El artista junto a una de las columnas esculto-arquitectónicas Tigres y águilas (1963-1964), de la escalinata de acceso a la sala de congresos del Centro Médico Nacional del IMSS. (Foto: cortesía del museo)
C iudad Juárez, Chihuahua, 7 de junio 2011. (RanchoNEWS).- La exposición Luis Ortiz Monasterio (1906-1990): del perfil nacionalista al concepto universal, que albergará a partir de este jueves el Museo Casa Estudio Diego Rivera, presenta una revisión histórica y estética del escultor quien conoció las corrientes universales y logró imprimir en su obra un carácter nacionalista y un sello especial. Una nota de Fabiola Palapa Quijas para La Jornada:
María Estela Duarte, curadora de la muestra, explicó que el artista utilizó mucho el arte precolombino y estos motivos los plasmó en su obra, pero también su plástica tiene influencia de las corrientes universales.
Recordó que Antonio Rodríguez, en uno de sus textos dedicados al escultor, lo define como «un artista que conjuntó en su amplia producción, durante casi 70 años del siglo XX, los valores plásticos de las tradiciones escultóricas precolombinas, el legado artístico de Occidente y una constante búsqueda formal de indiscutible valor universal».
Ortiz Monasterio constituye una de las figuras más destacadas en la escultura contemporánea del país. Su arte expresa una singular cosmovisión de la historia artística del México prehispánico y posrevolucionario, subrayó Monserrat Sánchez, directora del museo.
La muestra –que se exhibirá del 9 de junio al 25 de septiembre– propone una revisión histórica y estética de las aportaciones del artista dentro del movimiento de la llamada escuela de escultura mexicana y su diálogo con las vanguardias del geometrismo, realizadas a partir de los años 60 del siglo pasado.
Alrededor de 70 trabajos –54 esculturas y 16 obras bidimensionales, así como hemerografía, fotografías y documentos, en su mayoría del acervo de Ana María Ortiz Monasterio, hija del escultor– integran la exposición que luego se exhibirá en la galería del Centro Médico Siglo XXI.
Sello nacionalista
De acuerdo con los organizadores, Ortiz Monasterio es uno de los pocos escultores de México que después de haber realizado arte público se adentraron en el mundo de la imaginación al utilizar prácticamente todas las técnicas en su producción escultórica, desde la talla directa, pasando por el barro cocido y el yeso, hasta complejos trabajos de fundición.
Entre sus aportaciones más originales se encuentran las terracotas policromadas realizadas entre 1949 y 1950.
En una entrevista con la Gaceta de la Universidad Nacional Autónoma de México, el artista explicó que su obras de carácter público lo estimularon en el terreno creativo y artístico, ya que las de índole urbanística que realizó no tenían carácter rutinario, y siempre prefirió darles un sello especial y nacionalista. Por eso recurrió a símbolos que tenían raigambre en nuestra cultura ancestral.
Estela Duarte reiteró que la finalidad de la muestra de Ortiz Monasterio, quien fue distinguido en 1967 con el Premio Nacional de Artes en la rama de escultura, es presentar una revisión crítica e histórica del quehacer como escultor de obra monumental, pública y civil, además de conocer la diversidad en su búsqueda estética.
Entre las obras que marcaron el sentido urbano de nuestra ciudad figuran la Fuente Monumental de Netzahualcóyotl (1955-1956), en el Bosque de Chapultepec; el Monumento a la Madre (1949) y la Plaza Cívica de la Unidad Independencia (1962).
La muestra Luis Ortiz Monasterio (1906-1990) será inaugurada este jueves a las 19 horas en el recinto de la calle Diego Rivera, esquina Altavista, San Ángel Inn).
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