Juego de pelota en Cihuatan en 2006. (Foto: Archivo)Ciudad Juárez, Chihuahua. 9 de abril de 2010. (RanchoNEWS).- Óscar Batres de la AFP reporta desde El Salvador que Cihuatan, una antigua ciudad indígena cuyas estructuras piramidales sobresalen en un árido terreno en las afueras de la ciudad de Aguilares (norte), ha sufrido el saqueo de piezas o la destrucción de estructuras habitacionales, que han sido utilizadas en la construcción de casas.
El complejo Cihuatan, que en parte es propiedad del Estado, fue construido entre los años 900 y 1100 después de Cristo y se extiende por varios cantones en las afueras de Aguilares, en una zona rodeada de cultivos de caña de azúcar.
En los terrenos que están en manos de particulares, se inició a principios de año la construcción de 38 casas para familias damnificadas por las fuertes lluvias que se registraron en el país en noviembre de 2009 y que causaron la muerte de 199 personas.
Tractores del Comando de Ingenieros de la Fuerza Armada procedieron a realizar trabajos de terracería y de apertura de calles con la autorización de la alcaldía de Aguilares y del viceministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano, instituciones que ahora alegan que desconocían que la zona era parte del complejo arqueológico Cihuatan.
En marzo pasado, el arqueólogo estadounidense Paul Amaroli de la Fundación Nacional de Arqueología de El Salvador (FUNDAR) –no gubernamental– denunció ante las autoridades culturales del país «la destrucción» que se registraba en Cihuatan con la construcción de las casas. Los trabajos se suspendieron.
«Lo que ha ocurrido en Cihuatan es muy lamentable, es una pérdida incalculable de vestigios de la historia de este país en un lugar que tiene protección legal pues es bien cultural del país desde 2007, por tanto nadie puede alegar que desconocía que en esa zona no se puede construir», dijo Amaroli a la AFP .
Producto de los trabajos en la zona, quedaron al descubierto partes de piedras de moler –metates– vasijas, ollas, utensilios de barro que utilizaban quienes ahí habitaron y cuyos restos quedaron hechos añicos tras el paso de los tractores que en algunos casos se toparon con partes de paredes de piedra de edificaciones.
Pastor Galvez ha trabajado durante años como único guardián del Parque Arqueológico Cihuatan que es propiedad del Estado, pero ha sido testigo del saqueo de piezas arqueológicas que a raíz de la construcción se ha hecho en el lugar.
«Yo solo no puedo detener a la gente que viene a saquear, pero es una lástima lo que ocurre», lamentó Galvez.
El viceministro de Vivienda, Edin Martínez, señaló que se ha decidido cancelar la construcción de casas en los terrenos de Cihuatan, y la decena de familias que ya habitan ahí serán trasladadas a otro lugar.
Amaroli trabajó durante casi diez años en excavaciones y exploraciones en Cihuatan y asegura que es una de las «más importantes ciudades indígenas que se han encontrado en el país» pero a la que no se le ha dado la importancia debida.
Las excavaciones han dejado al descubierto en Cihuatan una serie de montículos que encierran un centro ceremonial con sus pirámides, hay dos canchas de pelota, y otros edificios que están rodeados por lo que se presume es la zona de las casas de los habitantes de la antigua ciudad.
El arqueólogo señaló que no se ha podido determinar con certeza el origen de los habitantes de Cihuatan, pues los vestigios sugieren que era una mezcla de etnias, entre ellas la de los mayas.
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