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Actuación del grupo Café Tacvba anoche en la sala Joy Eslava de Madrid. (Foto: Samuel Sánchez)
C iudad Juárez, Chihuahua, 8 de enero, 2008. (RanchoNEWS).- El grupo mexicano, que celebra aniversario, vuelve a fascinar en Madrid. Una nota de Diego A. Manrique para El País:
Una visita breve: Café Tacvba ha regresado a España para tocar en el Actual riojano y en Madrid. Son los últimos coletazos de la gira correspondiente a su disco de 2007, Sino, y se aprecian el cansancio e incluso el sobresalto ante el rigor invernal: «Estábamos mal acostumbrados con eso de venir a festivales de verano».
Hoy cuesta hablar de festejos, pero Rubén Albarrán, Emmanuel del Real y los hermanos Joselo y Quique Rangel ya andan maquinando las celebraciones de sus 20 años en activo: «Habrá un documental y un par de libros. Y conciertos especiales en las 20 ciudades más receptivas para nuestra música, desde Santiago de Chile a Chicago».
Deberíamos decir «músicas», en plural. Café Tacvba ha lanzado desde electrónica áspera hasta rancheras. Ya han prescindido del violinista Alejandro Flores, que aportaba los sonidos más rurales:«Ahora hacemos puro rock, que también tiene sus recompensas». Pero simpatizan con los núcleos creativos latinoamericanos que optaron por nacionalizar el rock: «Participamos en un disco de homenaje a Os Mutantes, aquellos locos brasileros. Y también estamos implicados en un proyecto audiovisual de [el músico y artista] Sergio Arau para recuperar Botellita de Jerez, otro grupo que jugaba con los estereotipos mexicanos».
Se mantiene el dilema entre potenciar las idiosincrasias locales y homologarse a los sonidos internacionales. «Muchas de las nuevas bandas mexicanas rechazan una identidad muy evidente: cantan en inglés. La era My Space: se conforman con un público cautivo, reducido pero global. No se hacen ilusiones: las disqueras ya no te dan adelantos para que te organices la vida ni presupuesto para grabar un disco y un vídeo. Todo lo más, te ofrecen un acuerdo para distribuir la música que hayas grabado y, si no vende lo suficiente, adiós».
Ellos todavía deben un disco a Universal, segunda multinacional con la que trabajan. Saben que su actual contrato es irrepetible y no descartan seguir la ruta independiente. Hace poco, compartieron un éxito... en otra discográfica. Hablamos de No hay nadie como tú, que brillaba en el último disco de Calle 13: «Debemos confesar que se trata de un tema suyo, aunque figuremos como coautores. Nos pasaron una maqueta y nos limitamos a tocar y meter algo de voz».
Aparquemos la música. Los miembros de Café Tacvba contemplan con asombro las noticias que llegan desde México sobre el enfrentamiento entre los narcos y el Estado: «Estamos perdiendo sensibilidad ante una tragedia. Aseguraban que la guerra no iba con los ciudadanos, pero ahora sabemos que también caen civiles. Al mismo tiempo, sufrimos una política fascista de seguridad que recorta las libertades».
Aunque, recuerdan, la realidad es cambiante. «En 1991, recorrimos Sinaloa [Estado marcado por el narcotráfico] con un festival y nos obligaron a llevar escolta. Ahora, sin embargo, alguno de nosotros ha ido como DJ a la costa de Sinaloa, donde antes no podías entrar, y no se veía nada especial. Aparte de los retenes militares en las carreteras, claro».
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