LA HABITACIÓN OSCURA
Junto a tu habitación, la habitación oscura.
Vives en el umbral de su puerta invisible,
ordenando rutinas, clasificando horas
hasta el momento exacto. Eres el elegido
y has aprendido el arte de paladear la espera.
De pronto, algo te invoca por tu nombre.
Y pasas.
La luz negra es silencio que ilumina el sonido
del prodigio. Lo palpas un instante. Y se va.
Y eso es todo. Después, sales de nuevo y vuelves
a esta vieja tarea de destruir el mundo.