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Los caricaturistas mexicanos. (Foto: Agencia Reforma)
C iudad Juárez, Chihuahua. 22 de abril de 2013. (RanchoNEWS).- «Nos pusimos 30 años a estudiar y, como ven, no se nos ha hecho vicio», confesaron los caricaturistas Jis y Trino sobre el que ha sido su más extenso trabajo de campo: el uso de psicotrópicos, del que han surgido personajes como el Peyote Asesino o la Tetona Mendoza, informa la Agencia Reforma desde la Ciudad de México.
Difícilmente, gran parte de las 300 personas, que colmaron el auditorio del Centro Cultural Universitario Tlatelolco (CCUT), paró de reír durante la presentación del libro Asuntos Moneros 2. Manual de golosinas, como parte de las actividades de la Fiesta del Libro y la Rosa.
«Hay quienes buscan estados alterados yéndole a los Pumas», dijo Trino provocando los chiflidos de un auditorio compuesto mayoritariamente por estudiantes de la UNAM luego de asegurar que las redes sociales también son una droga y, así como hay gente con «mal vino, pero buena mota», existen quienes «tienen muy buen facebook y muy mal twitter».
Las carcajadas tampoco dejaron de escucharse cuando Jis y Trino se enfrentaron en un duelo organizado por Sexto Piso, que consistió en que cada uno interpretara con sus caricaturas el mismo tema y al final el público decidió con el «aplausómetro» cuál de los dos había resultado vencedor.
Convenció más el retrato de Jis sobre Elba Esther Gordillo y el modo como imaginó que el Santos metía el gol con el que México se convertiría en campeón mundial, únicamente en sueños, pero no se quedó atrás la versión de Trino del cantante Robert Smith disfrazado de John Lennon o el recuerdo del mejor «viaje» de su vida: convertido en una mesera de Sanborn's.
El duelo concluyó con un empate, pero Trino acabó aceptando el triunfo de Jis: «estoy acostumbrado a perder. Le voy al Atlas». Lo que no quedó lugar a dudas es que, por la cantidad de gente que convocó, la presentación de ambos moneros fue la actividad más exitosa de la fiesta en el CCUT.
En la veintena de stands, los vendedores de las editoriales registraron bajas ventas. Mejor suerte tuvieron tanto el proyecto Imprenta Móvil, que bajo el impulso de Nuria Montiel se dedicó a imprimir frases recopiladas en la Unidad Tlatelolco sobre la identidad del lugar, y las Estaciones de Lectura de la UNAM, donde las personas podían sentarse a leer en sillones elaborados con madera reciclada o descargar uno de los 40 títulos mediante el préstamo de IPADS.
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