Recrimina el premio Nobel a los editores de su novela "El tambor de hojalata", por no haberse puesto en contacto con él para elaborar una nueva traducción de esa obra, ya que considera deficiente la existente
Berlín, Alemania
El Universal online
EFE
Martes 18 de enero de 2005
El escritor alemán Günter Grass ha arremetido contra las "malas traducciones" y los, a su parecer, limitados derechos intelectuales del autor sobre su obra, en especial ante directores teatrales excesivamente creativos. Los derechos de autor "son eliminados de facto" a la muerte de éste, opinó Grass en un simposio celebrado en Berlín, e incluso en vida de éste no se ven suficientemente respetados, como demuestra la práctica de ciertas traducciones. El premio Nobel de Literatura 1999 se refirió al caso de su versión en inglés de la novela "El tambor de hojalata", editada por Random House/Bertelsmann. Grass recriminó a los editores no haberse puesto en contacto con él, pese a sus requerimientos, para elaborar una nueva traducción de esa obra, ya que considera deficiente la existente. El escritor invitó a los responsables de esa edición a participar en el encuentro que mantendrá el próximo verano en la ciudad de Gdansk con sus traductores en español, francés e italiano. A punto de cumplirse los cincuenta años de la publicación de esa obra, el escritor dijo aspirar a una "mejor versión" de la novela publicada en inglés como "The Tin Drum". Asimismo, Grass lamentó los excesos de creatividad de ciertos directores de teatro. "El egocentrismo de algunos directores les hace puentear al escritor como autor de la obra", dijo. "Vivo o muerto, el desmoralizado autor abandona el teatro por la puerta de emergencia", afirmó Grass, a su vez dramaturgo con la obra "Die Plebejer proben den Aufstand", publicada en español con el título de "Los plebeyos ensayan la rebelión"