El pianista búlgaro. (Foto: Archivo)C iudad Juárez, Chihuahua, 9 de enero 2012. (RanchoNEWS).- El pianista búlgaro Alexis Weissenberg, fallecía el pasado 8 de enero, según han informado a Efe fuentes próximas a su familia, víctima de una larga enfermedad, en Lugarno (Suiza). En ese mismo país, donde también residía, el músico había fundado la Alexis Weissenberg's Piano Masters Class. También vivió durante cinco años en España, donde se casó y tuvo dos hijas.
Nacido en Sofía, recibió clases de Pantcho Vladigerov desde los 3 años, animado por su madre, también pianista. Pero las clases se vieron interrumpidas por la ocupación de las tropas alemanas de Bulgaria, lo que obligó a la familia a huir.
Tras un primer intento infructuoso (pagaron con tres meses en un campo de concentración), un oficial les ayudó a escapar y acabaron en Palestina, donde tuvo como profesor a Schröder, discípulo a su vez de Arthur Schnabel, una autoridad en el repertorio alemán.
Con tan sólo 14 años interpretó en Jerusalén el concierto número 3 de Beethoven junto a la Orquesta de la Radio de esa ciudad, para luego lograr el puesto de solista en la Orquesta Filarmónica de Israel, donde tuvo como director a Leonard Bernstein.
En 1946, con 17 años, se trasladó a Nueva York, donde su aprendizaje con Vladigerov le abrió las puertas de la Juilliard School para seguir su formación. Allí tomó clases con Olga Samaroff y Rosina Lhevinn y composición de Persichetti.
Con 18 años ganó el Concurso Internacional Leventritt 1947 y poco después debutó en el Carnegie Hall con el concierto número 3 de Rachmaninov, acompañado de la Orquesta Filarmónica de Nueva York bajo la dirección de Georges Szell.
A partir de aquel momento despegó su carrera internacional, con giras por América, Israel y Europa, dirigido por los mejores: de Steinberg a Celibidache pasando por Maazel, Abbado, Argenta, Ozawa, Bernstein, Petré o Karajan.
En 1956, con 27 años, decidió tomarse un largo periodo sabático para dedicarse al estudio y a la enseñanza y diez años después retomó su carrera con un concierto en París.
Su repertorio incluyó a Beethoven, Brahms, Debussy, Schumann, Tchaikovsky y brilló especialmente con Listz, Chopin y Rachmaninov, aunque al que él admiraba por encima de todos era a Bach.
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