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La creadora presenta obras de las series Incrustados, muebles que están metidos unos entre otros, y de Cristales. (Foto: Julio Aguilar)
C iudad Juárez, Chihuahua. 16 de febrero de 2013. (RanchoNEWS).- Hisae Ikenaga tiene nombre japonés, ha hecho su carrera en Europa, pero nació hace 35 años en la ciudad de México. Este año su galería, la madrileña Formatocómodo, ha elegido su trabajo para mostrarlo de manera destacada en su stand de ARCO. La entrevista Julio Aguilar para El Universal
Por sus propios méritos, esta joven se ha ganado ese lugar de honor. Desde hace nueve años se ha abierto paso en este país, en donde se le conoce más que en México, donde nació, creció y estudió.
¿Qué estás haciendo en ARCO?
Estoy exponiendo en Formatocómodo, que es una galería relativamente nueva, tiene cinco años, y estoy como artista destacada porque en ARCO cada galería escoge a un artista que quiere promover más.
¿Qué obras exhibes?
Son dos obras grandes, una serie que se llama Incrustados, que son muebles que están metidos unos entre otros, y la otra que se llama Cristales, que consiste en unos cabeceros y unos pieceros de cama que están recortados y unidos para hacer formas muy extrañas que la gente llama dropos o cristales.
¿Por qué te has desarrollado en España más que en México?
Llevo nueve años aquí pero estudié en México, en La Esmeralda, ahí empecé a trabajar pero dos o tres años después decidí venir a estudiar un máster y, por motivos personales, decidí quedarme.
¿Cómo es tu vida acá?
Llegué como estudiante y poco a poco fui integrándome a la vida madrileña, tengo una pareja, tengo hijas y ya me establecí aquí. La vida en Madrid es bastante cómoda, es una ciudad muy abarcable y muy segura, pero me preocupa que esto cambie por la crisis.
¿Cómo fue el comienzo aquí?
Fue muy difícil, pero todo cambió a raíz de que gané el premio Generaciones, de Caja Madrid, que da prestigio porque va lanzando a los artistas que se irán desarrollando a lo largo del tiempo. El premio, que es muy bueno, lleva 10 años. Cuando lo gané se acercó una galería y se abrió el panorama, pero antes todo fue complicado.
¿Te has desarrollado fuera del país sin utilizar los apoyos institucionales a la cultura mexicanos?
No, yo me viene becada de México. Me dieron una beca del INBA, me dieron unas becas de Jumex y hace dos años me dieron la beca del Fonca de Jóvenes Creadores. Yo agradezco los apoyos públicos mexicanos porque de eso no hay aquí en España. Había apoyos de cajas y bancos que ya desaparecieron.
¿Hay un antes y un después de la crisis económica española en el quehacer artístico?
Hay muchos artistas que están hablando de la crisis y me parece algo razonable, tiene que ocurrir. Esto va a ir a peor, no hay solución pronta, va a haber muchos años de crisis. Yo creo que todo mundo debe mentalizarse para lograr otras estrategias. Por ejemplo, ahora ARCO está funcionando gracias al coleccionismo extranjero, no al español.
Tú saliste de un país con una historia de crisis para vivir en otro que era más estable, pero ahora la historia ha cambiado, ¿cómo te sientes?
Aquí la crisis se la toman muy mal. Hay gente que de verdad la está pasando mal, que de un día para otro no tiene ni comida, pero también hay quien exagera, que se toma todo a mal, se deprime; eso crea un ambiente difícil. Creo que debe haber un cambio de mentalidad.
¿Cómo es el momento artístico en este país, cuáles son ahora las tendencias, cómo lo ves en comparación con México?
Creo que el momento artístico mexicano está muy bien. Se ha desarrollado mucho a partir de los años 90, se internacionalizó, algo que en España no ha sucedido. Muchos de los artistas españoles que funcionan internacionalmente es porque se han ido no porque algo haya sucedido realmente en España. Éste es un país difícil, como estuvo mucho tiempo cerrado, no ha podido asimilar muchas de las cosas que se hicieron en los años 70 y 80, siento que van con una especie de retraso, pero las nuevas generaciones están intentando romper con eso. Hay artistas españoles muy buenos, hay jóvenes que hacen cosas muy interesantes pero siento que siempre llegan a un límite, las mismas instituciones ayudan a abrir un camino que de pronto se estanca. Por ejemplo, hay apoyos para los jóvenes hasta los 35 años, y después de eso se pierde el seguimiento y no hay camino, lo cual no es bueno en un momento como éste.
¿En México trabajas con alguna galería?
Estoy con Garage Galería, que es de Rodrigo Espinosa. Cuando salimos de la escuela, él montó una galería que empezó siendo como un espacio para la misma generación. A la fecha he expuesto en algunos sitios en la ciudad de México y hay gente que trabaja en museos que se acuerda de mi trabajo.
¿Vas seguido a México?
Sí, el año pasado fui tres veces por la beca, me gusta México pero cada vez me cuesta más trabajo lidiar con el tráfico, por ejemplo, pero he pensado que si aquí las cosas se ponen muy mal, siempre estará la posibilidad de volver.
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