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Aspecto del pabellón de Kosovo, uno de los 66 participantes, una decena más que en la anterior bienal, que fue de tres meses y ahora se extiende a seis meses. (Foto: Alejandra Ortiz)
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iudad Juárez, Chihuahua. 5 de junio de 2014. (RanchoNEWS).- La edición 14 de la Bienal de Arquitectura más famosa del mundo se iniciará el 7 de junio y terminará el 23 de noviembre; extiende el tiempo de exposición de tres a seis meses, debido a que anticipa su apertura, en lugar de comenzar a finales de agosto como se hacía. Informa desde Venecia Alejandra Ortiz Castañares para La Jornada:
La curaduría es del holandés Rem Koolhaas (Rotterdam, 1944), uno de los arquitectos más controversiales e influyentes de su generación –ganador, entre otros, del premio Pritzker y del León de Oro a la carrera en Venecia–, que la titula Fundamentals, estructurada en tres secciones que responden a la reciente tendencia en las bienales de mirar a la introspección histórica y no al análisis de la producción contemporánea, minimizando así el protagonismo de los grandes nombres normalmente presentes, así como de los dispendiosos proyectos site-specific, desplazando al proyecto individual para centrarse en la arquitectura stricto sensu.
Así lo explica Koolhaas: «Fundamentals se concentrará en la historia con la intención de revisar el estado actual de la arquitectura, para imaginar su futuro».
La Biennale de Rem bien podría considerarse un extracto de sus intereses y tipología laboral, empezando por su amor al modernismo que lo ha convertido en una figura referencial en su revalorización; además de la organización del trabajo, como lo desarrolla en sus despachos OMA y AMO de Rotterdam, a partir de grupos interdisciplinarios. A ello se une un componente teórico y racional sobre el cual apoya sus proyectos.
Por eliminar oropeles y marcas
Rem Koolhaas es un arquitecto intelectual, multifacético, inicialmente periodista y guionista de cine. Es profesor universitario en Harvard, Moscú, Londres y Nueva York; además de teórico que ha lanzado términos tan específicos de la jerga arquitectónica contemporánea como junk space, manhattanism, generic city.
Ha sabido reinventarse, sacudir las convenciones y adaptarse a los cambios, alejándose de la famosa tesis fuck context, su caballo de batalla en los años 90 del siglo pasado, para adaptarse en tiempo de crisis a aquellos como arquitectura genérica, que recupera la regla de los llamados medicamentos similares (genéricos) respecto de los patentados.
De la misma manera la arquitectura debe encontrar su principio activo, la fórmula esencial para construir, mediante la eliminación de oropeles y marcas que la hagan inútilmente costosa. La frase sin dinero, sin detalles. Sólo conceptos, bien resume su intención.
Rem Koolhaas ha escrito libros renombrados, comenzando por el primero, Delirious New York (1978), que le valió la inmediata atención internacional.
El más reciente, Project Japan: Metabolism Talks (2011), escrito con Hans Ulrich Obrist, está basado en entrevistas a los intérpretes todavía en vida del primer movimiento arquitectónico de vanguardia oriental llamado Metabolismo, surgido en Japón en los años 60 del siglo pasado.
Las secciones de la muestra están formadas por: Absorbing Modernity 1914-2014.
Rem desde el podio ha invitado a los 66 pabellones participantes (10 más que en la edición anterior, la mayoría en su debut), a formar una gran orquesta mundial, que en conjunto analice los cien años recientes del modernismo a lo largo del cual se ha gestado un proceso de anulación de las propias características nacionales en favor de la adopción de un único lenguaje arquitectónico universal.
Por primera vez cada país tendrá un papel concreto, incorporado al proyecto general, dando cohesión y equilibrio, pero asimismo cierta constricción. No será sólo una vitrina, sino una estimulación al diálogo colectivo, una especie de sicoanálisis global, donde se podrá meditar, discutir, elaborar y concientizar este proceso, del cual pueden extraerse potencialidades.
En el Pabellón Central –ubicado en la zona de los jardines– se plantea una reflexión sobre los elementos fundamentales que han compuesto siempre, desde tiempos inmemorables, cualquier edificio en todas las latitudes: pisos, paredes, techos, puertas, ventanas, fachadas, balcones, escaleras y rampas, con la finalidad de recordar los elementos referenciales que permiten entablar una relación regenerada y vigente entre nosotros, la civilización y la arquitectura.
El Arsenal está dedicado a Italia, examinándola mediante 41 proyectos que la sacudirán de norte a sur, volteándola de arriba abajo y abordando multitud de temas no sólo de tipo arquitectónico sino político, económico, religioso, tecnológico e industrial. A ello se agrega la participación durante el verano de las bienales de Música, Danza, Teatro y Cine que, como las artes visuales y arquitectura, también componen la Bienal de Venecia.
Premiaciones
El León de Oro a la carrera de arquitectura fue asignado, por sugerencia de Koolhaas, a la canadiense Phyllis Lambert el pasado 20 de mayo, por la promoción, curaduría y formación de arquitectos. «Sin su participación –apunta un comunicado de prensa– uno de los pocos ejemplos de perfección absoluta realizado en el siglo XX, el Seagram Building de Nueva York, no hubiera existido jamás».
Lambert recibirá el reconocimiento el sábado 7 durante la ceremonia de premiación e inauguración de la muestra, cuando además serán nominados los tres ganadores de los leones de oro y plata a los pabellones nacionales y a uno de los proyectos de Monditalia, así como a las menciones especiales.
El jurado lo integran Kunlé Adeyemi (Nigeria), Francesco Bandarin (Italia), Bregtje van der Haak (Holanda), Hou Hanru (China) y Mitra Khoubrou (Emiratos Árabes Unidos).
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