C iudad Juárez, Chihuahua. 12 de marzo de 2015. (RanchoNEWS).- Hacer un recorrido por las artes plásticas de México durante la primera mitad del siglo XX es, hasta cierto punto, comprender los cimientos del arte mexicano del presente, afirma la curadora Emma Cecilia García Krinsky al considerar que fueron los años en que se construyó y consolidó una escena propia en respuesta al contexto del país. Reporta desde la ciudad de México para Excélsior Sonia Ávila.
«Todos los movimientos artísticos son consecuencia de un momento histórico en México como la Revolución, y muchos artistas extranjeros llegaron a México como consecuencia de la Guerra Civil Española y de la Segunda Guerra Mundial, entonces es un momento definitivo para la llegada de artistas europeos a México y su influencia en las artes», añade en entrevista.
Este es el trayecto que plantea la exposición Mexico: Fantastic Identity, 20th Century Masterpieces, a partir de una selección de 60 obras de la Colección FEMSA, que se inaugurará el próximo sábado en el Museo de Arte Latinoamericano en Long Beach, California; primera vez que el acervo llega al recinto.
La curaduría abre con la obra cubista que Diego Rivera realizó durante su estancia en Europa, y de ahí traza una cronología por la Escuela Mexicana de Pintura, las vanguardias como el surrealismo hasta cerrar en la Generación de la Ruptura, y si bien pareciera una lectura ya vista, García Krinsky señala que la apuesta es presentar al público estadunidense la base, el origen, de la plástica actual.
«Es muy importante, porque hay movimientos muy importantes como la Escuela Mexicana de Pintura, que fue muy singular y en cierta medida sustenta el arte del siglo XX, y todos los derivados plásticos de estos movimientos se reflejan en el arte moderno», detalla de la muestra que se presentó primero en el Museo Ayala, en Filipinas, y cierra su itinerancia en Los Ángeles.
A la vez que hace el trayecto lineal por los movimientos estéticos, el conjunto de obra –pintura, dibujo y fotografía– ofrece una panorámica de la identidad artística y social de México creada en cierto modo por los mismos artistas quienes en sus obras plasmaban su entorno.
De Europa a la Escuela Mexicana
La pintura cubista de Diego Rivera y de Ángel Zárraga hace en la exposición de referente a la influencia extranjera en la creación mexicana, y de la inserción de pintores mexicanos en las escenas internacionales. Esta sección, explica la curadora, sirve de preámbulo para argumentar el nacimiento de la Escuela Mexicana de Pintura que buscó justo alejarse de lo europeo.
«De Diego Rivera se ve como el vanguardista que fue en Europa, donde estuvo primero en España y luego en París, y eso permite dimensionar el cambio que hizo cuando a su regreso se involucra el muralismo. Entonces con las influencias de ese momento, lo que también es importante en Rivera es que en muchas de sus obras cubistas integra el color mexicano y ciertos elementos mexicanos».
De este caso se presenta el óleo El grande de España, una obra de Rivera hecha en 1914, y junto a él las piezas de Zárraga quien también trajo conceptos europeos a la plástica mexicana como el óleo Septiembre que pintó en 1917.
«Cuando regresa a México, Rivera se une con Orozco y Siquieros, y ahí cambia su estilo sin dejar las influencias de la vanguardia europea, porque la perspectiva, el volumen y todos esos elementos vienen de sus antecedentes del cubismo».
Continúa el núcleo de la Escuela Mexicana de Pintura con obra de Jean Charlot, Alfredo Ramos Martínez, Cordelia Urueta, Olga Costa, entre otros. A esta sección se agrega el módulo del paisaje donde el protagonista es el Dr. Atl, que se acompaña de fotografías de Hugo Brehme, Manuel Álvarez Bravo y Gabriel Figueroa.
«Luego nos enfocamos en las vanguardias y aquí tiene un papel importante el llamado surrealismo mexicano con Frida Kahlo, Juan O´Gorman, Antonio Ruiz El Corcito, Agustín Lazo y muchos otros, y complementamos este capítulo con el surrealismo europeo a cargo de las tres grandes, Alice Rahon, Remedios Varo y Leonora Carrington», detalla quien cierra el recorrido por los artistas de la Ruptura quien señala que la obra de Rufino Tamayo se revisa como protagonista de las vanguardias.
De estos destaca Puppet Show (1933) de El Corcito, Los remedios (1930) de Agustín Lazo, y una fotografía de Hugo Brehme Iztaccíhuatl, Mi vestido cuelga allí de Frida Kahlo (1933) y El flautista de Gabriel Fernández Ledesma (1952), todas provenientes de la Colección FEMSA, que en suma conserva dos mil piezas.
A manera de acotación, se presenta una sección de retratos de artistas tomados por fotógrafos como Manuel y Lola Álvarez Bravo, Rogelio Cuéllar, Graciela Iturbide, Flor Garduño y Paulina Lavista, quienes ofrecen en sus imágenes la mirada humana de los creadores. Además de un documental con entrevistas a historiadores del arte que reflexionan sobre la trascendencia de los primeros 50 años del siglo XX.
¿Dónde y Cuándo?
Mexico: Fantastic Identity, 20th Century Masterpieces. FEMSA Collection se inaugura el 14 de marzo a las 19:00 horas en el Museum of Latin American Art, ubicado en Long Beach, California.
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