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Fotografía de Manuel González de la Parra que se expone en el recinto veracruzano. (Foto: Archivo)
M éxico, 30 de julio, 2007. (Merry MacMasters/ La Jornada).- ¿Qué tienen en común Cartagena, Colombia, y el puerto de Veracruz? Por lo visto bastante, de acuerdo con el fotógrafo Manuel González de la Parra, cuya exposición Son Caribe: Cartagena-Veracruz forma parte de cinco muestras inauguradas el pasado viernes en la fototeca de esa estidad federativa.
Son Caribe... es resultado de un intercambio entre el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes y el gobierno colombiano y forma parte de un trabajo que González de la Parra inició hace una década y que comenzó en la comunidad afromestiza de Coyolillo, México, señala Patricia Martín, directora de la Fototeca de Veracruz.
La investigadora Elisabeth Cunin recuerda que en una exposición en octubre de 2006, los visitantes del Museo de Arte Moderno de Cartagena observaron las fotografías de Veracruz de González de la Parra y varios permanecieron en la incertidumbre.
La especialista añade que «las escenas captadas les parecían familiares, pero les era difícil ubicarlas en Cartagena. En el momento en que se habla de globalización y de estrechamiento del planeta, el Caribe nos muestra hasta qué punto estos fenómenos no son nuevos. Seguramente no es casualidad que González de la Parra se haya interesado en la música y las fiestas: sus imágenes dan cuenta de esta proximidad en la distancia, de esta diversidad en la unidad, de este 'mismo cambiante' para retomar la palabra de Paul Gilroy, autor del Black Atlantic».
También fue inaugurada la muestra El futuro es ahora -sobre la fotografía contemporánea en Venezuela-, del Colectivo Oficina No. 1 de ese país, un grupo de artistas que se dedica a realizar exposiciones en calles y otros espacios alternativos, sobre todo fuera de su país. Algunos de sus integrantes presentaron recientemente la exhibición Documenta, en Alemania, informa Patricia Martín.
La mexicana Katya Brailovsky presentó Libro, en el que «propone una relación entre imágenes y narrativa, lejos de la recíproca ilustración». Ricardo Alzati señala al respecto: «El azar -como idea y práctica- se integra de manera fundamental en este trabajo. Aun cuando estamos ante una obra en apariencia terminada, cada nueva mirada y cada nueva lectura se convertirán en una distinta e irrepetible traducción de este libro».
Sobre Ser vista. Ser alguien, la sueca Ana Lena Lundqvist dice: «he pensado mucho en lo que hoy significa ser chava. ¿Qué piensas sobre el futuro y qué expectativas tienes? Así fue como empezó a tomar forma la idea de documentar la contemporaneidad». La última muestra es Arqueología urbana, de Ernesto Ramírez.
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