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Fachada del invernadero del Albuquerque Biological Park (Foto JJDQ/Rancho NEWS)
A lbuquerque Nuevo México, 27 de mayo, 2007 (RanchoNEWS/Juan José Durán Quevedo).- Del 26 al 28 de mayo, mi familia y yo salimos de El Paso, Texas, a la ciudad de Albuquerque, Nuevo México, para que mi hija Esmeralda participara con su equipo en un torneo de fútbol soccer, en el cual logró un tercer lugar en la categoría de 15 años. Esta vez no fuimos a la cima de la sierra de Sandia, montaña alta y boscosa que pertenece a la ciudad, pero sí nos dimos el tiempo para visitar el acuario y un jardín botánico que se encuentran en el centro histórico de Albuquerque.
Por la Avenida Central, antigua e histórica carretera 66, y al margen del Río Grande (Río Bravo, en México) se puede apreciar toda una gama de plantas y flores que crecen con la ayuda de la humedad del río.
En el 2601 Central Ave. se encuentra el Parque Biológico de Albuquerque, parque que alberga al acuario y al parque botánico de la ciudad.
Visitante contemplan el acuario. (Foto JJDQ/Rancho NEWS)
El acuario es un lugar donde exhortan a la gente a cuidar el río y a no ensuciarlo y contaminarlo, a conservar su fauna acuática. Ahí pudimos ver peces de agua dulce y salada en los diferentes estanques. Tiburones, tortugas marinas, medusas etc.
El jardín botánico del Río Grande se encuentra en el mismo complejo educativo y por el mismo precio se pueden apreciar los dos lugares.
De entrada al jardín, del lado derecho, se encuentra «El jardín de la fantasía de niños», una edificación de un castillo y una figura gigante de dragón y al entrar en ese recinto es como si el jardín fuera de tamaño gigantesco, las hormigas son del tamaño de un perro grande y las hortalizas de un tamaño humano. Este lugar lo disfrutan chicos y grandes.
Una hormiga gigante. (Foto JJDQ/Rancho NEWS)
Siguiendo el camino, se llega a una fuente representando al Río Bravo y recorrido por un tren eléctrico miniatura así asta llegar al «Pabellón de las mariposas»: Un santuario de diferentes especies que son objeto de estudio de la UNM (Universidad de Nuevo México).
Al salir del «Pabellón de las mariposas» se llega a un lago y luego a un gran invernadero, un lugar donde se exhiben plantas de clima árido del desierto chihuahuense, así como plantas de clima húmedo y boscoso que se encuentran en el estado de Nuevo México.
Aspecto del Pabellón de las mariposas». (Foto JJDQ/Rancho NEWS)
Siguiendo nuestro camino por la vereda botánica, llegamos a una granja de animales, siembra de orquídeas y de mucha vid. Regresando por la misma vereda llegamos a un lugar de ceremonias lleno de rosas de diferentes colores.
Así, después de haber caminado en todo el jardín por un par de horas, llegamos a la salida. Cada estación del año le da al jardín un toque especial. Si visita la ciudad de Albuquerque, Nuevo México, este lugar es recomendable y educativo, nos enseña a respetar la fauna y la flora de nuestro hábitat.
Rosas de Albuquerque. (Foto JJDQ/Rancho NEWS)
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