Russel Crowe, hoy en Madrid.
(REUTERS)
EFE
E l actor Russell Crowe ha presentado hoy en Madrid la última película del director Ridley Scott, la comedia romántica Un buen año, que se estrena en España el próximo 3 de noviembre. Crowe encarna en esta película a un financiero londinense que hereda una finca en la Provenza francesa; para allá que se va para hacer caja, pero mientras tramita la venta de la casa, “se da cuenta de que, aunque lo tiene todo, al viajar hacia su infancia descubre que, a pesar de todo el dinero y su éxito laboral, se ha empequeñecido como persona”.
Ésta es la segunda película que Crowe rueda con Scott después de Gladiador, aunque ya tiene casi lista la tercera, American Gangster. Hoy ha explicado que comparte con el director “una intuición, un sentido del humor y una percepción estética”. Sobre él mismo, el actor ha dicho que se ha convertido “en un producto comercial de Hollywood con la marca chico malo”. Sin embargo, ha defendido su “honestidad, que hace que diga en cada momento” si una película es “bueno o una basura comercial”.
Crowe elige personajes “divertidos” o guiones “de calidad” que encajan con “su momento vital”. Por eso se ha decantado por esta película, basada en un libro de Peter Mayle (amigo de Scott). Su compañera de reparto es la actriz francesa Marion Cotillard.
Sobre Madrid, el actor ha expresado su voluntad de “visitar el Museo del Prado y corretear con una Vespa escapando de los paparazzi” antes de regresar mañana a Londres. Y sobre la posibilidad de rodar la segunda parte de Gladiador, como se rumoreaba en las últimas semanas, ha dejado claro que tanto él como Scott están “cansados de repetir, pero la prensa no hace ni caso, aun cuando es muy poco factible dado que el personaje murió en la película original”.
Tráiler de la película