Rancho Las Voces: Teatro / México: Virgencitas (Critica)
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viernes, febrero 02, 2007

Teatro / México: Virgencitas (Critica)

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Escena de la obra Virgencitas (Foto: Archivo)

M éxico, 2 de febrero 2007. (Jaime Chabaud Magnus/Milenio).- Entusiasmo sin fin y frenesí irreflexivo ha generado en la más reciente generación de escritores de teatro el concepto que lleva años (tampoco tantos) practicándose en Europa y al que se ha bautizado con el nombre de “narraturgia”.

La revista PasodeGato intentó el análisis y la reflexión en torno a este fenómeno en su número 26 de julio del 2006 aportando una visión múltiple aunque sólo de los amorosos abanderados de esta corriente.

La discusión sobre la “narraturgia” se centra, me parece, en el predominio de lo diegético (narrativo) sobre lo mimético (dramático) y su virtualidad escénica. Tema que arrastramos desde la Celestina de Fernando de Rojas y que en México se ha practicado con mayor y menor éxito. Dos trabajos memorables son Carta al artista adolescente que hiciera hace más de una década Luis Mario Moncada y El cielo en la piel de Edgar Chías.

Desde que el teatro es tal, la presencia de fragmentos o trozos diegéticos dentro de la estructura de los textos ha convivido con lo dramático en niveles o “porcentajes” muy variados. Lo que ha ocurrido “allá y entonces” es evocado en el “aquí y ahora” de los personajes para provocar algo, para hacerse algo. La fricción entre ambas palabras (la narrativa y la dramática) halla su grado cero en la “narraturgia”. Pero ¿hasta qué punto es un cuento o es teatro ese material textual? La tajante negación de la dramaticidad (que es una manera de sacarle al bulto por parte de los jóvenes escritores) en la “narraturgia” implicaría una serie de operaciones que apelen a la teatralidad, a la “virtualidad” escénica para darle validez. También implica que las operaciones que hacen actores y director no pueden ser, de ninguna manera, las de un proceso mimético.

Las dudas se refrendan cuando uno ve una obra como Virgencitas del joven dramaturgo Hugo Abraham Wirth. ¿Por qué pretender un trabajo actoral “realista” con un texto que reniega del proceso mimético? ¿Para qué mezclar imágenes en video que ilustran la palabra? ¿Cuál es el contenedor escénico que nos puede hacer luminoso lo narrado? Asista, lector, y discutimos. Virgencitas regresa al teatro La Capilla, los viernes a las 20 horas y sábados a las 19 horas. Dirige Enrique Singer.

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