C iudad Juárez, Chihuahua. 29 de octubre de 2021. (RanchoNEWS).-Un hombre se colapsa y muere misteriosamente en el metro. Más muertes inexplicables se multiplican en la Ciudad de México y mientras algunos sospechan que se trata de una enfermedad infecciosa, como la plaga, otros minimizan el impacto de esta nueva afección. Los argumentos de los políticos y las autoridades médicas resuenan hoy: «¿Qué puede significar en una ciudad de trece millones de habitantes que hayan muerto 57 personas?»; «Se pide calma a la población y se recomienda que no se dejen llevar por falsos rumores»; «En un país que tiene los problemas del nuestro no podemos echarnos encima la responsabilidad de una peste», dice un político que teme al pánico, al escándalo internacional (el cual explota cuando un ministro noruego se contagia y muere en suelo mexicano) y al colapso económico.
Felipe Cazals filmó en 1979 El año de la peste, a partir de un guion de Gabriel García Márquez, Juan Arturo Brennan y diálogos de José Agustín, inspirado en el Diario del año de la peste, de Daniel Defoe (1722). Pocas cintas (mexicanas o de cualquier otra procedencia) reflejan mejor la manera en que ciertos gobiernos, incluyendo el nuestro, minimizaron, ocultaron y manejaron con incompetencia y crueldad la pandemia del Covid-19. En la cinta, «una afección bronquial aguda, sumamente contagiosa y agravada por la tremenda contaminación (pero que no es la peste)» termina cobrando una cantidad de vidas que casi representa la mitad de las que ocurrieron en México entre 2020 y 2021.
El texto de Naief Yehya es publicado por el suplemento El Cultural de La Razón