Monumento en Chalcatzingo
NUEVA YORK. México es uno de los países con más patrimonio histórico, pero los fondos no alcanzan para todo. Por eso la WMF recibe las nominaciones del INAH cada dos años, pidiendo ayuda para los puntos más amenazados. Y la cosa va mejorando: en la lista de 2004 se propusieron 35 nominaciones y fueron finalmente seis los monumentos seleccionados. Este año el INAH ha hecho una selección más ajustada, con 14 nominaciones y cinco sitios en la lista definitiva.
Al Centro Histórico de México le acompañan el yacimiento prehistórico de Chalcatzingo (Morelos), que peligra por el ganado que ha dañado templos y plazas, además de las piedras robadas por la población local para construir nuevos edificios; las Misiones de Pimería Alta (Sonora), que ya se incluyó en la lista de 2004; el convento franciscano de Cuauhtinchan (Puebla), nominado por una ONG y cuya amenaza principal está en el santuario, donde la humedad y la suciedad han dañado la estructura, y la iglesia de San Nicolás Obispo (Michoacán), nominada por la Fundación Herencias Patrimoniales para restaurar esta olvidada y valiosa joya construida 1591.