La ministra Carmen Calvo (c) y Alfonso Guerra (i), ayer, depositan flores en el lugar donde fue asesinado Lorca hace 70 años.
A lfacar (Granada) 18/08/2006 (EUROPA PRESS).- El mundo de la cultura rindió hoy un multitudinario homenaje al poeta granadino Federico García Lorca, el poeta "más amado y traducido" de todos los tiempos, junto a Cervantes, en el 70 aniversario de su fusilamiento en el Parque de Alfacar (Granada), en un acto que recordó a todas las víctimas de la Guerra Civil.
La ministra de Cultura, Carmen Calvo, presidió el homenaje que comenzó a las 21.30 horas con una ofrenda floral en el monolito a las víctimas de la Guerra Civil, ubicado en el citado parque, tras lo que tuvo lugar el acto institucional, en el que diversas personalidades del cine, la literatura y la política recordaron al poeta.
En su intervención, Calvo destacó la inmortalidad del poeta, pese a la tragedia que acabó con su vida a los 38 años, ya que Lorca es uno de los poetas más reconocidos, recordados y admirados del país. Y emocionada agradeció participar en este acto que recuerda a todas las víctimas de la Guerra y la represión posterior.
El comisario del acto, el hispanista Ian Gibson recordó que Lorca fue "el mejor embajador, junto a Cervantes, de España de todos los tiempos", a la vez que el "más amado" y el "más traducido". Por ello, consideró necesario esclarecer con la exhumación de los cadáveres -pretensión de los descendientes de Dióscoro Galindo y Francisco Galadí, fusilados junto al poeta, y a lo que se opone la familia Lorca- si verdaderamente reposan sus restos en Víznar porque "no es bueno para nadie la cantidad de rumores que circulan por Granada" al respecto.
"Tan increíble fue Federico que no se contentó con ser poeta y dramaturgo, también fue músico", continuó el biógrafo de Lorca, quien agradeció haber sido elegido comisario del acto, propuesta que tras analizar aceptó por considerarla un "deber moral".
Película sobre Lorca.
Por su parte, el ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra consideró a Lorca un poeta "inclasificable", pese a estar enmarcado en la Generación del 27, y abogó por desvelar "misterios" que entorno al poeta no son del arte y continúan vigentes como son las condiciones en que se produjo su muerte.
Así, Guerra lamentó la trágica muerte del granadino porque «se terminó no sólo con una vida humana, sino también con la trayectoria de uno de los hombres más ricos artísticamente que no podemos ni adivinar qué alcance hubiera tenido en el mundo» de no haber muerto a los 38 años. El homenaje es "para mí un acto de amor y honor, que me llena de orgullo", precisó, a la vez que se refirió a la muerte de Lorca como "una tragedia dentro de otra tragedia mayor que fue la Guerra Civil española".
Alfonso Guerra, en referencia a la exhumación, afirmó que es "una ambición absolutamente legítima" por parte de las familias y mostró su desacuerdo ante el hecho de que suponga "reabrir heridas del pasado, tal y como han apuntado algunos sectores políticos", ya que, en su opinión, "habrá heridas mientras no se permita a esas familias recuperar los cadáveres".
El cantautor Amancio Prada, que cerró el acto interpretando una selección de Sonetos y Canciones lorquianos, manifestó, tras recorrer esta mañana el lugar donde se suponen que reposan los restos, que "lo que hay que celebrar es la vida creciente e imparable de Lorca", que propició como ningún otro poeta "la creación" con su obra, que destaca más por "ser semilla que fruto, por lo que suscita que por lo que dice".
Cartel del documental.
Además participaron personas relacionadas con el mundo de las letras como el poeta represaliado en las cárceles del franquismo y condenado a muerte Marcos Ana; del mundo del cine como el director Miguel Hermoso, autor de la película sobre Lorca 'La luz prodigiosa'; y el también director cinematográfico Emilio Ruiz Barrachina, que proyectó una parte del documental inédito aún sobre Federico, 'Lorca: el mar deja de moverse', que se presentará en el Festival de San Sebastián.
Federico García Lorca fue fusilado la madrugada del 18 o 19 de agosto junto al maestro Dióscoro Galindo y los banderilleros anarquistas Francisco Galadí y Joaquín Arcollas ante un viejo olivar conocido como 'Aynadamar', fuente de las lágrimas, en Víznar (Granada), donde se creen que aún reposan sus restos con los de los otros tres compañeros que corrieron la misma "suerte".
El trabajo realizado por investigadores extranjeros logró arrojar luz sobre la "torcida versión", según Gibson, que se ofreció en la dictadura franquista, ante la imposibilidad de llevarlo a cabo por parte de los españoles 'vencidos', hecho que puede ser ratificado en la actualidad porque es una "deuda" que se mantiene con los familiares.
El Parque Federico García Lorca homenajeó así al poeta granadino y también a todas las víctimas de la contienda, recordando la tragedia para que ésta no caiga en el olvido porque sería una "ofensa" a los muertos.