Espejos
En el celeste cielo
donde se pierde el viento de la tierra;
donde Venus escribe sus recados
con raudas filigranas de diamante;
donde Júpiter pesa,
donde la Cruz del Sur abre los brazos
pero no abraza nada más que estrellas:
allí pongo los ojos fatigados
y entre las luces de la sombra eterna
declino el derrotado pensamiento.
(fragmento de En la alta mar del aire)
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