La directora Ildikó Enyedi, con el Oso de Oro ganado por On Body and Soul . (Foto: Pool Reuters)
C iudad Juárez, Chihuahua. 19 de febrero de 2017. (RanchoNEWS).- La húngara On Body and Soul, de la directora Ildikó Enyedi, convenció a unos y a otros en la 67ª Berlinale. Al jurado, que le concedió el Oso de Oro a la mejor película de la competición. A los críticos, que le dieron el galardón FIPRESCI a mejor filme. No había mucho más de dónde elegir en la sección principal de un festival que ha visto bajar su nivel en este apartado, aunque aún mantiene su firmeza en el resto de las secciones y su capacidad para mostrar lo mejor del cine de autor mundial y de los documentales de la temporada cinematográfica de invierno. El jurado, presidido por Paul Verhoeven, repartió con criterio osos para el resto de las películas con calidad. Las otras dos que más habían llamado la atención en los 10 días del certamen, la chilena Una mujer fantástica y la finlandesa The Other Side of Hope, no se fueron de vacío. Para la primera fue el premio al mejor guion, obra de su director, Sebastián Lelio, y de Gonzalo Maza, que hicieron subir al escenario a su protagonista, la actriz transexual Daniela Vega. Desde el patio de butacas y sin subir al escenario, genio y figura, el finés Aki Kaurismäki agradeció el Oso de Plata a la mejor dirección, una recompensa menor para uno de los grandes del cine europeo de los últimos 25 años, y que sigue sin llevarse el máximo premio en un festival de serie A. Reporta desde Berlín para El País Grregorio Belinchón.
On Body and Soul desarrolla una curiosa y especial historia de amor entre una recién llegada a un matadero en Budapest, una mujer meticulosa con su trabajo, y el maduro director de la factoría. La relación se estrecha cuando descubre que por la noche comparten los mismos sueños -de ahí las secuencias más bellas del filme, protagonizadas por unos ciervos- y un especial sentido del humor. Enyedi era una artista conceptual y volcada en la videocreación hasta que a mediados de los ochenta se pasó al cine más convencional de ficción, convirtiéndose en figura prominente de la cinematografía húngara.
La debutante catalana Carla Simón, la directora de Verano 1993, obtuvo un gran triunfo con su galardón a mejor opera prima vista en cualquier sección del certamen, que se sumaba a un premio ex aequo del jurado recibido por la mañana en el palmarés de su sección, Generation Kplus. Este drama autobiográfico agotó las entradas en todas sus sesiones y por su fuerza y calidad está llamado a ser una de las películas españolas del año.
El Gran Premio del Jurado fue para la senegalesa Félicité, de Alain Gomis, un trofeo que parece alabar más las intenciones que el resultado. Lo mismo podría decirse del Oso de Plata Premio Alfred Bauer por su capacidad de abrir nuevas perspectivas para Pokot, de la polaca Agnieszka Holland. Los osos a las mejores interpretaciones fueron para el alemán Georg Friedrich, por Helle Nächte, y la coreana Kim Minhee, por On the Beach at Night Alone, de Hong Sangsoo, que ya presentó una película en San Sebastián, ha estado con esta nueva en el certamen de la capital alemana y estrenará nuevo filme en Cannes. Minhee se come la pantalla en un drama sentimental que en cierta manera también habla de su relación sentimental real con el director. Finalmente, el Oso de Plata a la mejor contribución para Dana Bunescu, por su montaje de la rumana Ana, mon amour!
El premio al mejor documental recayó en el estupendo y durísimo Istiyad Ashbah, del palestino Raed Andoni. El cine portugués, que estos días libra una batalla ante el cambio del Gobierno de las reglas de la legislación cinematográfica, se llevó el Oso de Oro al mejor corto para Cidade pequena, de Diogo Costa Amarante.
Palmarés
Oso de Oro: On body and soul, de Ildikó Enyedi (Hungría).
Gran Premio del Jurado: Félicité, de Alain Gomis (Senegal).
Oso de Plata Premio Alfred Bauer: Pokot, de Agnieszka Holland (Polonia).
Oso de Plata a la mejor dirección: Aki Kaurismäki, por The Other Side of Hope (Finlandia).
Oso de Plata al mejor actor: Georg Friedrich, por Helle Nächte (Alemania).
Oso de Plata a la mejor actriz: Kim Minhee, por On the beach at night alone (Corea del Sur).
Mejor guion: Sebastián Lelio y Gonzalo Maza, por Una mujer fantástica (Chile).
Oso de Plata a mejor contribución artística: para Dana Bunescu, montadora de Ana, mon Amour! (Rumania).
Premio FIPRESCI: On body and soul, de Ildikó Enyedi (Hungría).
Mejor opera prima: Verano 1993, de Carla Simón (España).
Mejor documental: Istiyad Ashbah, de Raed Andoni (Palestina)
Oso de Oro al mejor corto: Cidade pequena, de Diogo Costa Amarante (Portugal).
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