Rancho Las Voces: Textos / «Tito cumple cien años» por Gerardo de la Cruz
La vigencia de Joan Manuel Serrat / 18

lunes, enero 03, 2022

Textos / «Tito cumple cien años» por Gerardo de la Cruz

Ilustración a partir de un retrato de Augusto Monterroso (Ilustración: Ismael F. Mira, La Razón)

C iudad Juárez, Chihuahua. 17 de diciembre de 2021. (RanchoNEWS).- ¿Cómo llegué a Augusto Monterroso? Tal vez por «El dinosaurio» o por alguna hermosa portada de Vicente Rojo, o por Lo demás es silencio, artefacto literario que para mí fue un salto al vacío. No recuerdo. Sin embargo sé que nunca lo conocí porque nadie me lo presentó y yo nunca me le apersoné y, hasta donde se sabe, no hay fotos que demuestren lo contrario. Pero sé que lo sigo conociendo, no porque lo lea insistentemente y encuentre el significado de la vida en sus fábulas —aunque podría hallarlo—, sino porque ahora que cumple cien años y debí dedicarle unas líneas, fue como encontrarme con un viejo y querido amigo, de los que nunca ves pero sabes que están ahí para todo, como suele ocurrir con los libros que amamos. Volver a leerlo significó regresar a aquellos días juveniles en que uno era capaz de sorprenderse por la literatura. Pero como esto no se trata de mí sino de Tito, he pensado que lo mejor sería que el maestro Eduardo Torres, director del suplemento literario de El Heraldo de San Blas, de San Blas, S. B., que conoce tan bien a Monterroso, lo presente, y en relajada asamblea de animales... quiero decir, ¡de escritores!, recordemos a este humorista voluntario que nos mostró una literatura llena de lecciones sin moraleja.

Augusto Monterroso dio a conocer a nuestro querido San Blas, S. B., y con minuciosa generosidad que me parece suficientemente pagada, difundió buena parte de mi obra por aquí y por allá hasta quedar lo que se lee en Lo demás es silencio, libro que por razones ajenas a mi entendimiento dan por tildarlo de novela. Luego murió y las ocurrencias samblasenses se quedaron para siempre en El Heraldo de San Blas. Nada hay que lamentar pues lo que tenía que decirse entonces se dijo hasta agotar el tintero.

El texto de Gerardo de la Cruz lo publica el suplemento El Cultural de La Razón