Rancho Las Voces: Literatura / México: Ante quienes acallan, el escritor Salman Rushdie aconseja gritar
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lunes, octubre 06, 2014

Literatura / México: Ante quienes acallan, el escritor Salman Rushdie aconseja gritar

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Antes de la plática, Rushdie visitó la muestra El exilio español en la ciudad de México. (Foto: Marco Peláez)

C iudad Juárez, Chihuahua. 6 de octubre de 2014. (RanchoNEWS).- «Cuando alguien te quiere callar, la mejor respuesta es hablar. No quedarse en silencio. Si alguien dice que te quiere atacar por un libro, escribe otro, luego otro y otro. Para que las personas empiecen a ver algo de manera diferente hay que rodearlas con otros libros, de modo que parezca parte de un viaje artístico», expresó el escritor de origen indio Salman Rushdie, objeto de una percusión política por su volumen Versos satánicos (1988). Una nota de Merry MacMasters para La Jornada:

«Si te quieren callar, grita», reiteró Rushdie al referirse al edicto religioso, o fatwa, decretado en su contra en 1989 por el ayatola Jomeini, líder religioso de Irán, que pedía su ejecución. A raíz de esta situación el también ensayista descubrió en su persona una especie de optimismo. Es decir, «quise seguir siendo el escritor que siempre había sido y continuar en mi camino. Hubiera sido muy fácil escribir libros de enojo, pero el éxito consiste en seguir siendo uno mismo, no necesariamente más político o más cuidadoso».

Las palabras de Rushdie fueron parte de un diálogo con la escritora Carmen Boullosa efectuado ayer en el Museo de la Ciudad de México, con motivo de los 15 años de la Casa Refugio Citlaltépetl (CRC), para escritores perseguidos. Antes de la charla, Rushdie visitó la exposición El exilio español en la ciudad de México: su legado cultural.

Sus pensamientos fueron escuchados por Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, bajo cuya gestión como jefe de Gobierno del Distrito Federal se creó dicha asociación civil sin fines de lucro, así como el artista plástico Vicente Rojo, nuevo presidente del consejo administrativo del CRC; Philippe Ollé Laprune, director general de la Casa Refugio, y Eduardo Vázquez Martín, secretario de Cultura de la ciudad de México.

Boullosa, fundadora de la asociación civil junto con el escritor colombiano Álvaro Mutis, cuando supo que Rushdie estaría en México para participar en el Hay Festival que ayer concluyó en Xalapa se comunicó con él para proponerle estar presente en la conmemoración, lo cual aceptó. «Hago todo lo que Carmen me pide», dijo a modo de broma.

Respecto de la red de ciudades refugios, el literato de nacionalidad británica, con 15 años de radicar en Estados Unidos, explicó: «éramos un grupo», aunque reconoció haber desempeñado un papel central: «Descubrimos que cuando los escritores necesitaban refugio pasaba que los gobiernos nacionales no apoyaban porque tenían relaciones políticas o económicas con los países involucrados. Pero, si uno bajaba a nivel de la ciudad, muy seguido los alcaldes lo veían como buena idea y funcionaba. Claro, aquí ha funcionado increíblemente bien».

Gracias al «entusiasmo» de Cuauhtémoc Cárdenas y su «generosidad», se pudo tener «una bella casa, cuando en otras ciudades simplemente se ha aportado un departamento. De esta manera la Casa Refugio se convirtió en un lugar de literatura», apuntó Rushdie.

Cárdenas, coordinador de asuntos internacionales del Gobierno del Distrito Federal, se refirió a la «valentía» de Rushdie de defender «el derecho a la libertad de expresión, del pensamiento, de expresar todo tipo de ideas, independientemente de los riesgos personales que ha corrido».

Pero, dicha casa ¿todavía tiene sentido?, quiso saber Boullosa, quien recordó que México tiene escritores y periodistas que «también necesitan protección». Para Rushdie resulta «preocupante» la manera en que en estos tres lustros los periodistas se han convertido en el blanco: «Antes los periodistas que laboraban en zonas de conflicto eran vistos como neutrales. Hoy día se incrementa en forma dramática el número de periodistas asesinados, heridos, atacados, alrededor del mundo.

«Un proyecto como este puede poner un ejemplo y establecer un principio. Más allá de eso no podemos salvar el mundo. Sin embargo, es importante que un país que ha sido generoso al recibir a escritores en problemas de otras partes del mundo no se olvide de los propios». Agregó que «cualquier país es muchos países; no son lugares homogéneos, existen riesgos profundos y contradicciones en muchas sociedades».

Al comentario de Boullosa de que en estos 15 años ha aparecido un nuevo lenguaje, el de Internet, Rushdie aseguró que la mayoría de los escritores preferirían quedarse en casa inventando historias: «Aun los que son perseguidos en realidad quieren que se hable de su obra, no de su persecución». Respecto del «lado oscuro» de Internet, el escritor invitado dijo que «desafortunadamente los malos son muy buenos para usarlo también. Una de las características de los terribles acontecimientos actuales en Irak es la habilidad con que este nuevo ejército ha utilizado los medios sociales para dar a conocer su causa y difundir cualquier mensaje».

¿Eres activista?, quiso saber Boullosa. «No, pero a veces me meten en pleitos», contestó Rushie.

Ollé Laprune, responsable de la CRC, dijo que en estos tres lustros el recinto ha albergado a 11 escritores, publicado 16 títulos originales, 34 números de la revista Líneas de fuga, impartido más de 600 conferencias literarias, organizado más de 18 coloquios internacionales, apoyado el desarrollo de más de 60 talleres independientes, así como más de 50 proyectos culturales independientes con diversas presentaciones en su espacio.

Aparte de agradecer a Vicente Rojo que aceptara encabezar la presidencia de la asociación civil, anunció la integración al consejo de administración del caricaturista Rafael Barajas El Fisgón y de la periodista Lydia Cacho. También dio a conocer que «gracias al trabajo conjunto con Eduardo Vázquez Martín y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes hemos llegado a un sistema y un funcionamiento que permitirá a esta casa asentar su presencia y tener menos angustias y problemas que antes».


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