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La agrupación que dirige Cecilia Appleton ofrecerá tres funciones en el Salón de la Danza del Centro Cultural Universitario (Foto: Archivo)
C iudad Juárez, Chihuahua. 13 de junio de 2016. (RanchoNEWS).- La nueva propuesta coreográfica de Cecilia Appleton, Dos en blanco, que estrenará mañana con su compañía Contradanza en el Salón de la Danza del Centro Cultural Universitario, tiene como tema central la comunicación en pareja y la necesidad de relacionarnos con el otro. Fabiola Palapa Quijas informa para La Jornada.
La directora y fundadora de Contradanza presenta en el escenario a dos personas que se relacionan durante tres episodios en una narrativa que está ligada a la acción de vivir en pareja, en temporalidades que cambian constantemente la forma como se comunican.
Para el bailarín Yseye Appleton, quien hace dueto con Mariana Rosales, la obra aborda «lo que sentimos en esta época: estamos conectados, pero a la vez desconectados, debido al uso de la tecnología, entre otras cosas. Hemos perdido la capacidad de rozar un cuerpo, de tocar y sentir al otro. Así empezó esta propuesta, con la necesidad de expresar lo que sentimos».
Olvidamos lo esencial
Cecilia Appleton aclara que «no es la obra de una pareja que baila, como en unos XV años. Hay una deconstrucción de qué es una relación, se profundiza en las emociones, sensaciones o preocupaciones que no quieres decir a tu pareja, a los amigos, pero que pasan en tu vida».
En la obra, la coreógrafa se pregunta si nos relacionamos con el otro por necesidad, costumbre o deseo. «Vivimos en una ciudad donde se da mayor importancia a lo material; lo único que interesa es el dinero y olvidamos lo esencial de la vida: estar juntos, convivir, relacionarnos con la mirada del otro para entender lo que somos».
Yseye Appleton señala que en la puesta se plantean diferentes formas de ver una relación, porque está reflejada la visión de tres generaciones, representadas por Cecilia, Mariana y él.
«Desde hace varios años en Contradanza se realizan propuestas en las que sobresale la imagen, lo visual, pero al final terminamos en algo más profundo y honesto en torno a los sentimientos», agrega el bailarín, con 16 años en la agrupación.
«Al crear una pieza, el coreógrafo se está construyendo; cuando hay miedo de hablar sobre cierto tema, éste se toca por la superficie y no se siente honesto; en la obra está ese sentir. Me asusta la idea de saber si siento, si soy capaz de amar o si lo que siento es un negocio, porque el otro es sólo mi compañero de trabajo o mi colega. Son cuestiones a las que también queremos llegar y compartir con el espectador, decirle que somos seres humanos que también estamos construyéndonos y que por eso entramos en lo profundo», explica Cecilia Appleton.
Dos en blanco reflexiona sobre la pareja en una época en la cual los esquemas se desgastan y colapsan, dando pauta a otros estilos de vida y concepciones de la relación.
Contradanza presentará Dos en blanco los días 14, 15 y 16 de junio a las 19 horas en el Salón de la Danza del Centro Cultural Universitario (Insurgentes Sur 300, Ciudad Universitaria).
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