, y que aquí han venido a tocar una vez finalizadas sus presentaciones, han dejado sobre una pared blanca tanto firmas y como mensajes.
La noche del 26 de octubre no es la excepción y el espacio es insuficiente para dar cabida a una gran parte de los músicos de la OJCJ, que han llegado a festejar con música, el éxito del recital. El ambiente es festivo y el pequeño sitio se ve colmado por la asistencia.
El equipo de producción también está satisfecho. El maestro Ramón Chavira Chavira, director General de Difusión Cultural y Divulgación Científica de la UACJ, conversa con Ileana García Luján, quien tuvo a su cargo la buena iluminación de los recitales en los teatros del Centro Cultural Paso del Norte.
De regreso a casa un amigo me comenta: «Juárez parece otra ciudad, se siente». Y he venido pensando en eso hasta este momento en que concluyo estas líneas; y sí, se siente que Juárez es la misma y es otra, una ciudad capaz de generar su propia orquesta de jazz, compuesta por talentos locales, entre ellos su joven director que por estos días debe estar en una gira en Suiza.
El Programa
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