C iudad Juárez, Chihuahua. 20 de enero de 2017. (RanchoNEWS).- La reconquista de Palmira por parte de Daesh a las fuerzas sirias el pasado diciembre se ha traducido en nuevos daños irreversibles en esta ciudad monumental declarada Patrimonio de la Humanidad. Los yihadistas han causado un «daño significativo» al histórico Tetrápilo y al Teatro Romano, según ha confirmado la Dirección General de Antigüedades (DGA) de Siria en un comunicado. «Es un nuevo crimen de guerra», ha condenado la Unesco, reporta Mónica Arrizabalaga para ABC.
Daesh es el grupo terrorista que autoproclamó el califato que se extiende por parte de Irak y Siria, mejor conocido en occidente como Estado Islámico de Irak y el Levante o por sus siglas en inglés ISIS.
El análisis de imágenes de satélite realizado por la asociación de Escuelas Americanas de Investigación Oriental (ASOR) «confirma una nueva destrucción en Palmira entre el 26 de diciembre de 2016 y 10 de enero de 2017» por parte de Daesh, destaca la DGA, que fue informada de la destrucción por la comunidad local hace una semana.
El director de Museos de la Dirección General de Antigüedades, Ahmad Dib, había confirmado anteriormente que poseían informaciones de que Daesh había «causado destrozos» a las ruinas grecorromanas de Palmira, pero que aún debían «confirmar los detalles».
Las imágenes, que fueron difundidas por el medio local Palmyra Monitor, muestran que tanto el proscenio como la escena del teatro han quedado seriamente dañados, al igual que el Tetrápilo de la ciudad, situado a escasos metros. «El Tetrápilo parece haber sido destruido intencionadamente utilizando explosivos», resalta el medio local sirio.
Este antiguo monumento helenístico de tipo tetrakionion (sin conexión superior) estaba formado por cuatro grandes zócalos con cuatro columnas cada uno. Construido en una encrucijada, el Tetrápilo o Tetrapylon fue testimonio de la grandeza de Palmira alrededor del año 270 d.C, cuando la reina Zenobia alcanzó el apogeo de su poder.
«Era un símbolo arquitectónico del espíritu del encuentro y de la apertura de Palmira y ésa es una de las razones por las que se ha destruido. Su posición y su forma son únicas en la arquitectura antigua y atestiguan la especificidad de la identidad de Palmira», señala la directora general de la Unesco, Irina Bokova, para quien «esta destrucción es un nuevo crimen de guerra y una inmensa pérdida para el pueblo sirio y para la Humanidad».
«Este nuevo golpe contra el patrimonio cultural, pocas horas después de que la Unesco recibiera informes sobre ejecuciones masivas en el teatro, muestra que la limpieza cultural dirigida por extremistas violentos está buscando destruir vidas humanas y monumentos históricos para privar al pueblo sirio de su pasado y su futuro. Ésta es la razón por la cual la protección del patrimonio es inseparable de la protección de vidas humanas, y todos debemos unirnos para poner esto en el centro de todos los esfuerzos para construir la paz», agregó Bokova.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha señalado que el pasado 11 de enero los extremistas ocasionaron daños en la parte frontal del teatro romano cuando colocaban explosivos en la zona.
El teatro ha sido usado por Daesh como escenario de sus ejecuciones. El director de Museos de la Dirección General de Antigüedades recordó que ayer mismo asesinaron a varias personas en ese emblemático lugar donde el pasado mayo se celebró la victoria de las fuerzas sirias y rusas con un histórico concierto de la orquesta sinfónica del teatro Mariinsky de San Petersburgo.
Durante los diez meses que Daesh ocupó Palmira en su primera etapa, desde el 20 de mayo de 2015, los yijadistas dinamitaron los templos de Bel y de Bal Shamín, así como el Arco del Triunfo y destruyeron varias estatuas del centro de esta ciudad que en los siglos I y II d.C. fue uno de los centros culturales más importantes, punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda. Además, convirtieron las ruinas grecorromanas en un campo de minas, que los zapadores rusos se encargaron de eliminar cuando los efectivos gubernamentales sirios se hicieron con su control.
Graves daños en el 60% de Alepo
La misión de emergencia enviada por la Unesco a la ciudad siria de Alepo para examinar los daños sufridos en su Ciudad Vieja, inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial y en la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro, ha constatado «inmensos daños», según ha dado a conocer hoy en un comunicado.
El equipo «pudo constatar con precisión daños considerables en la Gran Mezquita de los Omeyas, en la Ciudadela, en mezquitas, iglesias, zocos, khans, madrasas, hamames, museos y otros edificios históricos emblemáticos de Alepo». Según una primera estimación de la Unesco, cerca de 60% de la ciudad vieja de Alepo registra graves daños y un 30% está completamente destruido.
«La destrucción de una de las más grandes y antiguas ciudades del mundo es una tragedia», declaró la directora feneral de la UNESCO, Irina Bokova, que pidió «la acción inmediata y el sentido más elevado de la responsabilidad y de la coordinación de todos los actores implicados».
«Pido a todas las partes que no ataquen los monumentos culturales ni los centros de enseñanza, de conformidad con el derecho internacional y el derecho humanitario. Destruir el patrimonio sirio es matar al pueblo sirio por segunda vez. Olvidar su historia es negar los valores y los derechos que le son inherentes», concluyó Bokova.
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