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Dos policías patrullan frente al Palacio del Festival de Cannes, este martes. (Foto: Eric Gaillard)
C iudad Juárez, Chihuahua. 10 de mayo de 2016. (RanchoNEWS).- Cuando mañana miércoles comience la 69ª edición del festival de Cannes, la alfombra roja del Palacio de Festivales buscará convertirse en uno de los sitios más seguros de la Tierra. Porque este año la organización estará tan atenta al cine como a que nadie altere el desarrollo de los 12 días en que Cannes se transforma en el epicentro del séptimo arte. Para ello ya en el aeropuerto de Niza, el más cercano a esta ciudad, todos los pasajeros —sin excepciones para los europeos— pasan un control extra de identidad. Pero además, las sesiones de gala serán una «burbuja impenetrable», según declaran fuentes de la organización a la web The Wrap. El ministro francés de Interior, Bernard Cazeneuve, visitó ayer esta ciudad para reunirse con los mandos locales de la policía y asegurar que habrá «varios centenares de policías activos, incluyendo escuadrones de artificieros, y 400 vigilantes privados». Ya en abril, las fuerzas de seguridad realizaron un simulacro de ataque por parte de cuatro terroristas a la escalera por la que se accede al Palacio tras acabar la alfombra roja. Participaron 200 miembros de la gendarmería y según la prensa francesa los resultados no fueron satisfactorios. Y si a eso añadimos que la ciudad aumentará su población en 200.000 personas… Para concentrar esa seguridad, la Quincena de Realizadores ha eliminado algunos de sus pases nocturnos también de gala, con lo que al final el terror sí ha hecho daño al cine, con el recuerdo centrado en los ataques de noviembre en París. Gregorio Belinchón reporta desde Cannes para El País.
Habrá películas, claro. Y la sección Oficial aparece repleta de nombres tan seguros como obvios. Ken Loach vuelve por 12ª vez. Y los hermanos Dardenne —que ya tienen dos Palmas de Oro—. Y Pedro Almodóvar, que con Julieta competirá por su primera Palma, aunque él asegure que no es de lejos una de sus mayores preocupaciones. Como rivales de peso estará Nicolas Winding Refn, que vuelve con The Neon Demon —y que de paso puede recuperar la errática carrera de Keanu Reeves—. La británica Andrea Arnold, que por primera vez ha rodado en EE UU, estrenará American Honey. El rumano Christian Mungiu, otro ganador de Palma de Oro, estrena Bacalaureat. Los franceses, tras el desastre del año pasado, concursan con Olivier Assayas, y su Personal Shopper, protagonizada por Kristen Stewart (que también actúa en Café Society, la película de Woody Allen que inaugura) y habrá que prestar mucha atención a Rester Vertical, de Alain Guiraudie, autor de aquel perturbador y explícito thriller sexual llamado El desconocido del lago. Y habrá un espectacular retorno, el del holandés Paul Verhoeven, que ha dirigido a Isabelle Huppert en Elle. La última vez que Verhoeven estuvo en Cannes fue con Instinto básico, en 1992. Desde entonces ha llovido mucho —las previsiones meteorológicas solo hablan de chubascos para estos días— y Sharon Stone ha dilapidado su carrera.
La cuota del cine estadounidense de autor la encabeza un trío potente: Jim Jarmusch presenta en el concurso Paterson, y en las proyecciones de medianoche un documental sobre Iggy Pop, Gimme Danger. Jeff Nichols, que en Berlín presentó Midnight Special, trae un drama interracial basado en hechos reales titulado Loving, en el que estará su actor cabecera, Michael Shannon, aunque el protagonismo ahora recae en Joel Edgerton (que también aparecía en Midnight Special). Sean Penn estrena The Last Face, con Charlize Theron y Javier Bardem, sobre amores en mitad de conflictos africanos. Por cierto, el viernes se anuncia la presencia de Bardem y Penélope Cruz en el Mercado de Cannes para promocionar Escobar, el biopic del rey del narcotráfico que dirigirá Fernando León de Aranoa. Desde Hollywood desembarcará Jodie Foster con su thriller Money Monster, con George Clooney y Julia Roberts, sobre la desesperación a que ha empujado mucha gente la crisis económica, y Steven Spielberg con Mi amigo el gigante, adaptación de un cuento de Roald Dahl.
De los asiáticos, otro poder fáctico, se podrá ver en la Oficial los nuevos trabajos del filipino Brillante Mendoza —otro que también concursó en Berlín— y del coreano Park Chan-Wook, que ha levantado gran expectación con The handmaiden. En una Sesión Especial se estrenará el documental Exil del camboyano Rithy Panh y en Una Cierta Mirada se verá After the Storm, de Hirokazu Kore-eda.
El repaso a la representación española empieza y acaba rápido. Junto a Julieta de Almodóvar que se proyecta el martes 17, habrá un corto en la Sección Oficial: Time Code, de Juanjo Giménez Peña. En una Sesión Especial dentro de la sección Oficial se verá el nuevo trabajo de uno de los niños mimados de Cannes, el catalán Albert Serra, La mort de Louis XIV, que protagoniza Jean-Pierre Léaud. En la Semana de la Crítica estará Las mimosas, de Oliver Laxe, y en la Quincena de Realizadores el corto Decorado, de Alberto Vázquez. Con participación española también se proyecta la chilena Neruda, de Pablo Larraín. Y el productor Pedro Hernández Santos (Aquí y allá, Magical Girl) está seleccionado en la iniciativa Producer on the Move. En el Mercado del cine hay registrados 242 profesionales de 145 compañías españolas y habrá 25 filmes proyectados para compradores. Por cierto, si la presencia española parece floja, la latinoamericana es exigua: además de Larraín, en la Oficial solo estará la brasileña Aquarius, del crítico Kleber Mendoça Filho, y en Una Cierta Mirada se proyecta la argentina La larga noche de Francisco Sanctis, de Francisco Márquez y Andrea Testa.
Para el final, una de las luchas de los festivales, incrementar la cuota femenina. Habrá tres películas: Nicole Garcia, Andrea Arnold y con directora a concurso en la Sección Oficial; Geena Davis y Susan Sarandon recibirán el premio Women in Motion; la documentalista Laura Poitras (ganadora del Oscar con Citizenfour) presentará en la Quincena de Realizadores Risk, sobre Julian Assange, y en esa sección participará por primera vez en Cannes una realizadora afgana, Shahrbanoo Sadat, con Wolf and sheep.
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