RECURSOS DEL ARTISTA. Para el mural que se encuentra en Bellas Artes utilizó fotografías de él mismo y de su esposa. (Foto: Lucía Godínez / EL UNIVERSAL)
M éxico. 18 de Octubre 2006 (Juan Solís /El Universal).- A la menor provocación, David Alfaro Siqueiros dejaba el pincel y tomaba la pluma. No obstante su peculiar caligrafía y su mala ortografía, se daba a la tarea de escribir lo mismo apuntes sobre notas periodísticas que alegatos jurídicos, o cartas.
Le apasionaba el género epistolar. Mantuvo correspondencia amorosa con su esposa Angélica Arenal, ideológica con Neruda y solidaria con los presos que lo acompañaron en alguna de sus estancias en la cárcel.
Cuando la letra ya rayaba en lo abstracto, tomaba la pesada Remington para mejorar la transmisión de sus ideas. El objetivo era dejar testimonios escritos que al paso de los años fueron integrando la columna vertebral de un gran archivo, que incluye filmaciones, registros sonoros, fotografías y libros, además de documentos.
Desde 1974 el Fondo Documental David Alfaro Siqueiros se encuentra ubicado en la casa que habitó y que donó al pueblo de México como Casa de Arte Público. En algún momento fue saqueado y posteriormente abandonado. En la actualidad se encuentra en buenas condiciones de conservación, pero desorganizado.
Gracias a un apoyo de la Fundación J. Paul Getty, a principios de este año inició un proyecto de organización y descripción de los documentos. El objetivo es que para 2008 no sólo se encuentre ordenado y hayan mejorado sus condiciones, sino que además sea posible consultarlo en una base de datos.
En 2004, la Sala de Arte Público Siqueiros, con la asesoría de Martha Ochoa del Centro de Estudios sobre la Universidad, solicitó un apoyo económico a la Fundación Getty, que fue otorgado a finales del año pasado con la condición de que el proyecto se realizara en etapas.
En febrero inició el trabajo, coordinado por Horacio Muñoz y un equipo en el que participan Dabayane Amaro, Nadine Vera, Valentina de Santiago, Eduardo Cabrera y Alberto Verjovsky.
Muñoz cuenta que el proyecto está dividido en tres etapas. El primer año servirá para hacer un conteo general y un estudio de los documentos que hay. De ahí generarán un cuadro clasificatorio del acervo, una cronología de Siqueiros, y finalmente una guía del archivo.
En la segunda etapa se llevará a cabo la reorganización física de los documentos y su conservación preventiva. La última etapa consta de la creación de una base de datos para la consulta del archivo.
El 15 de diciembre culmina la primera etapa, que contó con un apoyo de 44 mil dólares, y tendrán que entregar un informe de avances a la fundación, la cual a su vez determinará la pertinencia del presupuesto solicitado para la segunda etapa, el cual asciende a 200 mil dólares. En total, el proyecto tendría un costo aproximado a los 350 mil dólares.
Los cinco fondos
El archivo está dividido en cinco acervos: el documental, el fotográfico, el cinematográfico, el sonoro y el bibliográfico.
El documental es el menos investigado y estudiado, cuenta con más de 7 mil 400 expedientes (cada uno con varios documentos), los cuales si se colocaran uno tras otro formarían una fila de más de 25 metros.
Está formado fundamentalmente por mecanoescritos, manuscritos y recortes de prensa, referidos en su mayor parte a su labor artística y a su pensamiento político.
"El periodo que Siqueiros estuvo en la cárcel, de 1960 a 1964, nos da la impresión de que es el origen del archivo -dice Dabayane Amaro-. Hay cosas centradas alrededor de este tema, aunque hay documentos que constatan que en 1936, antes de irse a la Guerra Civil española, ya Siqueiros estaba pensando en hacer un archivo."