El poeta. (Foto: Archivo)C iudad Juárez, Chihuahua. 19 de marzo de 2013. (RanchoNEWS).- El XXVIII Premio de Poesía Hiperión, fallado el pasado jueves, ha recaído sobre José Manuel Díez, autor de Baile de máscaras. De los 227 libros presentados, el jurado deliberó sobre los doce finalistas y se decidió finalmente y por unanimidad por el poemario de Díez. El galardón se concede a a un poemario inédito en lengua castellana escrito por un autor menor de 35 años, y se trata de uno de los premios literarios más prestigiosos en el ámbito de la poesía joven. La obra se publicará en mayo y será presentada por Ediciones Hiperión. Una nota de Laura Martín para El Cultural:
«Tu elección ha sido un paseo militar, estaba cantado», le dijo por teléfono Benjamín Prado, uno de los miembros del jurado, al felicitarle. La noticia la conoció José Manuel Díez (Zafra, Badajoz, 1978) el mismo jueves, cuando Gabriel Munárriz, hija del editor de Hiperión, le llamó para decirle: «no soy yo quien te debería llamar, pero quería ser yo quien te diera la feliz noticia». Díez ya tiene en su haber dos poemarios publicados, 42 (Ed. Lusitania) y La caja vacía (Visor), con el que ganó el Premio Cáceres Patrimonio de la Humanidad en 2006, pero explica a El Cultural que siempre había soñado con poder participar en este concurso. No podría haber sido más oportuno, porque al alcanzar este año el límite de edad era su última oportunidad.
Asegura que publica con intención de que su arte, que no su producto, llegue a más gente, y que las presentaciones de sus libros y todo el marketing que acompaña a una nueva creación nunca le han gustado más de «lo justo y necesario». «Mi forma de entender la poesía es muy de puertas para dentro, de sentarme con el folio y expresarme. Vivo gracias a la música y a la poesía nunca la he visto como un medio de vida, sino como un modo». Está convencido de que su filosofía de escritura va a ser la misma a partir de ahora, pues busca la calidad, no la cantidad. Y para reforzarse, tira de un maestro, Antonio Machado, que nunca llegó a publicar una tirada de más de 500 ejemplares.
La poesía le acompaña desde muy pequeño, primero como un placer lector, y después como una indagación como escritor. Antes que nada, se considera poeta. Y su obra se basa en la empatía, en «una realidad con la que no estoy de acuerdo ni a gusto, y que me gustaría transformar en la medidad de lo posible. Mis otros libros eran un trabajo de interiorización. Este mira afuera. Es quizás más culturalista. Mi poesía intenta ir del individuo a lo plural». Sus poetas de cabecera han ido cambiando con los años, desde Machado a Miguel Hernández, y más recientes José Emilio Pacheco, Goytisolo, Basilio Sánchez y Pere Gimferrer. Al despedirse, recuerda también a Gabriel Celaya y su frase «la poesía es un arma cargada de futuro». «Y de presente», añade Díez, con un agradecimiento a todas aquellas personas que se toman un rato para abrir un libro de poesía, porque así se pueden cambiar muchas cosas.
Con anterioridad había ganado el Premio Nacional de Poesía Joven (Lorca, Murcia, 2003), el Premio conmemorativo Luis Rosales (Madrid, 2004) y el Premio Vicente Aleixandre (Madrid, 2005). Su libro Baile de máscaras, en el que ha estado trabajando durante los cuatro últimos años, evoca a través de diversos personajes y situaciones reales o imaginadas momentos dramáticos que oscilan cronológicamente desde poetas como el persa Saadi o Góngora hasta Derek Walcott.
Además, compagina la poesía escrita con la poesía visual, el relato corto y la música, como autor principal del grupo El Desván del Duende, con el que ha realizado tres discos hasta la fecha. Por su plataforma «Si se quiere se puede» el grupo ha recibido este año de manos de la princesa de Asturias el Premio FEDER 2013 de la Federación Española de Enfermedades Raras. En 2008 compartió junto al cantaor José Mercé el galardón de Defensor de la cultura extremeña, otorgado por el Ayuntamiento de Plasencia y las comarcas del Norte de Extremadura.
El jurado ha estado formado por los poetas Francisco Castaño, Luis García Montero, Raquel Lanseros, Jesús Munárriz y Benjamín Prado.
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